El Gobierno autoriza con condiciones la inversión de Veolia Environnement en Suez Spain

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes con condiciones la inversión extranjera por parte de Veolia Environnement en la sociedad española Suez Spain, accionista único de Aguas de Barcelona (Agbar), según los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Fuentes del Ministerio de Industria explicaron que «las autorizaciones no implican que se lleve a cabo la inversión y se considera información que solo deben dar las empresas por salvaguardar su privacidad».

La decisión del Gobierno español se produce después de que el pasado 14 de diciembre la Comisión Europea diera luz verde a la fusión de las empresas francesas de gestión de aguas y residuos Veolia y Suez, una autorización que Bruselas ha condicionado al cumplimiento de una serie de concesiones ofrecidas por Veolia para corregir los problemas de competencia detectados inicialmente.

Los consejos de administración de Veolia y Suez, propietaria de Agbar, alcanzaron el pasado mes de mayo un principio de acuerdo para la fusión de ambos grupos, después de que Veolia, principal accionista de su competidora, aceptase elevar su oferta de adquisición sobre el capital que aún no controla de su rival, hasta los 20,50 euros por título, en una transacción de casi 13.000 millones de euros, que daría origen a un gigante del sector con ingresos anuales de alrededor de 37.000 millones de euros.

Entre las condiciones fijadas por la Comisión Europea para despejar el camino a la fusión entre las dos empresas francesas destaca la cesión de la casi totalidad de las actividades de Suez en los mercados de gestión de residuos regulados y del agua municipal en Francia, así como la concesión de casi todas las actividades de Veolia en el mercado de los servicios móviles de agua en el espacio económico europeo.

Asimismo, se pide a Veolia la cesión de la gran mayoría de sus actividades en el segmento francés del mercado de la gestión de agua industrial y de parte de las operaciones de las dos firmas en el sector de los residuos peligrosos.

En su investigación sobre la fusión, pactada el pasado mes de mayo por los consejos de ambas multinacionales, la Comisión Europea detectó problemas serios para la competencia si se consumaba la operación tal y como se planteó de inicio, dando origen a un líder único del mercado, tanto a nivel europeo como local y nacional.

A diferencia de Bruselas, la Autoridad de Mercados y Competencia (CMA) del Reino Unido determinó la semana pasada que la fusión entre Veolia y Suez podría desembocar en «una disminución sustancial» de la competencia en el país, por lo que anunció que procederá a someter la operación a una investigación en profundidad, denominada ‘fase 2’.

La decisión de la CMA se produjo después de que las compañías implicadas no ofreciesen al regulador británico compromiso alguno para solventar los problemas para la competencia detectados y sobre los que el pasado 7 de diciembre fueron advertidas con el fin de que pudiesen presentar propuestas para subsanar dichas preocupaciones.