Revilla expresa su «apoyo total» a la consejera de Educación

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla (PRC), ha expresado hoy su «apoyo total» y el del Gobierno regional PRC-PSOE a la gestión de la consejera de Educación regionalista, Marina Lombó, tras el auto del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) emitido ayer que anula la decisión del Ejecutivo de suspender la semana no lectiva del 2 al 6 de noviembre.

«Yo soy una persona comprensiva con todas las opiniones, un demócrata convencido, respeto todas las opiniones, pero cuando tengo que tomar decisiones las asumo. El respaldo a la consejera de Educación es total por parte del Gobierno y muy especialmente por parte del presidente», ha declarado Revilla a preguntas de la prensa respecto a la dimisión de Lombó que reclama la mayoría de la Junta de Personal Docente y otros colectivos como los directores de Infantil y Primaria tras la crisis de las vacaciones escolares.

Según el presidente, en momentos como los actuales «es habitual pedir dimisiones, están en su papel; alguna vez las he pedido yo también, pero me ha tocado a mí este paquete. Aquí estoy para asumir críticas con el único objetivo de intentar que dentro de poco podamos estar dando buenas noticias», ha dicho.

Pero ha advertido que «mientras tanto», toca tomar decisiones «dolorosísimas», como la anunciada hoy de confinar todos los ayuntamientos de Cantabria. Una medida que, según ha explicado, se hubiera tomado el pasado miércoles si no se hubiera decidido suspender la semana de vacaciones del 2 al 6 de noviembre con el fin de evitar la movilidad de unas 120.000 personas, según las estimaciones de Sanidad.

Según se ha dicho en numerosas ocasiones en la rueda de prensa que han ofrecido hoy Revilla, el vicepresidente, Pablo Zuloaga; y la directora general de Salud Pública, Paloma Navas, acompañados por el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, la decisión de suspender las vacaciones pretendía evitar el trasiego de escolares a domicilios de familiares y a otros municipios para evitar el cierre perimetral de los ayuntamientos.

Con lo que, según Revilla, el Gobierno tuvo que decidir el miércoles entre «cerrar todos los municipios» o anular las vacaciones escolares.

«Ahora que los datos son peores y se ha anulado la posibilidad de que los niños estén en el colegio, hay que tomar esa medida porque antes teníamos dos medidas y ahora solo hay una», ha subrayado, aclarando que el decreto que se publicará esta tarde decretando el cierre perimetral de los municipios es «lo que recomienda Sanidad».

El jefe del Ejecutivo ha reconocido que se trata de una decisión «improvisada», como todas las que se tienen que tomar «día a día» frente a una situación cambiante, pero todas con el objetivo de «conciliar en la medida de lo posible» las medidas de protección de la salud con la actividad económica.

Además, ha explicado que los datos del miércoles «no eran de la gravedad de los de hoy», la «peor semana desde que existe la pandemia», y que entonces también se planteó como alternativa, aunque se descartó, el cierre perimetral de dos municipios, Laredo y Castro Urdiales, cuyos datos han mejorado desde entonces, frente al empeoramiento en otros municipios como Santander.

«La movilidad podría haber agravado esa situación, y yendo los niños al colegio, el riesgo no era grande, y como no sabemos cómo evoluciona la pandemia porque pensamos que medidas como el cierre perimetral de Cantabria y el toque de queda podían tener consecuencias, aunque estamos ahora en límite de poder esperar algún aminoramiento de los contagios… Pero la situación de hoy no era la del miércoles y se optó por la decisión que podía conciliar la protección de los ciudadanos con mantener la actividad económica en la medida de lo posible», ha explicado.

Con todo, ha reconocido que no sabe si, a la vista de la evolución en esta semana, «hubiera sido bueno hacerlo el miércoles», si bien ha insistido en que «el trasiego de personas de un lugar a otro fomenta contagios», así como los locales cerrados.

NO JUSTIFICADO

En cuanto a si el Gobierno ve «un varapalo» y reconoce su equivocación ante el hecho de que el TSJC considere que no se ha justificado lo suficiente la anulación del periodo no lectivo y que no se haya acreditado el interés general de salud pública, lo que ha llevado a la anulación de la medida, Revilla ha dicho que acata las decisiones de los tribunales.

Sin embargo, se ha preguntado quién está ahora en condiciones de garantizar que con la medida adoptada hoy de cerrar los municipios la situación mejorará dentro de 15 días. «No lo puedo garantizar», ha dicho.