Nicki Nicole se consagra en su fiesta del Wizink Center de Madrid

Valdría la pena que hubiese más titulares sobre la música de Nicki Nicole y menos sobre sus relaciones. La artista argentina es parte de una generación de raperas latinoamericanas que está dándole una nueva energía al género, pero se separa de sus contemporáneas, pues aunque no tiene el flow de una Young Miko ni la producción casi demencial de los sencillos recientes de Tokischa, pero tiene suficiente carisma para compensar y una capacidad de generar una fiesta solo con su presencia.

Esta capacidad se hizo evidente en el Wizink Center de Madrid, donde Nicki Nicoles se paseo como parte de la gira comercial de su disco ‘Alma’. Pero desde su aparición, de un blanco tan pulcro que podía parecer que estaba camino al altar, si no fuese por lo alto de su plataforma y lo corto de su falda, con un rápido salto de ‘Tienes mi alma’ a ‘Mala vida’ fue evidente su capacidad de controlar el ritmo del concierto a su gusto. Para los poco iniciados fue evidente desde el segundo uno tanto la conexión con la audiencia como lo agradecida que sigue la artista, de apenas 23 años de edad, de tener desde ya la capacidad de presentarse en un escenario de este tamaño. 

La primera mitad del concierto estuvo marcada por la cercanía al hip hop más puro. Acompañada de un teclado y un bajo, la artista se permitió pasearse por colaboraciones como su sesión con Bizarrap, ‘Mamichula’ con Trueno, ‘Dispara’ con Milo-J y ‘8 am’ junto a Young Miko. Aunque la mayoría de los colaboradores no estuvieron presentes más allá de la pantalla y la pista, la artista fue más que capaz de mantener al público encandilado y momentos en solitario como ‘Colocao’ o su entrega total a la cumbia en ‘Otra Noche’.

También supo ceder el protagonismo al andaluz Delaossa quien interpretó con ella ‘Me Has Dejado’ antes de tomar la tarima en solitario para cantar la rumba en clave urbana de ‘El patio’. Un momento que sirvió para dividir las dos mitades del evento y abrir al público a la otra cara de Nicki Nicole.

Europapress 5841914 Cantante Nicki Nicole Concierto Wizink Center 21 Marzo 2024 Madrid Espana

Si un momento marcó esta primera mitad fue la balada ‘Parte de mí’. Es una canción que brilla por la inteligencia de una artista que no siempre llega a las notas más altas, pero que sabe dónde y como quebrar su voz para transmitir sus emociones, y que bien puede recurrir más seguido a este tipo de canciones para inyectar algo de variedad a sus canciones.

LA FIESTA URBANA DE NICKI NICOLE

Pero la artista no se alejó tanto del «perreo». Tras abandonar la tarima volvió ataviada de negro para la segunda mitad del concierto, mucho más cargada de temas para bailar y en la que, a pesar de sus esfuerzos, la noche se hizo un poco más repetitiva. Hubo momentos brillantes, como la interpretación de ‘Ya me fui’, o la versión de ‘Enamorate’ pero es cierto que en tarima es más interesante ver a la rapera que comparte generación con Trueno que a la reguetonera que puede llenar una discoteca. 

Si una canción de esta segunda parte pudo cruzar el puente entre las dos mitades de la artista fue la aparición sorpresa de Rels B. El artista supo dejar el protagonismo a la estrella de la noche acompañándola en ‘Me has dejado’ pero el flow de la argentina brilla más cuando tiene con quién compartir y en tarima o en grabación. 

De hecho, cuando la artista empezó a despedirse no eran pocas las personas que se acercaron a la puerta para evitar la aglomeración del metro. Aun así, ella mantuvo la energía y es un problema que la joven artista puede resolver simplemente estirando un catálogo en el que ya demuestra interés en inyectar variedad. 

UNA CONEXIÓN PERSONAL CON EL PÚBLICO

Durante el concierto, Nicki Nicole hizo un esfuerzo importante en conectarse con el público. Más allá de la bandera española que la arropo en las últimas canciones, la argentina se tomó el tiempo de saludar, firmar autógrafos en las primeras filas, leer los carteles de miembros del público e incluso que un asistente con un tatuaje dedicado a ella en la pierna subiera a tarima a compartirlo y de recibir regalos de sus fanáticos más fieles que llevaron pequeños peluches inspirados en ella flores amarillas de fanáticos que como ella tienen edad para recordar ‘Floricienta’. 

Es una habilidad que no se adquiere fácilmente, y que algunos artistas tan consagrados como Liam Gallagher han decidido no buscar, pero que para ella es natural. Más allá de los problemas menores de su paso por Madrid, es evidente su capacidad de alcanzar el público y eso es suficiente para estar atentos a su próximo concierto.