Por regla general no son pocos los platos estadounidenses que se asocian con comida rápida y restaurantes baratos. Es natural, teniendo en cuenta la gran cantidad de franquicias con origen americano que han logrado una enorme popularidad en España durante las últimas décadas. Todos conocemos ejemplos, ¿verdad’ Aún así, hay otras alternativas que también tienen su origen en USA y que a veces no son tan conocidas, como es el caso de los perritos calientes rebozados o, como se conocen en su país, corn dogs.
Básicamente se trata de un perrito caliente rebozado y, dado lo sabroso que resulta, no es extraño que haga furor en Estados Unidos. Lo bueno, no obstante, es que también se pueden preparar en casa sin demasiadas complicaciones. Te enseñamos cómo y te contamos algunas cosillas más sobre esta receta y su nacimiento.
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Perritos calientes rebozados: una receta, varios nombres
Los corn dogs no son tan conocidos en España como lo pueden ser las hamburguesas, el pollo rebozado o los propios perritos calientes, primos hermanos de este plato. Entre otras cosas, porque su denominación varía dependiendo del lugar. En origen en Estados Unidos son conocidos como corn dogs o corndogs, todo junto, mientras que en su vecino del norte, Canadá, están bautizados como pogos. En México, por su parte, se refieren a este plato, que también es muy popular, como banderillas.
Al igual que sucede con otras recetas parecidas, los corn dogs comenzaron a volverse muy famosos en América a partir de los años cuarenta, cuando empezaron a venderse sobre todo en puestos callejeros y sitios similares. Aún así, como veremos a continuación, hacerlos en casa es sencillo, y suelen gustar a todo el mundo, en especial a los más pequeños.
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¿Qué hace falta para preparar corn dogs o perritos calientes rebozados?
Lo primero que hace falta para hacer este plato son salchichas. De las que vienen en paquetes tipo Frankfurt. Es decir, las mismas que se usan también para los perritos caliente normales y corrientes. De la misma forma, hace falta harina de maíz, harina de trigo, aceite, sal, huevos, azúcar leche y levadura en polvo.
Pueden parecer muchas cosas así de primeras, pero a decir verdad la receta es muy fácil, como veremos a continuación.
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Perritos calientes rebozados: cómo preparar la receta
Al ser una receta popular en Estados Unidos, hay ciertas variaciones a la hora de hacer los corn dogs, pero la base casi siempre es la misma. Por ejemplo, como estos suelen consumirse a modo de aperitivo o para acompañar otros platos, lo más normal es cortar las salchichas por la mitad, para que cada unidad después quede más manejable.
Acto seguido, se introduce un palo de brocheta típico en cada salchicha, para luego poder sujetarlas sin problemas. Estos, por su parte, se pueden encontrar hoy en día no solo en muchos supermercados, sino en cadenas de tiendas de distinta índole, y su precio no suele pasar de un euro.
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El rebozado para los perritos calientes
Aunque la receta es muy sencilla, solo tiene un secreto, que además es lo que hace que el plató esté tan rico: su rebozado. Para ello, hay que coger un recipiente, echar en él el huevo y la leche y batirlo todo bien hasta que quede perfectamente unificado.
Por otro lado, en otro bol se mezclan los dos tipos de harina, la de maíz y la de trigo, el azúcar y el polvo de hornear. También es el momento de echarle un poco de sal, pero sin pasarse, porque después cuando el plato esté ya terminado se le puede añadir otro poco. En cualquier caso, una vez listo, se mezclan ambos recipientes, el que tiene la leche y el huevo unidos y el otro y se mezcla el resultado de nuevo, hasta el momento en el que quede una especie de masa. Lo que hemos dicho: la clave de la receta.
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Solo queda freír los perritos calientes rebozados
Una vez se tiene la masa lista, el proceso es de lo más sencillo. En una sartén se pone aceite de oliva en abundancia a calentar y, una vez esté listo, se introduce cada salchicha en la masa y se lleva fríe, como cualquier otro tipo de rebozado. Solo son necesarios unos minutos para cada unidad, hasta que se aprecie que estas empiezan a estar más o menos tostadas por fuera, pero sin quemarse.
Por último, cuando las salchichas rebozadas luzcan crujientes, se sacan y se van poniendo en papel de cocina absorbente, para retirar el exceso de aceite que pueda quedar.
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Con qué acompañar unos perritos calientes rebozados o corn dogs
Es muy común usar este plato como aperitivo, por ejemplo cuando vienen visita a casa. Es fácil de hacer, no lleva apenas tiempo y suelen convertirse en todo un éxito. Lo único, eso sí, hay que servirlo caliente, que es como está bueno.
Por lo demás, unas patatas fritas o unas nuggets pueden ser los acompañantes más idóneos para la receta. Además de echarle kétchup y mostaza, o cualquier otra salsa.
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