El interés del bono italiano no se aleja de mínimos históricos

La rentabilidad exigida en el mercado secundario a los bonos italianos con vencimiento a diez años subía ligeramente este lunes tras tocar el pasado viernes el 0,422%, su mínimo de toda la serie histórica, después de formalizarse este sábado la toma de posesión de Mario Draghi como nuevo primer ministro de Italia.

El rendimiento del bono de Italia a diez años repuntaba este lunes hasta el 0,513%, aún muy por encima del 0,23% exigido por los bonos españoles equivalentes, aunque muy por debajo del 0,76% ofrecido por la deuda a diez años del país transalpino a finales de enero.

En este sentido, la agencia Moody’s ha subrayado el impacto positivo a corto plazo sobre la solvencia de Italia del nombramiento de Mario Draghi como primer ministro, aunque ha advertido de que más allá del «probable éxito material inicial», particularmente en el uso eficaz de los fondos procedentes de la UE, probablemente tendrá que afrontar, a medida que desaparezca la urgencia de la Covid, desafíos para implementar reformas estructurales semejantes a los enfrentados por gobiernos anteriores en Italia.

«Una vez que la urgencia de la pandemia haya disminuido, un desafío clave para el Gobierno de Draghi será mantener el impulso de reforma y el apoyo político a los cambios», ha señalado la agencia, recordando que algunos partidos o grupos de parlamentarios se han opuesto activamente durante años a aspectos como las reformas judiciales o administrativas propuestas por ejecutivos anteriores.

«El momento político actual se puede comparar con el Gobierno tecnocrático liderado por Mario Monti en 2011-13», ha apuntado Moody’s, a pesar de admitir que la existencia del fondo de recuperación de la UE supone una diferencia importante, mientras que considera que la búsqueda por parte del nuevo Gobierno de un paquete de reformas económicas que estará sujeto a la supervisión de Bruselas «es quizás una similitud igualmente importante».

El expresidente del Banco Central Europeo (BCE) Mario Draghi juró este sábado su cargo como nuevo primer ministro italiano y sucesor de Giuseppe Conte tras el colapso de la anterior coalición de Gobierno por disputas sobre el uso de fondos de la Unión Europea para recuperarse de la crisis generada por la pandemia.

«Juro ser leal a la República y observar lealmente la Constitución y las leyes y ejercer mis funciones en el interés exclusivo de la Nación», proclamó Draghi en el Palacio del Quirinal ante el presidente de Italia, Sergio Matarella.