La hortaliza llamada calabacín es tan antigua como desconocida. Muchas veces no sabemos en qué platos utilizarla o de qué manera. Una forma de hacerlo es rellenándolos de un sabroso picadillo.
En el siguiente artículo te explicamos cómo se elaboran unos estupendos calabacines rellenos de jamón y queso. No te lo pierdas, están de ‘10’ y te encantarán.
Calabacines rellenos

El calabacín es una hortaliza a la cuál se le pueden buscar muchas alternativas a su cocinado. Lo mismo nos sirven para una sopa que los podemos saltear o cocer como complemento perfecto de una carne o pescado. O como en este caso, rellenos de un picadillo concreto.
Por su característico sabor, este producto es perfecto para combinarlo con sabores salados. Es por eso que, en el caso de rellenarlos con jamón y queso, el resultado en boca es sorprendentemente delicioso.
Contraste de sabores

Resulta que el calabacín tiene un sabor muy dulzón, entonces, lo que prima en este plato es lo que obtenemos del contraste de sabores. Estos suelen funcionar bien, aunque a veces podemos encontrarnos con mezclas tan sabrosas como extrañas.
Hay quien mezcla, por ejemplo, el chocolate de untar con mortadela o jamón. En este caso, la fusión no es tan opuesta, aunque en cierto sentido se acerca a ello.
Receta de aprovechamiento

Los calabacines rellenos, también, son una buena oportunidad para aprovechar toda nuestra compra. Es posible que tus hortalizas lleven un tiempo pidiendo paso desde la nevera, pero por diferentes motivos, aún no los has cocinado.
Antes de que se te pudran y ya no te sean útiles, prepara un sabroso picadillo y rellena tus calabacines con él. Es una riquísima forma de aprovechar todos tus ingredientes para evitar que acaben en el contenedor.
Ingredientes

Para elaborar esta maravillosa receta necesitaremos ingredientes fáciles de encontrar y de usar. Un plato, por lo tanto, compuesto por ingredientes del día a día que no hará que te compliques la vida.
Concretamente necesitaremos cuatro calabacines pequeños (esto dependerá del número de comensales), una cebolla, 100 gramos de jamón cocido, otros 100 gramos de jamón serrano, 60 gramos de queso crema, 60 mililitros de leche evaporada, 60 gramos de queso rallado, 30 gramos de queso en polvo, aceite de oliva virgen extra, pimienta negra y sal.
Lo primero

Lo primero que debemos hacer es lavar bien nuestros calabacines, secarlos y cortarlos por lo largo en dos mitades. Con la ayuda de un cuchillo hay que marcar la pulpa de nuestras hortalizas con forma de cruces, como si se tratara de una rejilla.
A continuación, dispón los calabacines en una bandeja de horno, añádeles un poco de sal por encima y un hilo de aceite. Hornéalos durante 30 minutos a 180 grados.
Mientras tanto

Mientras los calabacines se van haciendo en el horno, no pierdas tiempo y prepara el relleno. Pica la cebolla y póchala, con la ayuda de un poquito de aceite y una pizca de sal, en una sartén tapada a fuego lento.
Además, añádele los dos tipos de jamón, también picaditos, cuando la cebolla esté a medio hacer. Ahora, para continuar la elaboración del picadillo, necesitaremos la pulpa de los calabacines.
Relleno

Una vez los calabacines están horneados, debemos sacar la pulpa de estos con una cuchara. Es importante tener mucho cuidado de no romper la cáscara porque esta será el soporte de nuestro picadillo.
La pulpa que sacamos del calabacín la añadimos al relleno de jamón y cebolla. Además, echamos el queso crema y la leche evaporada en la mezcla. Una vez estén todos los ingredientes agregados, pruébalo y ponlo a punto de sal si fuera necesario.
Rellena y hornea

Una vez tengas el relleno en su justa medida, toca introducirlo en nuestras hortalizas. Para ello, rellena estos con la mezcla con cuidado de no romper la estructura del calabacín.
Cuando los tengas rellenos, ya están listos para hornear. Pero antes, cubre el picadillo con queso rallado y termina espolvoreando con el queso de polvo. Mételo en el horno para gratinar tu elaboración durante cinco minutos, lo indicado para que se doren.
Sácalos y prepárate para disfrutar de esta magnífica receta. No te arrepentirás de haber seguido estos sencillos pasos. Este plato es ideal para tus comidas o cenas, y por supuesto, para compartirlo con tu familia y amigos.
Consejos y trucos

Este plato se puede elaborar así, peor también hay otras formas que son igual de óptimas. Si quieres acelerar el proceso del cocinado, asa los calabacines en el microondas durante 15 minutos, en lugar de hacerlos al horno. Para ello prepáralos de la misma manera, pero tápalos en el microondas.
En este caso hemos utilizado leche evaporada y queso crema para darle textura al relleno, pero se puede hacer también con bechamel. Lo que ocurre es que la bechamel es más pesada y más calórica.
En lugar de la leche evaporada se puede emplear leche normal, y en caso de que no tengas ningún tipo de leche, puedes hacer la salsa con 60 gramos de nata (sin el queso crema). Por último, prueba otros tipos de relleno, por ejemplo, pollo con quinoa, carne picada con tomate, o un picadillo de berenjena.
Otras recetas con calabacín

El calabacín es un fantástico ingrediente que se utiliza en diversas recetas. Su cocinado varía según nuestras intenciones, aunque de igual manera siempre está riquísimo.
Algunos ejemplos de otras recetas donde el calabacín es el ingrediente principal son las siguientes: Espaguetis de calabacín con atún, zapatillos rellenos de arroz y carne o pastel de calabacín al microondas.