La crisis de la Covid-19 empeora la sostenibilidad de las pensiones

La crisis sanitaria y económica desencadenada por la pandemia de Covid-19 ha agravado los problemas de sostenibilidad de los diferentes planes de ahorro para la jubilación y los sistemas de pensiones, además de haber agregado otros nuevos desafíos, según ha advertido la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

El ‘think tank’ de las economías avanzadas señala en su informe ‘Perspectivas para las Pensiones 2020’ que la pandemia ha añadido más presión sobre problemas preexistentes de los planes de pensiones, como el envejecimiento de la población, el bajo crecimiento, la baja rentabilidad y los bajos tipos de interés.

La OCDE destaca que las decisiones adoptadas en apoyo de los ingresos en el contexto actual suponen una presión añadida sobre las finanzas públicas, que ya se encontraban bajo presión a raíz de los cambios demográficos.

En este sentido, la OCDE advierte de que el impacto de la doble crisis sanitaria y económica a nivel mundial contribuirá a mantener bajos en el futuro tanto el crecimiento del PIB como los tipos de interés y las rentabilidades obtenidas, lo que implica un riesgo de que «muchas personas no logren ahorrar lo suficiente para la jubilación».

Además, advierte de que «medidas bien intencionadas para proporcionar un alivio a corto plazo» permitiendo acceder anticipadamente a las personas a sus ahorros para la «probablemente tengan un efecto perjudicial sobre los ingresos de jubilación futuros», especialmente cuando el acceso se concede de forma amplia e incondicional.

RESCATE ANTICIPADO DE FONDOS DE PENSIONES.

Asimismo, en respuesta a la crisis, los gobiernos han tomado una serie de medidas rápidas para reforzar la sostenibilidad de las pensiones, incluyendo la ampliación de los planes de retención del empleo, como los ERTE, así como extendiendo las prestaciones por desempleo, que permiten a los trabajadores seguir acumulando derechos de prestaciones de jubilación, además de flexibilizar el rescate de los planes de pensiones.

A este respecto, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, ha subrayado que los países deben lograr un equilibrio entre el apoyo a los ingresos a corto plazo con medidas como facilitar el rescate de los ahorros para la jubilación antes de tiempo, y el posible efecto negativo de tales medidas en los ingresos de jubilación futuros.

«Permitir el acceso a los ahorros para la jubilación debe ser una medida de último recurso y debe basarse en circunstancias difíciles en lugar de otorgarse de manera amplia e incondicional», ha advertido.

Asimismo, el mexicano ha reiterado que la pandemia ha subrayado la importancia de contar con ahorros a largo plazo para podwer hacer frente a emergencias, para lo que ha abogado por introducción de acuerdos de ahorro a largo plazo que combinen una cuenta de ahorros destinada a la jubilación y otra para emergencias, lo que aumentaría la resiliencia del ahorro de cara a la jubilación.

RECOMENDACIONES.

La OCDE recomienda a las autoridades «asegurarse de que las personas sigan ahorrando para la jubilación» y se evite vender activos y materializar pérdidas cuando los mercados sufren caídas bruscas.

Asimismo, propone abordar las posibles consecuencias negativas del cambio frecuente de estrategias de inversión sobre los ingresos de jubilación futuros y la estabilidad de los mercados financieros.

Además, la OCDE pide considerar la posibilidad de adoptar medidas específicas para garantizar que los trabajadores en formas de trabajo atípicas, como empleados temporales y a tiempo parcial, trabajadores autónomos y trabajadores informales, tengan la oportunidad de ahorrar para la jubilación.