Cs reclama en el Pacto de Toledo facilitar la jubilación activa

Ciudadanos ha registrado este viernes en el Congreso dos votos particulares para tratar de enmendar las nuevas recomendaciones para el sistema público de pensiones del Pacto de Toledo dirigidas a facilitar la jubilación activa de los trabajadores y más incentivos a los planes de pensiones privados, particularmente aquellos en el ámbito de empresa.

Así, para la recomendación sobre sistemas de pensiones complementarios, la formación ‘naranja’ busca que el nuevo Pacto de Toledo valore «la necesidad de seguir fomentando» los planes de ahorro privados y que los incentivos dirigidos a los mismos «se articulen de manera integral y coordinada» con los sistemas de pensiones de empresa.

En su renovación de las recomendaciones, el Pacto de Toledo acordó priorizar estos últimos planes, los vinculados al empleo y al diálogo social en la empresa, sobre los planes privados, para los cuales pedía una mayor transparencia.

En su voto particular, Cs pide adoptar «un marco coherente que siente las bases de un verdadero sistema universal de previsión social complementaria de la Seguridad Social dirigido a todos los trabajadores en activo, por cuenta propia y ajena, durante toda su vida laboral».

Si bien no llega a mencionar el sistema de ‘mochila austriaca’, desde esta formación que la recomendación sería compatible con este modelo de aportaciones, que se acumularían durante la vida laboral y que podrían ser rescatadas en un momento de desempleo o para complementar la jubilación.

COMPATIBILIZAR TRABAJO Y EL 100% DE LA PENSIÓN

Por otro lado, en su otro voto particular Cs llama a facilitar el trabajo con toda la pensión reconocida, reclamando medidas que favorezcan la jubilación activa y eliminen las condicionalidades o penalizaciones en la cuantía de la pensión, en base al modelo de trabajos relacionados con la creación artística.

En este sentido, Cs recuerda que el acceso al 100% de los autónomos que siguen trabajando sólo es posible si tienen contratado al menos a un trabajador por cuenta ajena, mientras que las personas asalariadas tienen que renunciar al 50% de su pensión.