Ceuta pide implicación al Gobierno para afrontar una situación de «extrema gravedad»

El presidente de Ceuta, el ‘popular’ Juan Jesús Vivas, ha pedido al Gobierno implicación para hacer frente a una situación de «extrema gravedad» en la que se encuentra la Ciudad Autónoma tras la decisión de Marruecos de llevar a cabo un bloqueo comercial respecto a Ceuta y el impacto negativo de la Covid-19.

Así lo ha señalado este viernes en rueda de prensa tras la ponencia de estudio sobre la insularidad y la situación periférica de las Ciudades de Ceuta y Melilla constituida en el seno de Comisión de Despoblación y Reto Demográfico a la que también han asistido los presidentes de Melilla, Canarias y Baleares, Eduardo de Castro, Ángel Víctor Torres y Francina Armengol.

«Nunca antes nos hemos enfrentado a una situación tan difícil, pero esta no puede traducirse en pasividad, sino en coraje, determinación y audacia porque tenemos condiciones para salir adelante», ha asegurado el ceutí, al tiempo que ha apuntado que los requisitos fundamentales para dejar atrás estas crisis son «responsabilidad para lograr unidad de acción» y también la implicación por parte del los poderes públicos del Estado, del Gobierno de la nación, ha explicado.

En esta clave, el dirigente ceutí ha detallado que también se ha referido a las necesidades de la frontera y, en concreto, «a la consideración de la presión migratoria como un asunto de todos y que requiere de una política de Estado», ha precisado. Para Vivas, el hecho de no estar establecida una aduana comercial genera dificultades para normalizar las relaciones comerciales y también tiene derivación en una problemática de inmigración.

EL PROBLEMA FRONTERIZO

Sobre este condicionante específico, ha hablado del singular hecho fronterizo, no solo por la connotación geográfica, sino por el hecho de la «excepción al tratado Schengen, en virtud del cuál los residentes en la vecina provincia de Tetuán pueden acceder a Ceuta sin necesidad de visado consular expedido por las autoridades españolas, simplemente con el pasaporte».

En esta línea, ha mencionado también las limitaciones del territorio para el desarrollo de la actividad productiva que, en sus palabras, se deben al encarecimiento de los costes de aprovisionamiento derivados de la extrapeninsularidad, al reducido tamaño del mercado de bienes y servicios, así como a la dificultad de establecer líneas de complementación con el vecino país en el ámbito comercial.

Por extensión, la extrapeninsularidad se deriva «en forma de un plus de esfuerzo adicional» para mantener la calidad de los servicios públicos esenciales» y ha defendido el derecho de los ceutíes a tener acceso a unos servicios de calidad al igual que en el resto de territorio español. En este contexto, ha solicitado el despliegue del Estado para potenciar su presencia en las diferentes áreas de Seguridad, Defensa, Justicia, Educación y Sanidad de la ciudad.

En lo referente a las ayudas, ha pedido la utilización ágil y adecuada de los fondos europeos para la recuperación, pero ha concretado también que las ayudas que Ceuta recibe del Estado para atender carencia y problemas de déficit estructural están garantizadas mediante ley. En particular, ha pedido ayuda para sacar adelante el proyecto estratégico que significa la conexión eléctrica de Ceuta con la Península mediante el tendido de un cable submarino.

«He dejado muy claro que Ceuta tiene problemas, pero que no es un problema. Ceuta es rica en eso que llamamos los intangibles», ha zanjado el responsable ceutí, quien también ha reivindicado desde la Cámara territorial que «Ceuta es España en lo más profundo de su ser. Lo dice de manera inequívoca la historia, lo avala el derecho y lo quieren los ceutíes», ha concluido.