Cantabria vigila Castro y Medio Cudeyo, en riesgo de ser confinados por su alta incidencia

Sanidad está prestando «especial vigilancia» a los municipios de Castro Urdiales y Medio Cudeyo, en riesgo de ser confinados al igual que sucederá desde esta medianoche con Laredo, Colindres, Polanco y Santa María de Cayón por su alta incidencia de coronavirus.

En ellos, además de restringirse la entrada y salida, se tendrán que cerrar los establecimientos de hostelería, los comercios minoristas o las academias, además de que se limitará el número de personas reunidas en los espacios públicos a cuatro o en los domicilios, donde solo podrán reunirse los convivientes.

Estos cuatro municipios son por ahora los únicos afectados por las nuevas restricciones, aunque Sanidad estará «muy pendiente» de la evolución de la pandemia en el resto para tomar decisiones en los próximos días.

Así lo ha anunciado el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, en una rueda de prensa que ha ofrecido este miércoles para dar a conocer las nuevas medidas para los cuatro municipios mencionados, que entrarán en vigor a las 24.00 horas de este miércoles y estarán vigentes durante 14 días. No obstante, este plazo que se podrá prorrogar o interrumpir en función de la evolución sanitaria.

Una parte de las medidas se aplican por decreto del presidente de Cantabria, como serán la restricción de la entrada y salida de personas a estos cuatro municipios salvo en el caso de desplazamientos justificados, la restricción a cuatro del número máximo de personas en espacios públicos tanto abiertos como cerrados (está en seis en el resto de la comunidad), la limitación de reuniones exclusivamente entre convivientes en espacios privados o domicilios, y el máximo de diez personas en lugares de culto.

A éstas se suman las aplicadas por resolución del consejero de Sanidad, que marca que deberán permanecer cerradas al público las zonas interiores y exteriores de los establecimientos de hostelería y restauración, excepto para servicio de entrega a domicilio o recogida -con excepción de comedores laborales y escplares-; o que se deberán cerrar establecimientos minoristas excepto de primera necesidad -alimentación, bebidas, farmacias, veterinarias, ópticas, prensa, combustible, etcétera-. En el caso del servicio de peluquería, solo se permite a domicilio, ha precisado el consejero

También se suspenden todas las actividades en centros deportivos, culturales y de ocio y las actividades deportivas colectivas, así como la formación presencial que imparten entidades para la formación de empleados públicos, academias, autoescuelas y entidades de formación profesional para el empleo.

El consejero ha estado acompañado en la rueda de prensa por los alcaldes de los cuatro municipios afectados y por el director general de Salud Pública, Reinhard Wallmann, que ha explicado los criterios que se tienen en cuenta para confinar a Laredo, Colindres, Polanco y Santa María de Cayón.

CRITERIOS

En el caso de los municipios de más de 10.000 habitantes, ha dicho, los índices que marca Salud Pública para considerar en riesgo un municipio -que corresponderían al nivel de alerta 4 o 4 plus- son que la incidencia acumulada a 14 días supere los 500 casos por 100.000 habitantes, que la positividad de las pruebas sea superior al 10 por ciento y que la ocupación del hospital de referencia para el municipio sea alta (por encima del 10 por ciento).

En los de entre 5.000 y 10.000 habitantes, además de estos parámetros se tienen en cuenta otros como la trazabilidad de los contagios, el número de contactos por cada caso o si hay variantes del virus, entre otros.

En cuanto a los dos municipios en riesgo de ser confinados, Rodríguez y Wallmann han indicado que Medio Cudeyo está «en el límite» de los 500 casos mientras que Castro Urdiales está en torno a 400.

Sin embargo, han explicado que hacer previsiones a medio y largo plazo con el Covid-19 es «muy complicado», por lo que las decisiones se tomarán en función de la evolución de los próximos días.

A pesar de estos datos y de las nuevas restricciones, el consejero ha opinado que «en ningún caso podemos decir que la situación esté descontrolada» en Cantabria, ya que es la segunda comunidad con menor incidencia del país, sol por detrás de Canarias.