Desde la llegada de los PMD (Personal Mobile Device), la venta de este tipo de dispositivos móviles se ha disparado, haciendo que la venta de portátiles y sobremesas se resienta. Por ese motivo, las empresas han tenido que reaccionar ofreciendo nuevas soluciones híbridas con lo mejor de ambos mundos. Esos son los portátiles 2 en 1 convertibles.
Gracias a estos nuevos equipos se puede tener una herramienta de ocio y trabajo muy versátil. Pudiendo usarla en modo tablet cuando se necesite, con la pantalla táctil, o usar el teclado y touchpad para usarlo en modo portátil si se requiere.
¿Qué es un portátil 2 en 1 y convertible?
Aunque en muchas ocasiones se use como sinónimo, lo cierto es que existe una diferencia entre un portátil 2 en 1 y un convertible. También hay que diferenciar las llamadas tablets convertibles por otro lado. Cada uno de esos equipos tiene sus diferencias y es importante conocerlas para saber cómo elegir:
- Portátil 2 en 1 (separable): este tipo de portátiles incluyen un teclado que es desmontable, por lo que puedes extraerlo y dejar solo la pantalla táctil. Por tanto, se tiene dos en uno, por un lado un tablet y por otro un portátil si se conecta el teclado. Generalmente usan sistema operativo Windows, y hardware basado en chips x86.
- Portátil convertible: estos otros equipos incluyen una bisagra con la que se puede plegar el teclado hacia la parte trasera para que quede en modo tablet y usar la pantalla táctil, o replegar el teclado y usarlo como un portátil convencional. En esencia ofrece las mismas posibilidades de uso que un 2 en 1, pero tiene una desventaja, y es que el dispositivo pesa más que un tablet, ya que no se le puede retirar el teclado, simplemente plegarlo. Suelen usar Windows, aunque tampoco es extraño que sean Chromebooks con ChromeOS, ni tampoco ver modelos basados en chips x86 y otros en ARM.
- Tablet convertible o 2 en 1: es importante diferenciar los portátiles 2 en 1 y convertibles de los llamados tablets convertibles o tablets 2 en 1. Éstos no son más que un tablet convencional con un teclado externo que se le puede acoplar para poder escribir más cómodamente, como si fuese un portátil. Sin embargo, a diferencia de los portátiles que vienen generalmente con sistema operativo Windows, en el caso de los tablets se emplean sistemas operativos móviles como Android o iPadOS. Y, en la inmensa mayoría de casos, todos están basados en ARM.
Portátiles 2 en 1 convertibles vs tablets
A la hora de adquirir un nuevo dispositivo se puede dudar entre la compra de un portátil 2 en 1 o un convertible u optar por un tablet. Cada uno tiene sus ventajas y desventajas, que habría que analizar en cada caso para elegir el más apropiado según las necesidades de cada usuario:
- Portátiles 2 en 1 convertibles:
Ventajas: son más potentes que los tablets, gracias a que están dotados con un hardware de gran rendimiento, más puertos para periféricos, y mayor capacidad de memoria, como el que se puede encontrar en cualquier portátil convencional o ultrabook. Además, al ser 2 en 1 tienen una gran versatilidad, pudiendo usar en modo tablet con la pantalla táctil retirando el teclado, o en modo portátil cuando se desee escribir más cómodamente prescindiendo del teclado en pantalla o para videojuegos. Otra de las ventajas más destacables es su sistema operativo, ya que al ser Windows podrás instalar todo el software que se puede usar en un PC convencional, incluidos los videojuegos.
Desventajas: en comparación con la tablet no tiene desventajas, ya que se puede separar el teclado y usarse igual que una tablet (en el caso del convertible sí que estaría en desventaja en este aspecto al no poder separarse). Tan solo se podría destacar que tienen tamaños superiores al de la media de tablets, y eso puede tener un impacto en cuanto a movilidad por su mayor peso y tamaño.
- Tablets:
Ventajas: se pueden encontrar en tamaños de pantalla inferiores, por lo que se podría elegir dispositivos realmente compactos si se desea, como las tablets de 7 u 8 pulgadas. Eso las hace reinar en cuanto a movilidad, con tamaño compacto y peso ligero. Por otro lado, suelen tener autonomías bastante buenas. Integran cámara delantera y trasera, algo que los portátiles no incluyen, solo la delantera.
Desventajas: no puedes encontrar tablets con pantallas tan grandes como los portátiles. Existen algunas con 10, 11 o 12”, pero no suelen pasar de ahí. Cuentan con sistemas operativos móviles, por lo que no se puede usar el mismo software que en un PC, ni tampoco tienen el rendimiento de un portátil. También carecen de puertos, tan solo suelen implementar el USB para carga y datos y el jack de audio para auriculares, lo que limita más el uso de periféricos. En cuanto a la memoria, suelen ser espacios de almacenamiento más limitados, aunque en algunos modelos se pueda usar una microSD para ampliar la capacidad.
En definitiva, se se desea un dispositivo lo más compacto y ligero posible para tareas más simples, una tablet puede ser fantástica para llevarla a donde se necesite. Por ejemplo, para menores, personas mayores, o cualquier otro usuario que simplemente quiera un dispositivo conectado para navegar, para el entretenimiento, leer como si fuese un eBook reader, etc.
En cambio, si se busca algo mucho más versátil, un “todoterreno” para uso genérico, y que permita tener un rendimiento y capacidades mayores, para trabajar, jugar a videojuegos, disfrutar del contenido multimedia (p.e.: streaming) con una pantalla más grande y altavoces más potentes, entonces lo mejor es el portátil (especialmente el tipo 2 en 1). Por otro lado, al tener más puertos, se permite conectar más accesorios externos, desde ratones, hasta pantallas por HDMI, pasando por DACs, discos duros externos (solo algunas tablets permitirían esto, si cuentan con USB OTG), y un largo etcétera.