Nuggets de pollo: cómo hacerlos paso a paso igualitos a los del McDonald’s

Cuando visitamos restaurantes de comida americana solemos deleitarnos con platos sencillos, y en su mayoría, rápidos de ingerir. Lo que no sabemos, es que en la mayoría de las ocasiones el adjetivo “rápida” en estas comidas también puede aplicarse al momento de prepararlas, ya que las puedes hacer hasta en el microondas.

Por ejemplo, cuando visitamos McDonald’s es lo más común centrarnos en las hamburguesas y postres, sin embargo, hay otros componentes que con frecuencia catalogamos de “secundarios”, pero que terminan siendo determinantes y únicos, como las deliciosas papas, o como lo son nuestros protagonistas de hoy, los Nuggets de pollo en casa.

A continuación te enseñaremos como elaborarlos, de una manera tal, que quedaras sorprendido de lo fácil que se puede obtener un buen resultado  al final de la preparación.

Una receta para pequeños y grandes

Una Receta Para Pequeños Y Grandes

Los Nuggets de pollo se han convertido en una de las comidas preferidas de los niños al momento de acudir a algún restaurante de comida rápida. Sin embargo, no solo los niños consumen esta deliciosa presentación, pues sin importar los rangos de edad, es imposible no disfrutar del delicioso sabor y textura que terminan resultando de esta receta.

¿Por qué se llaman Nuggets?

¿Por Qué Se Llaman Nuggets?

La palabra Nuggets proviene del inglés, como has de suponerlo, y se traduce como “pepitas”. Por lo tanto, si traducimos su nombre de manera completa, el resultado sería “pepitas de pollo”.

Estas “pepitasfueron inventadas en la década de 1950 por un profesor de tecnología de los alimentos de la Universidad de Cornell llamado Robert C. Baker, quien lo utilizó como un trabajo académico. A raíz de este proyecto, las innovaciones de Baker abrieron la posibilidad de que se crearan distintas presentaciones de Nuggets.

Por otro lado,  la receta utilizada por McDonald’s fue creada por Tyson Foods, una corporación dedicada a la industria alimentaria, la cual se especializa en carnes, la cual definitivamente se lució en la creación de este alimento en el año 1979.

No siempre se utiliza pechuga

No Siempre Se Utiliza Pechuga

A pesar de que muchos pensemos que los Nuggets de pollo están preparados exclusivamente con pechuga de esta ave de corral, lo cierto es que muchas empresas los realizan tras un procesamiento de diversas partes del pollo, como lo son las vísceras, huesos triturados, grasas, venas, nervios, cartílagos, junto a unos 30 aditivos, por supuesto, complementando todo esto con carne de pollo, aprovechando al máximo todos los componentes.

Ingredientes para los Nuggets de pollo

  • 2 Pechugas de pollo grandes (aproximadamente ½ kg)
  • 175 gramos de queso crema tipo Philadelphia
  • Sal al gusto
  • 4 cucharadas de harina de trigo
  • 4 cucharadas de pan rallado
  • Aceite de oliva virgen extra
  • 2 huevos

Preparación de los Nuggets de pollo

Lo primero que debes hacer es limpiar las pechugas de todos aquellos rastros de grasa que pudieran tener, además de las venas que pudieran quedar.  Ahora toma cada pechuga y comienza a realizar cortes, de manera que te queden piezas de 2 centímetros aproximadamente.  Ahora pasa los trozos que acabas e rebanar por una trituradora o picadora de alimentos, esto lo harás con la intención de obtener una especie de pollo molido (hasta donde sea posible).

Ahora, toma tu especie de pasta de pollo y mézclala con la sal y el queso crema. Mezcla todo muy bien con las manos hasta que todo quede bien integrado y hayas formado una especie de masa. A continuación, comienza a dividir esta masa en pequeñas porciones, las cuales serán las unidades de los Nuggets.

Ahora llega el momento de empanizar nuestras delicias de pollo. Esto lo harás de la manera más clásica y tradicional, tomando cada unidad de la masa de pollo que acabas de preparar, y rebosándolas por harina de trigo, luego huevo, y finalmente el pan rallado. Este proceso es muy importante ya que le otorgará esa textura exterior que te encanta de los Nuggets.

Debes tener en cuenta lo importante que es realizar el proceso de empanizado en su respectivo orden, pues la harina de trigo otorga la posibilidad de que el huevo se adhiera de una mejor manera al pollo. De igual manera, el huevo terminará sirviendo como otra especie de pegamento entre nuestros Nuggets y el pan rallado, evitando así que ese empanizado se deshaga al momento de freír nuestras piezas.

A pesar de que existen personas a las que les gusta elaborar dos capas exteriores con este empanizado, es recomendable realizar una sola capa, pues de esta manera los Nuggets quedan más ligeros, absorben menos aceites y se cocinan un poco más rápido, tomando en cuenta que mientras más gruesa es la capa, más distancia existe entre el pollo y el calor que le proporciona el aceite. Si tienes la posibilidad de utilizar pan rallado crujiente en lugar de pan rallado molido, sería muchísimo mejor, pues este ofrece una textura (como su nombre lo indica) más crujiente.

A continuación llega el momento de freír, y es que será importante tratar de utilizar aceites con un nivel de humo alto y que no posean sabores muy fuertes, esto con la intención de que no le agreguen demasiados sabores a nuestros Nuggets.

Además, la utilización de este tipo de aceites nos otorgará la posibilidad de cocinar el pollo a altos niveles de temperatura, logrando así una buena cocción de la superficie, además de una cocción adecuada en el interior del pollo, que también le permitirá mantener una textura jugosa, y sin perder en absoluto su sabor original.

Calienta una buena cantidad de aceite en una sartén donde quepan cómodamente los Nuggets, y añádelos uno por uno. Cocina pequeñas porciones y juega con la temperatura, no alzándola demasiado, pero tampoco bajándola mucho. Mantén un ritmo entre fuego medio y alto.

También tendrás que tener cuidado con que al momento de realizar esta cocción el aceite no esté excesivamente caliente, pues esto podría desembocar en que el pollo quede tostado por fuera y crudo por dentro. Recuerda que la intención es que queden jugosos, no crudos.

Cuando la superficie de los Nuggets se vea dorada y estimes que están bien cocinados por dentro, procede a sacarlos, y repite el proceso con las piezas que falten. Pásalos por papel absorbente ¡y listo! Ya tienes tus deliciosos Nuggets hechos en casa al más puro estilo de McDonald’s