Xbox Series X o Series S: cuál te interesa más

Este año 2020 trae consigo la esperada nueva generación de consolas. Un momento más que esperado por todos los usuarios, que después de varios años ya venían intuyendo que la nueva generación estaba cerca. Para variar, las dos potencias en este mundo de las consolas juntaron sus fechas de estreno. Sony y Microsoft han traído al mundo este noviembre la PlayStation 5, la Xbox Series X y la económica Series S. Esta vez vamos a centrarnos en las consolas de Microsoft, la Xbox, que viene con dos modelos, la serie X y la serie S, veamos todos los detalles de ambos modelos para ver cuál te interesa más.

Ambas consolas en el momento de su anuncio prometieron una mejora que se intuye vital cada vez que hay una nueva edición prevista, un salto notable en los gráficos. Cabe destacar que la Xbox Series X será la principal consola, la más potente, mientras que la Xbox Series S está dirigida únicamente al campo digital, por lo que no soportará el disco físico de toda la vida. Esto supone la primera gran diferencia entre ambas consolas.

Es muy cierto que esto trae un gran debate consigo. Los fans de comprar el juego físico de toda la vida y prestarlo o compartirlo con los amigos estarán muy en contra, pero también hay que ser consciente de que la industria cada vez se acerca más al plano digital. Por otro lado, el precio de la versión S es increíblemente atractivo y competitivo para una consola de primer nivel que no se ha concebido como una suplente, sino como otra versión con enormes ventajas. Saldrá al mercado por 299 euros.

Veamos las comparaciones entre las nuevas consolas de Microsoft: la Xbox Series X y la Xbox Series S. Las hemos comparado para que podamos elegir cuál se adapta mejor a nosotros.

Rendimiento

Interior De La Xbox Series X

Vamos con una serie de datos técnicos. La nueva generación de consolas Xbox supone un gran aumento de rendimiento comparado con la última serie de consolas Xbox One X de 2017. En la Xbox Series X encontraremos una CPU de 8 núcleos AMD Zen 2 y una GPU (unidad de procesamiento de gráficos) personalizada basada en la próxima RDNA 2 de Microsoft. Esto significa básicamente una enorme mejora en las características gráficas.

La Xbox Series X ofrece 52CUs a 1.825GHz de potencia, superando no sólo a la Xbox Series S sino también a la PS5 de Sony. Además cuenta con 16GB de memoria RAM GDDR6. Todo esto significa que la Xbox Series X es capaz de producir una calidad de 4K a 60fps con facilidad.

Una vez hemos definido el rendimiento de la serie de gama alta de Xbox vamos a ver qué ocurre con la opción más barata, la Series S. Al igual que la Series X, la S cuenta con una CPU de 8 núcleos AMD Zen 2, pero con una velocidad menor, 3,6 GHz por núcleo por los 3,8 GHz de la X. También ofrece una GPU menos potente que su hermana mayor, 20CUs a 1,565 GHz.