Especial 20 Aniversario

Domado el fuego en Benicàssim: las llamas ceden terreno

El incendio forestal declarado el viernes en Benicàssim (Castellón) ha puesto en alerta a las autoridades y a la comunidad local. El siniestro, originado por la caída de un rayo en una zona de difícil acceso cerca de la urbanización Montornés y el Desert de les Palmes, sigue activo pero evolucionando de manera favorable, según ha informado el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat ‘112 CV’.

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La rapidez de la respuesta y la coordinación entre las diferentes entidades encargadas de la extinción han sido fundamentales para contener el avance del fuego. Durante la noche, un total de 11 autobombas y 11 unidades de bomberos forestales de la Generalitat han trabajado incansablemente para mantener el incendio bajo control.

Cierre del Tráfico Marítimo en el Puerto de Castelló

Para facilitar las tareas de extinción, alrededor de las 10:15 horas de este sábado, se ha solicitado al Puerto de Castelló que proceda al cierre del tráfico marítimo. Esta medida permitirá que las aeronaves que participan en las labores de extinción puedan cargar agua de manera más eficiente y sin interrupciones.

Además de los esfuerzos terrestres, se han sumado tres medios aéreos de la Generalitat: dos helicópteros y un avión. Sin embargo, finalmente no ha sido necesaria la incorporación de los tres aviones anfibios del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico que se habían desplazado el viernes.

Situación Actual y Acciones en Curso

Actualmente, la CV-147 continúa cortada y se ha establecido la Situación 1 del Plan Especial Frente al Riesgo de Incendios Forestales (PEIF). Esta situación de alerta permite a las autoridades activar los protocolos y recursos necesarios para hacer frente a la emergencia.

Durante la madrugada, se movilizó una unidad de Soporte Vital Básico (SVB) en preventivo para atender a un bombero que requería asistencia médica. Este tipo de medidas forman parte del plan de contingencia diseñado para garantizar la seguridad y el bienestar de todo el personal involucrado en las tareas de extinción.

La rápida respuesta y la eficiente coordinación entre los diferentes organismos y entidades encargados de la gestión del incendio han sido fundamentales para mantener la situación bajo control. Ahora, las autoridades siguen de cerca la evolución del incendio y están preparadas para implementar cualquier medida adicional que sea necesaria para salvaguardar la seguridad de la población y proteger el entorno natural de la zona.

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