Algo tan habitual y cotidiano como es cruzar los brazos, puede tener un significado más allá del propio gesto. Puede que lo hagas porque simplemente no sabes qué hacer con tus manos, porque estás enfadado o porque sientes inseguridad. En cualquier caso, la forma en que los cruces puede desvelar cómo es tu personalidad.
[nextpage]
¿Por qué se cruzan los brazos de una forma determinada?
Cada persona cruza los brazos de manera concreta. Es más, probablemente si intenta hacerlo de otra forma, además de costarle algo más, puede que le parezca incluso una postura incómoda y nada natural. La verdad es que la mayor parte de la gente sigue un patrón a la hora de cruzar los brazos y como curiosidad, muchos son los que lo hacen colocando el antebrazo izquierdo en la zona superior. Solo unas pocas personas ponen un brazo o el otro indistintamente sin pensarlo o bien cruzan los brazos con las dos manos por encima. Un grupo más pequeño esconde ambas manos bajo los brazos.
[/nextpage][nextpage]
Tu lado dominante
El patrón de cruzar los brazos es parecido a lo que sucede con otro tipo de acciones como por ejemplo, coger a un bebé en brazos. Hay quien pone la cabeza del pequeño en el lado izquierdo y otros en el derecho. Igual al cruzar las piernas. Puede que normalmente pongas la derecha sobre la izquierda o al contrario. Es probable que estas preferencias se repitan en estas acciones dependiendo de tu lado dominante.
[/nextpage][nextpage]
Preferencias aleatorias
En todos los casos, la preferencia de cruzar las piernas o los brazos de una forma u otra, son preferencias aleatorias y no genéticas. Suelen ser escogidas durante la infancia que es cuando se empiezan a realizar este tipo de acciones. Durante años se van reforzando esos patrones y cuando se quiere hacer de otra forma, resulta incómodo y extraño.
[/nextpage][nextpage]
Nuestras neuronas tienen que ver
El motivo por el que unas personas lo hacen de una forma y otras de otra tiene diferentes teorías, aunque los investigadores han descubierto que las neuronas de nuestro cerebro reaccionan y se conectan de distinta forma dependiendo de la manera en la que se cruzan los brazos. Es más, parece ser que la comunicación no verbal puede llegar a revelar un nivel de conocimiento parecido entre las personas que realizan gestos determinados. Es decir, las personas más introvertidas no suelen hacer movimientos exagerados, mientras que los más extrovertidos se expresan con ademanes más abiertos y grandes.
[/nextpage][nextpage]
Dependiendo de cómo cruzas los brazos, así es tu personalidad
hay diferentes estudios que relacionan la parte del cerebro que gestiona el lenguaje corporal y el pensamiento. De esta manera, se pueden decir ciertas cosas sobre la personalidad de una persona de acuerdo a sus gestos corporales. Así, quienes cruzan los brazos con el izquierdo por encima y con la mano derecha por dentro, son personas intuitivas, empáticas, cariñosas y creativas.
Si eres de los que colocan el brazo derecho por encima dejando la mano izquierda dentro, eres una persona pragmática, inteligente, aguda y sarcástica. Si cuando cruzas los brazos dejas las dos manos fuera, tienes una gran confianza en ti mismo y cuentas con habilidades justas, honestas y de liderazgo. Si por el contrario, dejas las dos manos dentro, eres una persona introvertida, que busca tranquilidad y que los demás se sientan cómodos.
[/nextpage][nextpage]
El significado de cruzar los brazos
En ocasiones se cruzan los brazos sin darse cuenta por algún motivo concreto como por ejemplo, para guardar el calor corporal porque tengas frío, porque te encuentres inseguro ante una situación concreta o simplemente porque estás escuchando con atención a alguien.
[/nextpage][nextpage]
Para entrar en calor
En ocasiones podemos llegar a pensar que la persona que está frente a nosotros con los brazos cruzados no está de acuerdo con lo que estamos diciendo. Pero lo cierto es que en ocasiones, la explicación es mucho más sencilla: simplemente tiene frío. Cuando se tiene esta sensación se suelen tensar los hombros y la parte superior de la espalda. De hecho, no solamente se cruzan los brazos en esta situación, también se encogen los hombros y se mantienen tensos como una manera de generar y de mantener calor.
[/nextpage][nextpage]
Para ocultar la inseguridad
Una persona que se siente insegura y que necesita protegerse, cruza los brazos para no estar demasiado expuesta. De igual manera, quienes se sienten amenazados o incómodos por otras personas, van a hacer este gesto como símbolo de defensa. En este tipo de abrazo los hombros no se levantan sino que se dirigen hacia adelante y el cuerpo se encorva ligeramente.
[/nextpage][nextpage]
Para aislarse
Realizar un cruce de brazos también puede servir para retraerse de manera momentánea y permanecer en un estado introspectivo. De esta forma se crea una barrera física y psicológica entre la persona que está realizando el gesto y el resto de la gente.
[/nextpage][nextpage]
El autoabrazo
¿Te has dado cuenta que todo el mundo nos cruzamos de brazos muchas más ocasiones cuando estamos en público que en privado? ¿Y sabes el motivo? Pues es tan sencillo como que cuando nos estamos exponiendo ante más gente nada mejor que darnos un abrazo a nosotros mismos para proporcionarnos la seguridad que necesitamos en cada momento. Esto no significa que quieras alejar a nadie de tu lado, simplemente que estás buscando algo de comodidad. Si quieres comprobarlo no tienes más que preguntar a alguien que veas con los brazos cruzados y con quien tengas confianza, si se siente cómodo. Y es que el autoabrazo es una de las salidas más rápidas y automáticas que existen para tratar de sentirse cómodos.
En definitiva, el lenguaje no verbal es una asignatura que nuestra sociedad todavía tiene pendiente. De hecho, son muchas las personas que no conocen muchos de los significados de los gestos que realizan cada día y por eso son interpretados a menudo, de forma equivocada.
[/nextpage]