Astrofísico Juan Ángel Vaquerizo analiza el futuro de la exploración de Marte

El astrofísico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Juan Ángel Vaquerizo ha publicado un libro sobre la exploración de Marte, donde ha destacado que España es el único país que cuenta con dos estaciones medioambientales operativas en la actualidad en el planeta rojo a donde se enviará la primera misión tripulada en 2033.

El divulgador analiza la exploración de Marte desde las antiguas civilizaciones hasta las últimas misiones en un nuevo libro en el que explica el enigma de la vida y los hallazgos sobre el que se considera mejor candidato para demostrar la existencia de vida fuera de la Tierra.* Vaquerizo es astrofísico y coordinador de la Unidad de Cultura Científica del Centro de Astrobiología (CSIC-INTA) y autor del nuevo número de la colección ‘¿Qué sabemos de?’ que publica el CSIC y Catarata que incluye el conocimiento que hay hasta la fecha sobre el planeta rojo, sus diferencias y semejanzas con la Tierra o la historia de su exploración.

«Marte es especial porque ha provocado un profundo impacto en la cultura y ha impulsado de modo decisivo el avance de la ciencia en los últimos siglos. A día de hoy, es el primer objetivo astrobiológico, ya que es el mejor escenario para demostrar la existencia de vida fuera de la Tierra», señala Vaquerizo.

Vaquerizo asegura que en el presente se están viviendo momentos «cruciales» en la exploración marciana y «tanto es así que el primer ser humano que pise Marte ya ha nacido», y todo apunta a que «algunos de los grandes enigmas que aún esconde el planeta rojo podrían ser resueltos durante las próximas décadas».

«Marte fue el responsable de que la Tierra, y con ella el ser humano, abandonase para siempre el centro del universo», comenta el autor.

Tras innumerables observaciones recopiladas durante siglos, destaca en el libro que «en el siglo XVI se cambiaron las órbitas circulares por trayectorias elípticas y el modelo geocéntrico se sustituyó por el heliocéntrico, todo para hacer encajar esos movimientos extraños que realizaba el ‘excéntrico’ planeta rojo».

La obra analiza también los conocidos como canales de Marte que se hicieron famosos y dieron pie a la hipótesis de una civilización marciana que llenó páginas de periódicos y artículos científicos en el siglo pasado hasta que se llegó a la conclusión de que todo había sido una ilusión óptica.

«Se puede decir que Marte es un devorador de naves espaciales, ya que de las 44 misiones que han sido enviadas a territorio marciano hasta 2020, solo 24 han conseguido cumplir su objetivo. Actualmente hay tres misiones viajando hacia Marte, y si todo va bien, llegarán en 2021», describe el autor.

El astrofísico recuerda que en 1965 la Mariner 4 logró el hito histórico de sobrevolar Marte, y, desde entonces, la comunidad científica no ha parado de afrontar nuevos retos en la exploración marciana: colocar una nave en órbita marciana, aterrizar en el planeta, tomar imágenes de la superficie de Marte o llevar los Mars Explorations Rovers (MER) y conseguir que estos ingenios facilitaran todo tipo de muestras.

Opportunity, uno de los dos rovers lanzados en 2004 por la NASA, funcionó durante 15 años, «una marca increíble que difícilmente será superada por otro robot en la superficie de otro planeta».

ESPAÑA EN MARTE

El científico recuerda que también la comunidad científica española ha participado de forma destacada en el desembarco robótico marciano. La misión Mars Science Laboratory (MSL) que aterrizó en Marte en agosto de 2012 con el rover Curiosity a bordo -el más grande enviado hasta el momento- representó un antes y un después para la exploración espacial en España.

«Por primera vez en su historia, nuestro país participaba en una misión a otro planeta liderando un instrumento científico. Un equipo encabezado por el Centro de Astrobiología (CAB) diseñó y construyó REMS (Rover Environmental Monitoring Station), una estación medioambiental dotada de sensores que se encargaría de la evaluación ambiental de la zona de Marte por la que se desplazara el rover», comenta Juan Ángel Vaquerizo.

Además, la antena de alta ganancia utilizada para el envío de datos a la Tierra se desarrolló en España. La misión Insight, que amartizó en 2018, también cuenta con instrumentación made in Spain: una estación meteorológica con dos sensores de velocidad y dirección del viento y temperatura denominados TWINS.

«Con ambos instrumentos funcionando en Marte, somos el único país con dos estaciones medioambientales operativas actualmente en el planeta», destaca Juan Ángel Vaquerizo.

Asimismo, añade que Mars 2020, la última misión de la NASA con destino marciano tiene prevista su llegada en febrero de 2021 y en ella viaja MEDA, la tercera estación medioambiental liderada por el CAB.

«Con ella en Marte, tendremos la primera red de estaciones medioambientales en otro planeta. Y será española», agrega.

Los enigmas de Marte A pesar de la ingente cantidad de información obtenida hasta la fecha, quedan muchos interrogantes por aclarar acerca de nuestro planeta hermano.

«Uno de los descubrimientos fundamentales de la exploración robótica marciana ha sido constatar que Marte fue, anteriormente, bastante parecido a la Tierra, con abundante agua líquida en su superficie, pero es necesario saber durante cuánto tiempo las condiciones en Marte permitieron al agua mantenerse en estado líquido en la superficie», indica el responsable de la Unidad de Cultura Científica del CAB.

El origen del abundante metano presente en el planeta y el mecanismo por el que se elimina en la atmósfera tan rápidamente también es un misterio sin resolver, entre otros muchos.

Por último, refleja en su libro que el siguiente gran salto será la llegada del ser humano al planeta Marte que se espera para el año 2033 y será un momento «trascendental» quizá impulsado por el instinto de supervivencia o por el «afán de conquista de nuevos entornos que los organismos vivos llevan impreso en sus genes».