Las intrigas, incertidumbre y el peligro en ‘La Promesa’ no se detienen y uno de los acontecimientos más oscuros vuelve a recaer ahora sobre Leocadia. La mujer sigue siendo la gran manipuladora de la serie de época de La 1.
Su nuevo plan implica usar sin remordimientos a los mellizos Rafaela y Andrés para debilitar aún más la salud de Eugenia y así ganar más poder dentro del palacio. El último capítulo de la semana promete tensión y, pero también, consecuencias graves, especialmente cuando la estabilidad mental de Eugenia se tambalea poniendo en riesgo a dos personajes.
3Catalina y Adriano, entre el deber y el recelo

Para Catalina y Adriano, la sugerencia de Leocadia llega en un momento de mucha incertidumbre. Aunque agradecerán el respaldo del marqués Alonso, no confían en las intenciones de Lisandro, una figura de poder que ha demostrado tener intereses personales muy por encima del bienestar de los Luján. Sin embargo, están conscientes de que rechazarlo podría desencadenar una confrontación directa con el poder establecido en ‘La Promesa’.
La situación los hará debatirse entre lo que es conveniente y lo que es correcto para ellos. Ceder al padrinazgo del duque es sinónimo de rendirse a los manejos políticos externos dentro del palacio, pero también garantizaría cierta estabilidad para sus hijos.
Leocadia aprovecha esta ambigüedad, sabiendo que mientras más tensión exista entre Catalina y Adriano, más fácil será para ella llevar a cabo sus planes. A través de una manipulación bien ejecutada, va armando una red que atrapará a todos los que aún intentan resistirse a sus maquinaciones.