La dictadura de la deuda que ahoga a España y a medio mundo

En 2012, en plena crisis tras el crash de 2008, aparecía en YouTube un documental animado explicando cómo funciona en realidad el mundo económicamente, con un título que lo decía todo: ‘Dinero es deuda’. Por entonces España aún no estaba padeciendo el tsunami de esta crisis, que le llegaría al año siguiente, pero ya por entonces su deuda sobre el PIB era preocupante, como otros países del mundo. Hoy en día, en cambio, nos parecería una bendición: por entonces estaba en aproximadamente un 95%; actualmente está ya en el 120% del PIB.

Muchos dirán que está lejos de lo que podría ser apocalíptico 220% de Japón, pero aquí hay que distinguir entre deuda privada y pública. En el país nipón prima lo primero; en España y otros países occidentales, lo segundo. De cualquier forma, no solo toda la economía parece basarse en la deuda, sino en la «tranquilidad» no de que se vaya a pagar tarde o temprano, sino de que es impagable, y por tanto, aplicar el dicho de «demasiado grande para caer», no sólo a determinados países al límite como España, Italia o el mismísimo Estados Unidos, sino a toda la economía mundial.

EUREKA: DINERO INFINITO

O casi, gracias a dos hitos históricos: el primero ocurrió hace 300 años, cuando el dinero se basaba en un valor intrínseco, y la usura estaba prohibida. La gente compraba bienes y servicios y el dinero, oro o plata que no gastaban, lo guardaban. Pero, ¿por qué no hacerlo más cómodo y en vez de ir cargando con pesadas monedas y lingotes, usar papel? Se empezaron a usar cheques como si fuera oro.

CREAR DINERO DE LA NADA BAJO LA SEGURIDAD DE QUE LOS PRESTAMISTAS NO IBAN A RETIRAR TODO EL DINERO Y AL MISMO TIEMPO

Pero, además de esta comodidad, se vio que los depositantes casi nunca iban a retirar el oro y menos aún todos a la vez. Estos dos hechos fueron la clave que cambió todo: prestar oro con interés. Es más, con el papel moneda se fueron afianzando los préstamos y se acabaron realizando en cheques. Como nadie sacaba el oro se podían hacer más cheques en función de los cheques del oro, aparte del oro mismo. Nadie sospechaba y si lo hacían enseñaba el oro depositado que no había sido tocado y listo. Así surgió el concepto de interés y con ello nació la banca.

Aquí llega el otro hito histórico, más reciente, de los años 70 del siglo XX: el abandono del patrón oro por parte de la Reserva Federal americana. Nació el sistema actual: crear dinero de la nada bajo la seguridad de que los prestamistas no iban a retirar todo el dinero y al mismo tiempo. El flujo de caja de los bancos se fue reduciendo. Establecieron un límite de 9 a 1 (9 artificial a 1 real). En caso de crack, los bancos centrales apoyarían a los locales. Pues aún no llegamos a ese abandono del patrón oro, que ocurrió con Nixon y que nos ha llevado a la situación actual y ver flujos de caja por encima de 30 a 1 y más allá.

Deuda Estados Unidos

ESTADOS UNIDOS O EL DELIRIO DE LA DEUDA

El penúltimo capítulo de la deuda y sus consecuencias es el problema que se le viene a Estados Unidos tras haber alcanzado ya el techo de deuda el pasado día 19 y tener que solicitar al Congreso más límite, algo que al menos confiere un control entre el Tesoro y el Gobierno, cosa que no ocurre en España u otros países.

Ante ello, ha surgido el concepto de moneda del billón de dólares, una moneda de platino emitida por el Tesoro, virtual, que sería como hace borrón y cuenta nueva o al menos «aliviar» esa deuda gigantesca, siempre al borde de la suspensión de pagos. Pero esta situación no es nueva, ya que ese borde se ha sobrepasado 78 veces desde 1960. El techo actual se cifra en 31,4 billones de dólares.

Lo más sorprendente es que hay economistas que estarían a favor de la «huida hacia delante». “¿Debería el presidente Obama estar dispuesto a imprimir una moneda de platino de 1 billón de dólares si los republicanos intentan obligar a Estados Unidos a que entre en mora? Sí, absolutamente”: son palabras escritas en The New York Times por el Nobel de Economía Paul Krugman en 2013, tras otro techo de deuda durante el mandato de Obama.