Marlaska ve «necio» usar a las víctimas para criticar el acercamiento de presos de ETA

El ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha desvinculado el apoyo de EH Bildu a los PGE y el traslado de presos de la banda terrorista ETA a cárceles más cercanas a sus lugares de origen, que, según ha destacado, se viene haciendo de «manera continuada» desde hace dos años y medio. En este sentido, ha calificado de «necio» que se siga «utilizando a las víctimas del terrorismo y la política penitenciaria en términos absolutamente partidistas».

En una rueda de prensa en San Sebastián, para presentar el nuevo centro penitenciario que se pondrá en marcha en Guipúzcoa, Grande-Marlaska se ha referido en estos términos al ser preguntado por los periodistas sobre las quejas de víctimas del terrorismo por el traslado de presos de ETA.

El ministro del Interior ha asegurado que lo que se está haciendo es «aplicar y garantizar» la Ley general penitenciaria que tiene un «principio claro individualizado», de manera que «no hay tratamientos colectivos», por lo que «no puede haber una política penitenciaria ‘ad hoc’ y menos con criterios políticos como algunos tratan de dibujar».

Grande-Marlaska ha asegurado que llevan dos años y medio haciendo traslados «individuales» de internos condenados por terrorismo «como consecuencia de las evaluaciones que se hacen habitualmente y periódicamente por las juntas de tratamiento». «Las juntas de tratamiento cada determinado tiempo, normalmente seis meses depende del grado de tratamiento, realizan una evaluación y concluyen si una persona tiene que ser progresada de grado, de primero a segundo, de segundo a tercero, así como el centro penitenciario que se entiende oportuno de destino para seguir cumpliendo la condena», ha precisado.

El titular de Interior ha explicado que durante los dos últimos años y medio ha habido esos traslados de presos que pertenecieron a ETA condenados por terrorismo «de forma continuada». En este sentido, ha señalado que el Gobierno central hace política penitenciaria «seria y con tratamiento individualizado». Así ha señalado que, por ejemplo, no se han trasladado «a 200 el último mes con la tramitación de los presupuestos». «No creo que eso es una cuestión objetiva«, ha añadido.

En este contexto, ha lamentado que «se utiliza a las víctimas del terrorismo y la política penitenciaria» con «fines absolutamente partidistas» y «absolutamente ajenos a la realidad».

Grande-Marlaska ha asegurado que, si se hace un repaso de los traslados, se comprueba que son «consecuencia de previas evaluaciones de seguimiento de las juntas de tratamiento y continuados en el tiempo». Además, ha puntualizado que, «si ha habido algunos más en los últimos meses, en concreto desde junio pasado, ha sido consecuencia obvia de que durante tres o cuatro meses la pandemia evitaba que hubiera ningún tipo de traslado para evitar que el coronavirus se propagara» por los centros penitenciario.

«Estos son los únicos meses, si vamos a la hemeroteca, cada vez que hemos hecho un traslado porque hay un compromiso de las instituciones con las asociaciones de víctimas del terrorismo, como no podía ser de otra forma, para dar conocimiento en tanto que hablamos de transparencia se da la nota de prensa», ha apuntado, para añadir que se lleva «bastantes meses y años» procediendo así y es «un hecho objetivo».

«NECIO»

Por ello, ha opinado que «seguir utilizando en materia de víctimas y de terrorismo desde un punto de vista partidista» le resulta «necio», en el sentido, además, de que «todo el mundo sabe que a ETA «se le venció con la ley y el Estado de derecho» y ha indicado que «esa misma ley, ese mismo Estado de derecho, que es fuerte para vencer a una organización terrorista, debe de serlo para aplicar toda la ley en su amplitud», ya que, a su juicio, lo contrario sería «una debilidad del Estado».

Por último, ha apuntado que, en una situación de «una exigencia máxima para volver a recuperar esa fortaleza social y económica», los presupuestos requerían contar con más de diez grupos parlamentarios y no ha querido entrar en que «haya alguno que no quiera sumarse» y en su «compromiso con este país».