Entra en vigor la nueva limitación a 20 y 30 km/h en todas las vías urbanas

Los nuevos límites de velocidad para vías urbanas y travesías, que aprobó el Consejo de Ministros el pasado noviembre, entrarán en vigor en toda España este martes 11 de mayo. El pasado septiembre Bilbao ya se convertía en la primera ciudad del mundo de más de 300.000 habitantes en limitar a 30 la velocidad del tráfico rodado en todo su territorio.

Por tanto, desde el 11 de mayo, el límite de velocidad en vías urbanas será de 20 km/h en vías que dispongan de plataforma única de calzada y acera; de 30 km/h en vías de un único carril por sentido de circulación y de 50 km/h en vías de dos o más carriles por sentido de circulación.

Para ayudar a su implantación, la Dirección General de Tráfico (DGT) y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) han lanzado un manual con el objetivo de orientar a los ayuntamientos y entidades locales. El documento da respuesta a 32 situaciones y ejemplos reales que se pueden encontrar en las calles de las ciudades.

«Cada vez tenemos más actores y se produce una interacción en las calles de nuestras ciudades. Esta interacción y con todos estos actores no es posible garantizar la seguridad a velocidades superiores a 30 kilómetros por hora no es posible. Punto», señalaba el director de Tráfico, Pere Navarro, en la presentación del manual.

La presidenta de la coordinadora estatal de entidades de peatones ‘Andando’, Sonia Jichi Ribera, ha asegurado que, para que se cumpla la velocidad de 30 km/h, «se necesita intervenir sobre la calzada» y que ésta «no fomente pisar el acelerador».

«Las calles rectas y con determinadas características hacen que pisemos el acelerador sin casi ser conscientes. Para corregir este problema, existen técnicas como el estrechamiento de la calzada y actuaciones con pintura y mobiliario urbano», ha manifestado, para después añadir que «la reducción de la velocidad ha de ser real y para que sea real, hay que actuar sobre la percepción de la calle a través de un rediseño del entorno».

Además, Sonia Jichi Ribera ha declarado que el cambio de modelo de urbe «exige una ciudad 100% caminable para todos, desde los niños hasta los ancianos y personas con movilidad reducida, lo que implica una pacificación total de las calles y de otras medidas de restricción de tráfico y de cumplimiento de la accesibilidad universal».

Por su parte, la coordinadora general de ConBici, Laura Vergara, califica este cambio normativo de «oportunidad», pero lo ven «insuficiente». «Es una oportunidad para reducir la siniestralidad, para impulsar modos no contaminantes y que requieren menos recursos energéticos, reducir la contaminación y la lucha contra el calentamiento global, así como la movilidad activa, que redunde en un beneficio para la salud público», ha manifestado.