Netflix le corta el grifo al cine de autor

Cada vez es más difícil tropezarse con películas originales en el cine. Apartando el género del terror, que siempre camina a su propio ritmo, parece que todos los grandes éxitos del cine modernos son franquicias, con cada vez menos ejemplos de cine de autor en las salas. En ese panorama, Netflix se había convertido en un refugio para los grandes autores, financiando obras de Martin Scorsese, Noah Baumbach y Jane Campion.

Sin embargo, el gigante del streaming ha visto como su número de subscriptores se reduce y sus ganancias a final de año no son lo que eran. La aparición de competidores como Disney y HBO, que además pueden contar con franquicias populares como Star Wars, Marvel y DC o Amazon, que cuenta con los fondos casi infinitos de su marketplace. Esto ha obligado a Netflix a replantearse muchas cosas, entre ellas su inversión trabajos de autor demasiado costosos.

Es algo que se puede ver en los planes futuros de la empresa, en los que rechazan los “costosos proyectos de vanidad” de los grandes autores, buscando, en cambio, hits de acción como ‘El Agente Invisible’ o ‘Red Notice’.

LAS NUEVAS PELÍCULAS DE NETFLIX

Lo cierto es que el cambio de mentalidad para producir películas de la empresa ha cambiado, y es evidente en sus estrenos para este año. Sumando grandes estrellas como Dwayne ‘The Rock’ Johnson o Ryan Gosling en cintas de acción de alto presupuesto. Esto les permitió generar su estreno más grande del año pasado, ‘Red Notice’, pero son cintas que tienen un problema: No tienen vida a largo plazo. 

‘Red Notice’ justamente es el ejemplo perfecto. A pesar de su éxito inicial y de contar no solo con Johnson, sino también con Gal Gadot y Ryan Reinolds la cinta paso del primer lugar del top 10 global del servicio a desaparecer de la lista en un par de semanas. Es el mismo problema que enfrentaron este año ‘El agente invisible’, para la que reclutaron no solo a los directores de Capitan America sino también al propio Chris Evans, y a ‘Cherry’ que contaba con Tom Holland.

Sin embargo, son apuestas más seguras, que siempre pueden ocupar al espectador un domingo, o bien distraerlo antes del estreno de productos más fiables como ‘Stranger Things’ o ‘Cobra Kai’. Son ciertamente puntos que no pueden lograr películas más complicadas como ‘El Irlandés’, el réquiem de tres horas de Scorsese al cine de mafiosos, o ‘El poder del perro’, la lenta deconstrucción del Western de Jane Campion.

LA DERROTA EN LOS PREMIOS

Pero además de no poner tantos ojos en la plataforma, los estrenos de Netflix han fallado en conseguir su otro objetivo: Un Óscar a mejor película. A pesar de que las cintas de que Scorsese, Baumbach, Campion y Adam McKay sumaron nominaciones en la categoría no llegaron a triunfar, y tuvieron que conformarse con el «honor de la nominación».

Por si fuera poco, Apple+ puede presumir de ser el primer servicio de streaming en ganar un el premio mayor. ‘Coda’ superó a la favorita, ‘El poder del perro’ de Netflix, en la ceremonia, lo que fue visto dentro de la compañía como una vergüenza. Además, ya no parecen demasiado preocupados por conseguir prestigio como casa productora. 

A pesar de todo, la plataforma aún tiene planeados algunos estrenos de películas de autor. Aunque ya salieron de la controversial ‘Blonde’ los próximos meses verán el estreno de proyectos de Guillermo del Toro, que reinventa desde la oscuridad el cuento de ‘Pinocho’, y de Iñarritú, que se lanza al agua de la autobiografía con su ‘Bardo’. Mención aparte merece ‘Glass Onion’ de Ryan Johnson, secuela de ‘Puñales por la Espalda’ con la que la productora planea construir su propia «franquicia de autor», si tal cosa es posible.

OTRAS OPCIONES PARA LOS MAESTROS

Al menos de momento, los grandes cineastas parecen haber conseguido otro hogar en la casa productora de Apple. La empresa se encargó de financiar y distribuir ‘The Fabelmans’, la cinta autobiográfica de Steven Spielberg y está encargada de producir y distribuir la próxima ‘Killers of the Flower Moon’ donde Scorsese se reúne con sus dos colaboradores más frecuentes: Robert De Niro y Leonardo DiCaprio.

Además, para los cineastas, Apple está ofreciendo algo que Netflix nunca se ha planteado: Estrenar las cintas en la gran pantalla. Según el cálculo de la empresa tecnológica, estrenar las cintas exclusivamente en salas es mejor negocio, y genera más prestigio, que reducirlas a la pantalla chica. Es cierto que el modelo de servicio de la empresa de la manzana es otro, es más un complemento a sus productos tecnológicos que una ganancia en sí misma.

Pero para Netflix estas grandes apuestas por productos de nicho parecen haber llegado a su fin. Por ahora, la controversial ‘Blonde’, demasiado discutida para ser una contendiente seria en la temporada de premios, parece ser el último clavo de esta faceta de la compañía. Un hecho lamentable ahora que las salas se atiborran únicamente de secuelas, adaptaciones y refritos.