Remedios para acabar con la orquesta sinfónica de los ronquidos de tu pareja

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¿Yo ronco? es la pregunta que hace tu pareja al señalarla de que no te dejó dormir. La vergüenza hace que el individuo niegue el problema una y otras vez. Al principio puede que salgan risas por la forma cómo ronca tu esposo o esposa. Con el pasar de un tiempo, al escuchar la orquesta sinfónica de Gustavo Dudamel en un volumen bajo, parece no molestar, pero cuando comienza a perjudicar tu calidad de sueño, se convierte en una tortura capaz de llevar la relación a un precipicio.

Lo más seguro es que surjan pensamientos de que no hay que llevar las cosas al extremo. Lamentablemente si no se tiene un sueño reconfortante, el mal genio, el estrés y las enfermedades aumentan. En el ámbito médico, el roncar se da cuando existe una obstrucción en la parte posterior de la boca y la nariz que impide el paso del aire; cuando todos los elementos que integran esa zona chocan, se genera una vibración que finalmente se convierte en el perturbador sonido. Las estadísticas apuntan que los hombres y las personas con obesidad son los más propensos a presentar esta patología.

Algunas de las indicaciones para erradicarla son: no beber bebidas, hacer ejercicios, comer ligero antes de ir a la cama y poner su soporte para dormir un poco inclinado. No obstante, hay otros remedios, que algunos gritan, ‘son infalibles’

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No consumas lácteos

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Los lácteos tienen un gran poder para el organismo humano. Sin embargo, pueden ser perjudiciales. Lo que se retratará a continuación es una experiencia de una buena amiga. Durante 23 años, Esmeralda, bello ese nombre, sufría de gripes constates. Debido a que intentó todas las vías para que la influenza no la atacara, era inevitable, caía siempre derrotada por su poder seductor. Así que decidió ir al médico. La especialista, le mandó antialérgicos y productos para subir las defensas. Al cumplir con su tratamiento, el mal persistía.

La joven después de intentarlo una y otra vez decidió darse por vencida, pues entendió que por vivir al frente de una autopista su condición nunca iba a mejorar. Un día se encontraba hablando con una prima que sufría de lo mismo y ésta le preguntó si le gustaba comer leche. La respuesta fue un sí rotundo, admitió que disfrutaba comérsela pura. El familiar le aconsejó que intentara dejarla por dos meses.

Así hizo y no le dio gripe en el trascurso de ese tiempo. Por cosa de ella quiso probar nuevamente el lácteo y se le reflejó en una alergia que poco a poco fue reflejando una gripe. Había encontrado la causa de su patología.

Para las personas que roncan, los médicos recomiendan eliminar la leche de la cena porque genera demasiada mucosidad.