Los sindicatos advierten de que «vigilarán» el cumplimiento del acuerdo firmado entre Alcoa y sus trabajadores

Sindicatos advierten de que «vigilarán» el cumplimiento del acuerdo firmado entre Alcoa y el comité de empresa tras la primera reunión de la comisión de seguimiento del pacto que se ha celebrado este jueves en el Hostal dos Reis Católicos, en Santiago de Compostela.

La CIG ha asegurado que estará «vigilante» para que se cumplan los términos del acuerdo, «nombradamente en lo referido al calendario para el arranque de las series de electrólisis lo antes posible».

En este sentido, el secretario general de la CIG, Paulo Carril, que ha participado en la reunión, ha apuntado que este acuerdo se adopta «con una total falta de confianza en la multinacional, a la vista de sus anteriores actuaciones».

Con este objetivo, Carril ha solicitado que las reuniones de la comisión de seguimiento se establezcan con una periodicidad mayor a la recogida en el acuerdo, «pues la comunicación y la transparencia tienen que primar, especialmente cuando se inicie la reactivación de las cubas».

Carril ha criticado además que, «pese a las reiteradas solicitudes del comité», la multinacional no aclarase con qué socios energéticos estaba negociando. «Justo unos días antes de la celebración del referéndum esta información aparece en los medios de comunicación. Este tipo de actuaciones son las que minan la confianza en las intenciones de la empresa», ha subrayado.

Respecto al papel de los gobiernos español y gallego, el secretario sindical ha demandado la creación de un marco energético «más justo, estable y competitivo, ya que las medidas contempladas en el estatuto electrointensivo no dan respuesta ni solución idónea a las necesidades de este sector».

Ha añadido también que el Ejecutivo central y la Xunta de Galicia tienen que tener «voluntad política» para poner en marcha medidas, «máxime cuando Galicia es excedentaria en la producción de electricidad y cuando la industria electrointensiva tiene un peso específico en nuestra economía. «Tenemos derecho a poner la producción de energía al servicio de nuestro desarrollo económico, social e industrial», ha concluido.

«PUNTO DE INFLEXIÓN» PARA CC.OO.

Para el sindicato Comisiones Obreras, el nuevo plan determina «el inicio de una etapa» que entienden como «punto de inflexión tras años de incertidumbre y de lucha de la plantilla».

«Ahora toca estar más atentos que nunca, no bajar la guardia y exprimir al máximo la comisión paritaria de seguimiento que conforman los representantes de la plantilla, la representación de la empresa, el Gobierno y la Xunta», han defendido en un comunicado.

Para el sindicato, el acuerdo alcanzado necesita de «un grado de seguimiento exhaustivo». «Con lo vivido en estos años, esperamos lleve al final que la plantilla con su lucha se merece y ha demostrado estar en condiciones de defender, que no es otro que el futuro de la planta de San Cibrao», han aseverado.

Es por este motivo que han insistido en su intención de «no bajar la guardia» y «velar por el futuro de centenares de familias», sea en la mesa de vigilancia, en los despachos institucionales «y en las calles si fuera necesario».