Albiach acusa al independentismo de querer más del 50% de votos

La líder de los comuns en el Parlament, Jéssica Albiach, ha acusado al independentismo de querer superar el 50% de votos en las próximas elecciones catalanas «sin saber para qué» ni tener un objetivo claro.

En una entrevista, ha reprochado que los partidos independentistas no se pongan de acuerdo en qué significaría alcanzar el 50%: alega que JxCat defiende lograr esta cifra para que tenga consecuencias políticas, mientras que ERC lo ve un paso necesario pero insuficiente para reintentar la independencia.

Ante esto, Albiach defiende dejar de lado este objetivo del 50%, que tacha de electoral, y buscar «un objetivo de país» que genere consensos más amplios en la sociedad catalana, como el 80% ó el 90% que considera que es favorable a fortalecer la sanidad pública.

«Frente a un plebiscito que no deja de ser divisorio y que nuevamente nos vuelve a situar en un escenario de 2017, nosotros queremos plantear que hay determinados temas que no necesitan de un 50%, sino que son consensos del 80 y el 90% como es blindar la sanidad pública», ha asegurado.

Así, la líder de los comuns llama a la «cooperación inteligente» entre partidos catalanes y entre administraciones frente a la confrontación inteligente, la expresión que utilizaron los expresidentes Carles Puigdemont y Quim Torra para definir la estrategia de JxCat hacia la independencia.

«Ante la confrontación inteligente, lo que queremos es cooperación inteligente, es diálogo y, sobre todo, grandes consensos en temas que para el país son capitales», ya que defiende no supeditar al proceso soberanista los temas económicos y sociales.

Albiach ha insistido en que la inhabilitación de Torra ha sido «desproporcionada», pero le ha reprochado no convocar elecciones antes de ser cesado, y también sus declaraciones en que dijo que la autonomía de Cataluña es un obstáculo para lograr la independencia.

«Este menosprecio al autogobierno y a la autonomía ha sido una de las peores ideas que ha tenido el ‘procés’, porque esto vendría a decir que es mejor que esté la Policía Nacional que los Mossos d’Esquadra, o que estaríamos mejor sin Renta Garantizada de Ciudadanía o tener o no las competencias en residencias o en salud pública», ha argumentado.

NO PACTARÁN CON JXCAT

Ante las elecciones, los comuns buscarán el mejor resultado posible y tejer una alternativa al Govern actual: «Necesitamos generar grandes alianzas entre diversas fuerzas políticas, estoy segura que así responderemos a los intereses que tiene la ciudadanía que cada vez está más alejada de las fuerzas políticas».

En este sentido, Albiach no entiende que ERC «quiera reproducir el caos de Govern» de esta legislatura con JxCat, ya que cree que sería un error reeditar la misma coalición de gobierno.

Sin embargo, al preguntársele qué pactos alternativos plantea para gobernar la Generalitat, ha optado por esperar los resultados: «Más que hablar de nombres y de fórmulas, que creo que es precipitado y habrá que ver qué dice la ciudadanía en las urnas, nosotros queremos hablar del qué».

Sí ha concretado que en ningún caso pactarán con JxCat: «Tenemos claro que no queremos estar con la derecha catalana ni española».

«NO SUPEDITAR» LOS PGE AL CONFLICTO

Sobre los Presupuestos Generales del Estado (PGE), ha pedido «no supeditar» las cuentas al conflicto sobre Cataluña, por lo que cree que los partidos independentistas, y en especial ERC, deberían permitir su aprobación.

Ha calificado los PGE de «Presupuestos republicanos, expansivos y progresistas», de manera que no contempla que los rechace ERC, como partido que se define republicano y de izquierdas.

«No aprobar estos presupuestos sería castigar a Cataluña», y ha insistido en no mezclar la negociación de las cuentas con el diálogo sobre el conflicto, aunque defiende avanzar en ambas cosas.

De hecho, ha recordado que el Gobierno ya ha iniciado los trámites para los indultos a los presos del 1-O y para reformar el delito de sedición, aunque ha criticado que con la mesa de diálogo se está yendo «tarde».

Por eso, apuesta por reunir la mesa de diálogo, al margen de que el Govern esté en funciones y vaya a haber elecciones catalanas: «Independientemente de la coyuntura en la que nos encontremos, la mesa de diálogo tendría que reunirse».