Torres reclama a Europa la derivación y el libre tránsito de los inmigrantes

El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, ha reclamado este lunes durante su participación en la comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior del Parlamento Europeo la derivación y el libre tránsito de los inmigrantes que tienen su documentación en regla para que el archipiélago no se convierta en tapón.

Torres que ha ubicado a Canarias en el marco de la Unión Europea, ha matizado que si bien el archipiélago se encuentra a más de 3.000 kilómetros de Bruselas, está a tan solo 100 kilómetros de África, pero es un territorio ultraperiférico de la Unión Europea (UE), perteneciente a España.

Así, ha subrayado que un territorio fragmentado como Canarias, con la afección socioeconómica que está teniendo la pandemia en el mismo y el fenómeno de la inmigración, que ha experimentado un «preocupante repunte», hace que se esté ante una «dura realidad» a la que el archipiélago no puede hacer frente sola.

Canarias tuvo su gran primera ola de llegada de inmigrantes en el año 2006, la denominada ‘Crisis de los Cayucos’, cuando alcanzaron las costas del archipiélago más de 31.600 personas de forma irregular a través de la ruta atlántica que es la «más peligrosa de Europa y una de las más arriesgadas del mundo.

Esto posibilitó, recordó, que se activaran pactos de cooperación entre España y varios países africanos a los que se dio apoyo, Frontex realizó la primera operación marítima o se pusieron recursos e infraestructuras de acogida ante un fenómeno que «nunca había alcanzado esa magnitud». Sin embargo, en la década siguiente la presión migratoria se trasladó al Mediterráneo aunque en Canarias se produjeron fluctuaciones pero sin picos tan altos como los actuales.

Esto demuestra, expuso Torres, que «por una cuestión geográfica obvia, las rutas pueden reactivarse de manera intensa», y muestra de ello es que la llegada de inmigrantes a Canarias en 2020 se incrementó en un 756,8 por ciento, pasando de las 2.287 de 2019 a las 23.023 personas que llegaron en 2020.

En relación con ello, Torres ha afirmado que el fenómeno migratorio ha obligado a destinar «muchísimos recursos», recordando además que el Gobierno de España tuvo que recurrir a hoteles para albergar a los migrantes de «forma digna», así como se ha habilitado 7.000 plazas en infraestructuras militares, y las instituciones canarias han tenido que ceder espacios y prestar atención sanitaria.

Actualmente, en Canarias hay casi 10.000 personas migrantes (entre adultos y menores), de ahí que Torres consideró que junto a las deportaciones y, en tanto estas se realizan, se deben «potenciar mecanismos de redistribución interterritorial en Europa».

CUANDO LLEGAN A CANARIAS, «PISAN SUELO EUROPEO»

Por ello, Torres ha aprovechado para referirse al futuro pacto de asilo europeo, subrayando que quienes llegan a Canarias cuando pisan suelo de las islas, «están llegando a Europa. Pisan suelo europeo». En este sentido, y haciendo especial hincapié en que Canarias es Europa, subrayó la necesidad de «redistribuir la gestión del fenómeno migratorio entre todos».

Además, instó a invertir, también con inversión privada, en los países de origen y tránsito para evitar el impulso migratorio; incrementar la vigilancia en esos países con los máximos acuerdos de cooperación en materia de seguridad; efectuar las deportaciones conforme a ley, derechos humanos y acuerdos con países de origen y tránsito; activar las derivaciones y el tránsito reglado de los que pueden moverse a otros puntos del país y del continente; y dar una acogida digna, mientras no se aclare su situación administrativa.

SOLIDARIDAD

El presidente de Canarias, que ha reconocido los inconvenientes de la pandemia para poder hacer efectivo la resolución administrativa de los inmigrantes, solicitó que mientras tanto la opción tiene que ser la solidaridad, afirmando que «la acogida, sí, pero compartida» porque «su destino no son las islas».

Sin embargo, lamentó que actualmente «no existe ese reparto», si bien por contra se fomenta un modelo de gestión basado en los macrocentros de retención en las regiones que son frontera como Canarias pero «es una situación insostenible» que, dijo, «genera una enorme frustración» en estas personas, ya que «se sienten atrapadas» y se pone «en riesgo la convivencia».

«Tenemos que crear un sistema que, de una manera sensata, establezca una corresponsabilidad en el acogimiento», apostilló para añadir que se debe cambiar el enfoque de la propuesta de la Comisión para que «no se reduzca a una mera cuestión de voluntariedad» la implicación en la gestión del fenómeno migratorio.

Por ello, reclama que de impulsarse en el Parlamento un nuevo Acuerdo o Pacto de Asilo y Migración, debe exigirse que se articule una solidaridad vinculante para los 27, exigiendo cuotas establecidas con la participación de todos, en el que Canarias está dispuesta a aceptar un porcentaje «de acogida razonable».

Además, consideró necesario un sistema común europeo de asilo y que se habiliten mecanismos de llegada de migración laboral.

Por otra parte, el presidente de Canarias entiende que todo ello debe respaldarse con un presupuesto «ambicioso y suficiente», al tiempo que subrayó la necesidad de que «existan fondos específicos para comunidades como Canarias, que además son RUP, condición que debe recogerse, además, en el futuro pacto europeo».

LA ATENCIÓN A MENORES «INSOSTENIBLE»

Finalmente, Torres también expuso la situación de los menores inmigrantes, dependientes del Gobierno de Canarias, que manifestó es «insostenible», ya que actualmente en el sistema de acogida autonómico hay 2.600 menores, mientras que a enero de 2020 había 540, por lo que «son cinco veces más».

De este modo, Canarias tiene «la cuarta parte de todos» los menores no acompañados que hay en el conjunto de España y en alusión a ello puntualizó que en el mes de febrero que acaba de concluir, se terminaban los recursos previstos en el presupuesto autonómico anual para la atención de menores no acompañados, de ahí que incidió en que es «apremiante el apoyo» de la UE a través de una partida de fondos específica, así como la renovación del Plan de Acción sobre los menores no acompañados (2010-2014).

El presidente de Canarias ha concluido su intervención en la comisión haciendo mención a la intervención, hace 15 años, del entonces presidente del Ejecutivo canario Adán Martín, ya fallecido, para exponer que si bien la situación migratoria en las islas está «agravada», su discurso «podría perfectamente servir», ya que se refiere a los miles de inmigrantes muertos en el mar o a que había días en los que llegaban a las costas canarias más de 1.000 personas, entre otros datos.

Así, se ha concluido Torres cuestionando si «¿No son 15 años tiempo suficiente para aprender, poner sobre la mesa soluciones definitivas y no repetir errores?».