El gazpacho engorda (y mucho) si cometes este error

¿Es el gazpacho sospechoso de hacerte engordar? Seguramente no lo pensarías así hasta hoy. Una sopa fría hecha básicamente de vegetales no debería tener esa fama, pero ¡ojo! Si cometes uno de los errores que a continuación vamos a explicarte es más que posible que conviertas un plato saludable en una auténtica bomba de calorías.

Ya sabes que con la llegada del verano esta receta se convierte en una de las favoritas de los españoles, así que presta atención a los consejos que te damos si no quieres sorpresas con la báscula y que algo que considerabas healthy te acabe estropeando la operación bikini.

ORÍGENES DEL GAZPACHO

Su origen puede datarse en tiempos de los romanos, quienes elaboraban el ‘salmorium‘, una mezcla obtenida al machacar sal con pan, ajos y aceite. «A veces añadían almendras u otros frutos secos. Esa mezcla podía ser aligerada con vinagre y con agua», explica en una entrevista Luis J. Morán Fagúndez.

De la misma manera, el especialista indica que en la época de los Reyes Católicos ese gazpacho primitivo era importante en la dieta de los campesinos extremeños y andaluces. «Así reponían fuerzas con una bebida hidratante y energética», añade. Igualmente, recuerda que el ‘Diccionario de Autoridades’ de 1734 lo define como ‘un género de sopa o menestra que se hace con pan hecho pedacitos, ‘azéite’, vinagre, ajos y otros ingredientes’. 

Si bien la receta ha evolucionado con el paso del tiempo, según cómo lo hagas convertirás tu gazpacho en un plato saludable o perjudicial. Te explicamos por qué.

¿De Dónde Viene El Gazpacho?