La cuenta atrás para diciembre sigue corriendo. Los días se disipan a pares, y a la vez se hacen eternos. Cada uno los apura de la mejor manera que puede, intentando cumplir esos propósitos de año nuevo que aún figuran en la lista sin tacharse. Muchos de ellos, títulos de series y películas que se hacen interminables. Yo, personalmente, tengo el 18 de diciembre marcado en rojo, por el estreno de la surcoreana Sweet Home, que muy pronto llega a Netflix. Y hablando de la Gran N del servicio en streaming, quien nos trae nuevas noticias es el mismísimo Nicolas Cage.
Siguen llegando, aunque quizás de manera aislada, las últimas sorpresas del 2020. Como la anterior a la que hacía referencia. Series que llegan de manera adelantada, a tiempo para ser tu regalo de Navidad, o un poquito retardadas para la fecha 25. Pero también, muy poquito a poco, podemos ir conociendo las nuevas apuestas para el primero del año 2021. Y sobre la serie que versaremos a continuación también llega en festividades. No bajará por la chimenea, pero si entrará por la ventana montado en camello. Nicolas Cage aterriza en Netflix con su nuevo proyecto, La historia de las palabrotas, el día 5 de enero de 2021.
Así es, el mismo día 5 de enero. Dentro de escasas semanas, dándonos la bienvenida al nuevo año de manera hilarante. Con la comedia History of Swear Words, La historia de las palabrotas. Así es la nueva apuesta de Netflix, con Nicolas Cage.
El nuevo proyecto de Nicolas Cage
Así versa la sinopsis oficial de History of Swear Words (La historia de las palabrotas): «Una educación en improperios: la lección de historia que no sabías que necesitabas. Historia de las palabrotas, presentada por Nicolas Cage, es una serie escandalosa y orgullosamente profana que explora los orígenes, el uso en la cultura pop, la ciencia y el impacto cultural de las palabrotas. A través de entrevistas con expertos en etimología, cultura pop, historiadores y artistas, la serie de seis episodios se sumerge en los orígenes de ‘F ** k’, ‘Sh * t’, ‘B * tch’, ‘D ** k,’ ‘Pu ** y’ y ‘Maldita sea’».

Bueno, qué más da. Para escribir no hace falta tener pelos en la lengua. Y tal y como has leído, esta serie escandalosa y orgullosamente profana explorará, de manera muy cómica además de fehaciente, cual es el origen de palabras como fuck, shit, bitch, dick o pussy. O, en cristiano, la proveniencia de palabras como follar, mierda, puta/o, polla o coño, y cuál es su uso y su impacto cultura.
En la nueva apuesta de Netflix, nuestro Ghost Rider no estará solo
El actor Nicolas Cage es la estrella principal de La historia de las palabrotas. Pero, obviamente, no estará solo. Más que una serie, es un programa. O, al menos, tiene esa atmósfera que se respira en los documentales y reportajes, a través de las entrevistas. La presencia de expertos en la tarea, que van desde académicos que estudian ciencias cognitivas y estudios feministas, hasta críticos de cine y lexicógrafos, ayudará en la explicación de los orígenes y en la asimilación cultural de cada una de las palabras.
Y además de todas ellas y ellos, La historia de las palabrotas de Nicolas Cage cuenta con una amplia lista de comediantes, donde figuran personajes como Joel Kim Booster (Sunnyside), DeRay Davis (DeRay Davis: How to Act Black), el rapero Open Mike Eagle, Nikki Glaser (Not Safe with Nikki Glaser), Patti Harrison (Shrill), London Hughes (Don’t Hate the Playaz).
Jim Jefferies (The Jim Jefferies Show), Zainab Johnson (100 humanos), Nick Offerman (Parks and Recreation), Sarah Silverman (Wreck-It Ralph/Rompe Ralph), Baron Vaughn (SYFY Wire’s the Great Debate) e Isiah Whitlock. Jr. (Alocada convención) completan la lista de la nueva apuesta de Netflix.
Otros papeles de Nicolas Cage
Aunque el actor es de sobra conocido en todo el mundo, creemos que no está de más mencionar los trabajos más destacados de Nicolas Cage. Como aquella que mencionamos más atrás en uno de los subtítulos, encarnando a Ghost Rider en la película homónima. Leaving Las Vegas (Mike Figgis, 1995), protagonizada por Elisabeth Shue y él mismo. Con la que fue galardonado, entre otros, con la Concha de Plata y el Premio Oscar, en la categoría de mejor actor.
El ladrón de orquídeas (Spike Jonze, 2002), junto a Meryl Streep, donde interpreta a un neurótico y deprimido guionista que intenta adaptar un libro a guion. Y donde el personaje tiene el placer de reunirse con el experto Robert Mckee (aunque no con el de verdad). Y este mismo año se embarcó en varios proyectos, como Jiu Jitsu (Dimitri Logothetis) o en Los Croods: Una nueva era (Joel Crawford), prestándole la voz al personaje de Grug.