Montero: «Se equivocan quienes pretendan medir el movimiento feminista por lo llenas que estén las calles»

La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha asegurado este domingo que «se equivocan» quienes pretendan medir este lunes la fuerza del movimiento feminista por la cantidad de mujeres que saldrán a manifestarse y ha señalado a la derecha como «el principal enemigo a batir».

«Las derechas buscan tenernos en soledad, que nos olvidemos de la fuerza que tenemos las mujeres y de lo que somos capaces de hacer cuando juntamos nuestros cuerpos y nos ponemos codo con codo a defender nuestros derechos», ha avisado la ministra ante el Día Internacional de la Mujer que se celebra mañana lunes.

«Este 8 de marzo no vamos a poder juntar nuestros cuerpos en las calles como estamos acostumbradas a hacer siempre, pero nuestra fuerza no va a estar en cuántas mujeres vayamos a salir el 8 de marzo a la calle, sino en las preguntas que estamos siendo capaces de poner en el debate; y nuestra fuerza está en la capacidad que tengamos de impulsar no solo políticas públicas, sino de construir poder popular», ha resaltado.

Montero ha participado este domingo en una jornada organizada por Unidas Podemos sobre ‘Poder feminista’, después de que la Delegación del Gobierno en Madrid decidiera el jueves prohibir todas las propuestas de convocatorias de manifestaciones y concentraciones comunicadas a la Delegación previstas para este domingo 7 y el lunes 8 en la región por «motivos de salud».

Esta decisión ha sido mantenida por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), alegando que «los motivos básicos de denegación de la concentración se centran en razones de salud pública», rechazando así la celebración de actos convocados para este domingo. En cuanto a los actos del lunes 8 de marzo, el TSJM dará a conocer su postura en la tarde de hoy.

Montero reconoce que 2020 ha sido un año «difícil», no solo por la pandemia, aunque «si algo ha venido a impugnar al machismo, ha sido esta pandemia», sino por la «campaña de la derecha» contra el feminismo, lo que ella considera una «operación política». Por ello, ha asegurado que «la derecha tiene que ser el principal enemigo a batir».

«Se van a equivocar quienes pretendan mañana medir el movimiento feminista por lo llenas que estén las calles», ha insistido Montero, que ha elogiado al movimiento feminista por ser el movimiento que, a su juicio, está siendo capaz de denunciar «de forma tan clara y sentida tan profundamente» en España la «hipocresía profunda del sistema económico social en el que vivimos».

En este sentido, afirma que cuando las derechas han gobernado en España, el feminismo ha quedado «en segundo plano». «No solo el feminismo es más necesario que nunca, sino que es un mapa para entender los debates entre las fuerzas progresistas; de esta crisis solo salimos con más democracia», ha añadido la ministra.

Así, ha advertido de que «van a venir meses muy duros». «Corremos el serio riesgo de retroceso de décadas en los derechos de las mujeres», agrega Montero, que pone sobre todo el foco en las más vulnerables.

RECONOCIMIENTO A LAS ACTIVISTAS Y MILITANTES

En relación con lo anterior, la ministra ha recordado a todas aquellas personas que, durante la pandemia, han «sostenido la vida», las cuales son «fundamentalmente mujeres», desde enfermeras a limpiadoras, madres, cuidadoras, mujeres de la cultura o de la agricultura. «Si algo ha puesto en evidencia la pandemia, es que las mujeres son las que sostienen los cuerpos, las vidas; sin mujeres no hay posibilidad de cambiar el mundo», ha dicho Montero.

Pero de todas ellas, la ministra ha querido reconocer especialmente a las mujeres activistas y militantes del movimiento feminista, mujeres «que no han dejado de hacer política durante este último año de pandemia». «Casi nunca metemos a las mujeres activistas y militantes en la retahíla de mujeres a las que agradecer el trabajo», reconoce la responsable de Igualdad, que las ha dado las gracias por «arremangarse» durante la pandemia y por continuar trabajando desde casa, con herramientas como el teléfono o el ordenador.

Así, asegura que esta ola del feminismo está poniendo en el centro el poder. «Las feministas no solamente queremos entrar a formar parte de la toma de decisiones, queremos también los espacios del poder», ha concluido.

«EL GRAN MOVIMIENTO ANTIFASCISTA DE NUESTRA ÉPOCA»

También han participado en la jornada la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, que ha intervenido a través de un vídeo grabado; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; y la eurodiputada Sira Rego.

«Todos los días son 8 de marzo», ha comentado Díaz, que indica que el día 8 de marzo es «solo» un recordatorio de la tarea que tiene la sociedad de alcanzar una plena igualdad. La ministra también ha desgranado las políticas llevadas a cabo por su Departamento relacionadas con el fomento de la igualdad, defendiendo que desde el Ejecutivo estén trabajando «para que los derechos de las mujeres no sean un espacio normativo residual, una obligación o coartada». Aunque defiende que las leyes impulsadas por este Gobierno tienen «la mirada de las mujeres», reconoce que «queda por hacer mucho».

Por su parte, Ada Colau ha hablado sobre aquellas mujeres de clase trabajadora que actualmente se encuentran en puestos políticos y de decisión. «Esa doble condición (ser humilde y mujer) hace que recibamos más presión y exigencia que otras mujeres», ha lamentado, poniendo a Montero como ejemplo, mujer que «está sufriendo un acoso personal inaudito que traspasa todas las líneas rojas y que tiene que ver con lo que es».

Mientras, Sira Rego ha dedicado su intervención a criticar a la extrema derecha, la cual utiliza «el bulo» y «la crispación» continuamente y porque son «odiadores profesionales». «Su mundo es tan estrecho y tan pequeño que no cabemos nadie».

Pero Rego también ha criticado a aquellos «aliados inesperados» que están permitiendo, a su juicio, que esos discursos de la ultraderecha se normalicen. Pero pese a ello, ha reconocido la «fortaleza» actual del movimiento feminista: «Tenemos que sentirnos orgullosas, estamos en un momento de mucha fortaleza del movimiento feminista, que es el gran movimiento antifascista de nuestra época».