Un 10% de jóvenes cree que si una mujer bebe mucho alcohol se expone a que tengan sexo con ella

Uno de cada 10 jóvenes españoles cree que si una mujer ha consumido mucho alcohol se expone a que un chico tenga relaciones con ella, aunque no esté consciente. Además, el 8,9% de los chicos piensa que, si una chica se viste de manera provocativa y anda sola por la calle a altas horas de la noche, se está exponiendo a que le pase algo.

Esta es una de los datos del informe ‘Rompiendo Moldes’ publicado este 3 de marzo por Oxfam Intermón en el marco del 8 de marzo, Día de la Mujer, una investigación realizada durante 2020 que ha realizado una encuesta online a 1.500 jóvenes y adolescentes de entre 15 y 25 años en España para comprender los comportamientos sociales de este colectivo vinculados a las violencias machistas.

Entre las principales conclusiones, destaca que los jovenes y adolescentes han normalizado violencias machistas como las prácticas sexuales no deseadas o sin consentimiento previo o violencias derivadas de la práctica del ‘sexting’ (enviar mensajes, fotos o vídeos de contenido erótico y sexual personal a través del móvil) y que culpabilizan a las víctimas cuando se llevan a cabo.

Así, el informe, concluye que las violencias machistas entre jóvenes y adolescentes son una realidad y están poco identificadas y visibilizadas desde el mundo adulto. Además, destaca el hecho de que se culpabilice a las chicas en el caso que se viralice el contenido sin su consentimiento, mientras que en los chicos se normaliza que puedan ejercer esta práctica.

En la misma línea, el 44% de los chicos opina que «si alguien hace ‘sexting’ está asumiendo el riesgo de que alguien pueda reenviar el contenido», culpabilizando así a quien experimenta este tipo de violencia y quitando la responsabilidad a la persona que la está ejerciendo.

El documento también destaca que la falta de comunicación en las relaciones sexoafectivas promueve prácticas sin consenso o sin consentimiento, normalizándolo y ocultándolo como una forma de violencia sexual.

Por otro lado, el 58,6% de personas encuestadas niega que «es común que un chico quiera tener sexo sin condón» mientras que el 22,3% lo afirma. En los distintos grupos de edad se destaca que, a medida que aumenta la edad, más creen que es habitual que un chico quiera tener sexo sin condón: un 16% en el grupo de 15 a 18 años, un 23% en el de 19 a 22 años y un 24,5% en el de 23 a 25 años.

CAE EL AMOR ROMÁNTICO

En cualquier caso, el informe constata «avances significativos» como el cuestionamiento de los mandatos de género y los mitos del amor romántico, dos pilares donde se reproducen imaginarios que legitiman violencias machistas, según los autores del documento, que insisten en la importancia de cambiar estas creencias sociales, promoviendo modelos de relaciones sexoafectivas sanas.

Sobre los mitos del amor romántico, el documento constata que, en general, adolescentes y jóvenes cuestionan los mismos aunque este cuestionamiento y rechazo es más evidente entre las personas con identidades no normativas y en las chicas que en los chicos.

El informe detalla que entre las personas jóvenes y adolescentes se mantienen presentes tres imaginarios sobre la masculinidad: la invulnerabilidad emocional; el deseo heterosexual incontrolable y la actitud dominante como rasgo atractivo. Éstos se construyen en contraposición con los femeninos, destacando el mandato de complacer a las demás personas y el de la sumisión.

Según los resultados de la encuesta, 2 de cada 10 chicos piensan que «el amor duele» y 1 de cada 10 piensa que la capacidad de dominar hace un hombre más atractivo. Además, 2 de cada 10 chicos y 1 de cada 10 chicas afirman que los hombres tienen mayor deseo sexual que las mujeres.

Por otra parte, las personas encuestadas afirman que prácticas como el control a través de los teléfonos móviles o los celos se identifican como nocivas y que por tanto las rechazan, reconocen que siguen presentes en sus entornos.

Por todo ello, el estudio advierte de que prevalece un modelo de masculinidad basado en la creencia que los hombres son menos vulnerables a las emociones, que tienen un deseo sexual incontrolable y que si son dominantes resultan más atractivos.

EDUCACIÓN SEXOAFECTIVA CON PERSPECTIVA DE DERECHOS

Ante esta situación, ve imprescindible «una educación sexoafectiva feminista, transversal y con perspectiva de derechos» que aborde aspectos como la comunicación en las relaciones sexuales y la gestión emocional.

También señala que las campañas de prevención y sensibilización de las violencias machistas deben generar mensajes positivos y deben interpelar a los chicos promoviendo masculinidades diversas y críticas.

El informe ‘Rompiendo Moldes’ forma parte de la línea de trabajo de Oxfam de los últimos años con Rompiendo Moldes Latinoamérica y El Caribe en 2018, así como su réplica en Argentina en 2020. El estudio se ha realizado, en alianza con Oxfam Intermón, por el Centre Jove d’Atenció a les Sexualitats de Barcelona (CJAS).