Paterna extiende al casco urbano la prueba piloto de reducción de población de mosquito tigre

El casco urbano de la localidad valenciana de Paterna se ha sumado a la prueba piloto para el control del mosquito tigre mediante la aplicación de la Técnica del Insecto Estéril (TIE) que funciona desde hace unos meses en La Canyada.

Durante la mañana de este lunes se han colocado depósitos para el control de la población de mosquito tigre en una veintena de localizaciones del núcleo poblacional, en zonas verdes como el Parc Central, Avenida Europa o en la calle Benimar, entre otras, según ha detallado el consistorio en un comunicado.

La TIE consiste en la cría de machos de la especie a controlar, en este caso el mosquito tigre, su esterilización y su liberación en zonas urbanas. Los machos estériles, que no pican, al ser liberados, se aparean con las hembras silvestres, y éstas ponen huevos que no evolucionan, con lo que la población se reduce de manera importante.

La teniente alcalde de Movilidad, Seguridad y Transición Ecológica, Nuria Campos, ha destacado que este método es una técnica de control biológico que complementa las actuaciones que realiza el consistorio para «combatir la presencia de este insecto, como la revisión constante de lugares propensos al estancamiento de aguas».

En este sentido, ha apuntado que esta prueba piloto se inició el pasado mes de mayo en La Canyada y La Vallesa y, ahora, se ha ampliado al casco urbano con el objetivo de, «una vez cuantificada la población de este insecto, realizar sueltas de machos estériles de mosquito tigre, que no pican, con el objetivo de que los huevos sean infértiles y mermar la población».

La edil ha indicado que la TIE ya se ha empleado en otras poblaciones, en las que se ha obtenido reducciones poblacionales de mosquito de hasta el 78 por ciento, una situación que tiene un impacto «muy positivo» sobre la ciudadanía en la reducción de molestias por picaduras, y, además, en el control vectorial, ya que es una especie potencialmente transmisora de enfermedades como el dengue, zika y chikungunya.

Tras probar su eficacia en entornos urbanos pequeños y núcleos poblacionales reducidos, la Conselleria de Agricultura, que coordina este proyecto, ha planteado su aplicación piloto en una gran ciudad que cuenta también con zona residencial y masa forestal, por lo que aunque inicialmente los trabajos se iniciaran en La Canyada y La Vallesa, se han extendido al casco urbano.