El Gobierno critica que la familia Franco use “todos los mecanismos a su alcance” contra la exhumación

La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, criticó este lunes que la familia Franco y su entorno hayan utilizado «todos los mecanismos a su alcance para obstaculizar un objetivo legal, democrático, ético y político de este Gobierno”, en referencia a sacar los restos del dictador del Valle de los Caídos.

Así lo indicó ante los medios a su llegada a las jornadas ‘Huérfan@s de la violencia de género: hacia la protección internacional’, donde apuntó que la democracia va «muy tarde» para propiciar «que el dictador no esté en un lugar de homenaje”.

La vicepresidenta se refería así al hecho de que el Tribunal Supremo deba pronunciarse próximamente sobre si acepta o no las medidas cautelares pedidas por la familia del anterior jefe del Estado en contra de su exhumación.

Calvo comentó que al Ejecutivo de Pedro Sánchez le hubiera gustado que «todo hubiera ido más rápido”. “Yendo ya tarde», indicó, «es incomprensible que la familia de Franco haya decidido obstaculizar políticamente las aplicaciones de una ley del Congreso de los Diputados, a un Gobierno legal y legítimo de España y a una democracia del siglo XXI”.

En este sentido, aseguró que desde Europa “nadie entiende que tengamos homenajeado a un dictador”. Por lo tanto, “alcanzar el objetivo último importa más que todo el camino que tengamos que recorrer”, apostilló la vicepresidenta del Gobierno en funciones.

«PROCESO PREVISIBLE»

Calvo destacó que si el Supremo adopta medidas cautelares contra la exhumación de Franco “forma parte del proceso previsible, pero no afecta al fondo del asunto, que es lo que importa”. “El fondo del asunto es la propuesta de aplicación de una ley que tiene que conseguir para España que el dictador no esté en un lugar de homenaje ni honor en una democracia que ya somos”, afirmó.

A este respecto, incidió en que “estaremos a lo que diga el Supremo cuando se pronuncie”, pero remarcó que “seguiremos trabajando para ejecutar el acuerdo final del procedimiento administrativo en el que hemos trabajado durante nueve meses”.

“Esperemos llegar al final, que es la aplicación de una ley del Congreso de los Diputados, recomendaciones varias de las Naciones Unidas, el Consejo de Europa y el Parlamento Europeo. Todo eso es lo que flota en el ambiente de un país como el nuestro, que es una brillante democracia que no se merece tener al dictador en un lugar de homenaje público”, concluyó la vicepresidenta en funciones.