La ADE defiende que no haya presencia sindical en la Junta de la Carrera Diplomática

La Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE), la principal en su ámbito, ha defendido este lunes que siga sin haber representación sindical en la Junta de la Carrera Diplomática, el órgano asesor del ministro de Exteriores de turno en lo que a ascensos y destinos en el extranjero se refiere.

En un comunicado, la junta directiva ha lamentado los «argumentos banales y sin fundamento» que se han venido produciendo desde los sindicatos en relación con la Junta de la Carrera Diplomática, órgano al que se ha descalificado «tildándolo de antidemocrático, oscurantista, franquista, arbitrario y propiciador del secretismo».

Al mismo tiempo, «dichos sindicatos pretenden tener acceso a esa Junta, probablemente con el sano afán de ‘reformarla’, para intentar manipularla a su conveniencia y hacer de un órgano profesional, técnico y políticamente neutro, un posible campo de confrontación y activismo político».

Así, tras rechazar estas afirmaciones que «a menudo se extienden a la Carrera Diplomática», cuerpo integrado por funcionarios de «contrastada formación y alto espíritu de servicio público», la junta de ADE ha recalcado su «oposición a la presión y a todo intento de articular cualquier presencia sindical» en la Junta, respaldando en este sentido al Ministerio frente a dichas presiones.

Asimismo, han manifestado su apoyo a que el Reglamento de la Carrera Diplomática que se está tramitando en la actualidad –y que fuentes del Ministerio han indicado que podría estar listo para el mes de noviembre tras la audiencia pública a que se ha sometido– «mantenga la naturaleza, composición y funciones de dicho órgano, sin desvirtuar su esencia».

MIEMBROS ELEGIDOS DEMOCRÁTICAMENTE

En defensa de la Junta, ADE ha subrayado que la misma está integrada además de por altos cargos del Ministerio, incluida la Subsecretaria, por representantes de todas las categorías de la Carrera Diplomática a quienes sus compañeros eligen «por votación democrática por periodos de dos años» y cuyas decisiones se toman por mayoría simple en caso de que no haya consenso.

Igualmente, ha defendido que se trata de una «innovación» en el conjunto de la Administración pública española, ya que otorgo a los funcionarios de la Carrera «un órgano de representación libre, igualitario y democrático para hacer valer sus preferencias y prioridades en un aspecto tan importante en el desarrollo de su carrera profesional como son los destinos».

«Es un órgano que ha demostrado sobradamente su utilidad durante muchos años, al tiempo que es ampliamente valorado por el conjunto de los integrantes de la Carrera Diplomática así como por las distintas direcciones del Ministerio bajo diferentes gobiernos», ha zanjado.

CRÍTICAS DE LOS SINDICATOS

Desde UGT, ya han reaccionado a este comunicado. La sección sindical en el Ministerio ha remitido un correo electrónico a sus afiliados en el que señala que el comunicado de ADE es «un claro ejemplo de ideología franquista» ya que defiende representaciones corporativas y critica «el derecho legítimo de los sindicatos, recogidos en la Constitución».

Asimismo, el sindicato acusa a la organización de diplomáticos de «ignorar que son las organizaciones sindicales las que negocian en toda la Administración a excepción» del Ministerio de Exteriores y reivindica que sus afiliados «agradecen la lucha implacable contra los abusos, los malos tratos, el nepotismo, la indefensión, las malas prácticas de muchos que reniegan de las organizaciones sindicales y que desde luego la ADE ignora».

La semana pasada CSIF había publicado un comunicado en el que denunciaba que el nuevo Reglamento de la Carrera Diplomática –cuyo texto aún no está cerrado– «pierde una oportunidad para acabar con el oscurantismo» en dicho cuerpo y lamentaba que «esta propuesta no se ha negociado con los representantes de los trabajadores».

En concreto, el CSIF se mostró crítico con que el reglamento «mantiene un sistema de libre designación de puestos poco transparente, que es ambiguo, no recoge un modelo claro de acceso por mérito y capacidad y que no garantiza los principios de transparencia y de publicidad» y denunció la ausencia de representación sindical en la Junta de la Carrera Diplomática, lo cual «seguirá propiciando la arbitrariedad y el secretismo en la Administración».