Campo al PP: «No tengan miedo porque la unidad del país está asegurada»

El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha señalado al PP al volver a ser preguntado en el Congreso por el tema de los indultos a los condenados por el ‘procés’ en Cataluña que no debe tener «miedo» porque «la unidad del país está asegurada» y ha recordado que «aquel intento», en referencia a la declaración de independencia por Carles Puigdemont, «duró 56 segundos». Ha incidido en que el PSOE apoyó el 155 que aplicó el Gobierno de Mariano Rajoy y que «el diálogo es el camino».

El titular de Justicia respondía de este modo al ser interpelado por la portavoz del PP, Cuca Gamarra, sobre la disposición del Gobierno a indultar a los condenados por el Tribunal Supremo a penas de prisión por sedición y otros delitos graves, así como a reformar ciertos tipos delictivos del Código Penal, «todo ello como pago político a sus socios secesionistas».

En su respuesta, el ministro ha reconocido sentir «hastío y tristeza» por el hecho de que el PP presente «las cosas como no son» para utilizar como arma arrojadiza «aquello que va en el interés de todos», y ha añadido que, lejos de intereses partidistas, con este asunto el Gobierno «no tiene más deudas que las contraídas con la ciudadanía».

Respecto a la reforma de la sedición, Campo no ha dado detalles, y se ha limitado a señalar que el Gobierno «ejercerá la iniciativa legislativa siempre que entienda que es necesario reformar materia existente, lo que incluye al Código penal». Únicamente ha apuntado que la norma » no se puede quedar en una reliquia difícil de aplicar» como demostró la sentencia del Tribunal Supremo sobre el ‘procés’ y la dificultad que tuvieron los magistrados para aplicar los tipos de rebelión y sedición que se solicitaban.

DERECHO COMPARADO

En este punto Campo ha aludido al derecho comparado para señalar que la sedición está derogada en varios ordenamientos como el alemán, mientras que en Francia los tipos más parecidos a nuestra sedición, con forma de resistencia violenta, se condenan con dos años de prisión.

En Portugal con violencia estas conductas se condenan con 8 años de cárcel y con 3 si no hay esa violencia, mientras que en Italia las reuniones sediciosas merecen sólo multa de carácter administrativo. «A la vista de todo ello se hace conveniente una iniciativa en tal sentido, y las razones son solamente jurídicas», ha manifestado.

Sobre los indultos, ha insistido en que no se trata de «revisar al Supremo», pues se parte del mayor respeto a la sentencia, pero ello no quiere decir que no haya otras normas como la ley del indulto, «que establece las pautas por las que rige el derecho de gracia», citando lo que Hannah Arendt llama «poder del perdón».

Así, ha recordado que el Gobierno del PP fracasó «estrepitosamente» durante su mandato con respecto a Cataluña, pues se elevó la tensión y la falta de entendimiento, mientras el cambio de estrategia del actual Ejecutivo «está funcionando», porque «el diálogo es la mejor vía para resolver problemas políticos», ha insistido. Por ello ha recordado que España no merece que el PP «se suba al carro de la crispación y el odio» y le ha pedido su apoyo.

La postura del titular de Justicia es diametralmente opuesta a la de la portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, que ha insistido en que la concesión de los indultos en el ‘procés’ solo busca que los socios independentista del Gobierno «les dejen dormir unos meses más en la Moncloa», y para ello Pedro Sánchez va a tirar el Estado de Derecho «por el barranco».

RAZONES DE LA FISCALÍA Y EL SUPREMO

Gamarra ha citado al ministro las razones del Supremo y de la Fiscalía para oponerse a los indultos, señalando sobre esta última institución que señaló que no hay razones de justicia porque las penas no son injustas, ni falta de equipad pues son proporcionales, y que sostener la utilidad publica no es recomendable cuando se ha roto el marco regulador de la democracia.

En este punto ha reprochado al ministro que no explique cómo van a cumplir la ley si ésta prohíbe el autoindulto y el indulto colectivo y el perdón sin arrepentimiento. También ha acusado a Campo de tener a lo técnicos del Ministerio de Justicia «haciendo encaje de bolillos» para motivar uno indultos que puedan hacer frente al recurso que presentará su partido ante la Sala Tercera el alto tribunal.

Sobre la reforma de la sedición, la portavoz popular ha contestado al ministro en su turno de réplica que no cabe la idea del exceso punitivo al delito de sedición, y que el derecho comparado tampoco avala la reforma que pretende el Gobierno.

«Aún está a tiempo de no participar en esta tropelía, le pedimos, le aconsejamos, que abandonen el dictamen de la infamia, salten por la borda del palo mayor de un Gobierno que va a pique porque es el mejor camino», ha concluido Gamarra.

Finalmente, Campo ha cerrado el debate incidiendo en sus argumentaciones y señalando que el criterio de utilidad pública será «la clave que se tiene que plantear el Gobierno» sobre los indultos, tras recordar que el arrepentimiento en su concepción jurídica moderna «no es el de la tradición judeo cristiana», pues basta abrazar el ordenamiento jurídico. Además, ha anunciado que acudirá a petición propia al Parlamento para dar cuenta de la decisión que se adopte finalmente.