El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha alertado del robo de un equipo radiactivo ocurrido este lunes en Mérida, por lo que ha pedido que cualquier persona que lo localice, no lo manipule y llame al 112 para que puedan hacerse cargo.
Así lo señala el CSN en una nota de prensa en la que explica que ha sido informado de la sustracción de un equipo móvil de medida de densidad y humedad del terreno, que contiene dos fuentes radiactivas de baja actividad (una de cesio-137 y otra de americio- 241/berilio) y que pertenece a la empresa Elaborex Calidad en la Construcción, S.L.
El robo se ha producido en la avenida de Valhondo nº 2 de la capital extremeña, después de que un operador recogiera a las 5,00 horas el equipo en el bunker de la instalación y se dirigía en un vehículo a Valdecaballeros para realizar in situ ensayos de medidas de densidad y humedad.
Durante el trayecto, el trabajador realizó una parada, dejando el equipo dentro del vehículo, pero al regresar, aproximadamente 30 minutos después, «se percató de que la puerta posterior del coche había sido forzada y el equipo sustraído», según explica el CSN.
Este medidor de densidad y humedad, añade el CSN, contiene dos fuentes radiactivas de categoría 4, en una escala de 1 a 5 establecida por el Organismo Internacional de Energía Atómica, siendo 5 la categoría menos peligrosa.
La categoría 4 se define desde el punto de vista del riesgo ‘Improbable que sea peligrosa para las personas’, porque dada su radiactividad «no entraña riesgos radiológicos mientras el equipo se mantenga íntegro y cerrado, puesto que las fuentes radiactivas se encuentran en su interior, protegidas y encapsuladas», sin embargo, apunta que «sí podrían presentarse riesgos en caso de apertura o destrucción del equipo que dejen las fuentes sin sus protecciones».
Por todo ello, señala que cualquier persona que lo localice debe evitar su manipulación y avisar inmediatamente a las autoridades, policía o servicio de atención de urgencias, en el 112.
En concreto, se trata de un equipo de color rojo con forma de caja, asa metálica en la parte superior, pantalla de cristal con un teclado numérico y un tubo metálico donde se aloja una de las fuentes radiactivas, y dispone de la señalización de material radiactivo, con el trébol y leyenda ‘radiactivo’.
Con la información disponible hasta este momento, el incidente se clasifica con nivel 1 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos (INES), concluye.