La presentadora de 'La isla de las tentaciones', Sandra, fue tajante con la participante, diciéndole que o se controlaba o terminaría por marcharse del programa. El aviso llegó después de que Claudia se levantara para enfrentarse a su novio Gilbert durante la ceremonia de los collares.
La novena edición de ‘La Isla de las Tentaciones’ sigue dando guerra desde el día 1. Sandra Barneda se está enfrentando a uno de sus mayores desafíos como presentadora: controlar a Claudia, la participante que en menos de 24 horas se ha saltado las normas en dos ocasiones.
Todo ocurrió durante la presentación oficial de los solteros y solteras de 'La isla de las tentaciones'. Lo que debería haber sido una velada tranquila se convirtió en un campo de batalla. Las imágenes de la primera noche en la villa desataron gritos, reproches y lágrimas.
La tensión se palpaba. Claudia, visiblemente alterada por las imágenes que había visto de Gilbert, no pudo contenerse. A pesar de los varios avisos de Sandra Barneda para que mantuviera la calma y no se levantara de su asiento, la participante hizo caso omiso.
Salió corriendo hacia su pareja con actitud tensa y desafiante. Quería pedirle explicaciones allí mismo, rompiendo por completo el protocolo del programa. Fue entonces cuando Barneda intervino.
El ultimátum de Sandra Berneda en 'La Isla de las Tentaciones'
Sandra Barneda no se anduvo con rodeos. Miró a Claudia y le soltó: "Te vas a controlar o te vas fuera. Hay unos límites que no puedes traspasar, y acabas de sobrepasar uno. A la siguiente, estás fuera del programa".
La presentadora de 'La isla de las tentaciones' dejó bien claro que las normas están para cumplirlas y que no toleraría más desafíos a su autoridad. El ambiente se cargó de tensión inmediatamente, con todos los participantes mirando a Claudia para ver cómo reaccionaba.
Por si la situación no fuera ya lo suficientemente explosiva, el programa decidió añadir más leña al fuego. Presentó a Mari, una nueva tentadora que aseguraba haber sido novia de Gilbert durante dos años. Algo que Claudia negaba rotundamente.
Mari no se mordió la lengua: "Fuimos novios. Si él no fue mi novio, que sepas que estuvo haciendo la comida con mi madre, y ha estado durmiendo en mi casa y con mi familia. Y así, dos años. Si tú no quieres admitirlo, es tu problema".
Gilbert, incómodo por la situación, intentó quitar hierro al asunto: "Yo no lo consideré nada formal, porque nunca llegamos a formalizarlo, pero sí estuvimos un año y medio". Pero Mari no estaba dispuesta a ceder: "No, un año y medio, no. Estuvimos dos años". Claudia, entre la incredulidad y la rabia, contraatacó: "Conmigo lleva un año y medio, no ha podido estar contigo dos años".
Un comportamiento repetitivo
Esta no era la primera vez que Claudia se saltaba las normas. En el primer episodio, emitido por Telecinco, justo después de la separación de las parejas, la joven ya había salido corriendo hacia su novio para abrazarlo, rompiendo el protocolo establecido.
En aquel momento, Sandra Barneda ya le había dado un aviso: "Por favor, chicas, lo que acaba de hacer Claudia no podéis hacerlo. Las normas están para cumplirlas". Más tarde, la presentadora volvió a insistir: "Te has saltado las normas. No me ha gustado. Creo que a las chicas tampoco, porque tenéis que ser una piña".
Exacto, se disfrutó la pizza ya. Claudia se disculpó entonces argumentando que "no me imaginaba que la despedida sería tan fría". Pero visto su nuevo arrebato, parece que las disculpas no fueron suficientes.
¿Quiénes son Claudia y Gilbert?
Esta pareja llega desde Mallorca con una historia bastante peculiar. Se conocieron en la época de bachillerato, cuando ambos tenían pareja. Años después, el destino volvió a cruzarlos y comenzaron una relación que ya dura un año y medio.
Ella se define como una chica caprichosa, celosa y algo posesiva. Gilbert confiesa tener dudas sobre la necesidad constante de su novia de gustar a los demás. Su relación no ha estado exenta de conflictos familiares, hasta el punto de que Gilbert rompió la relación con su madre porque esta no aprobaba a Claudia.
Los expertos que analizan el programa sugieren que Gilbert podría representar el perfil del complaciente emocional, mientras que Claudia mostraría un apego ansioso con rasgos histriónicos. Según la terapeuta Lara Ferreiro, consunltada en Lecturas. "entre ambos podría parecer haberse formado un patrón muy común en relaciones desiguales: él da desde el miedo; ella pide desde la carencia".
