Por qué ‘Factor X’ y ‘La Voz’ no consiguen crear estrellas como OT

El regreso de Factor X en Telecinco no ha dado muestras de bueno. O más bien de nada. Un programa donde Lali Expósito, Abraham Mateo, Willy Bárcenas y Vanesa Martín serán los encargados de juzgar a los concursantes.

El concurso comienza con unas audiciones en las que los concursantes deben conseguir al menos tres votos afirmativos para avanzar, según las normas del programa.

FACTOR X SE RENUEVA POR COMPLETO, PERO NO CONVENCE

Las redes sociales, como suele ser habitual en estos casos, no han querido dejar pasar la ocasión para opinar sobre este esperado estreno, que según todas las promociones de Telecinco estaba destinado a ser uno de los concursos estrella de la cadena. Sin embargo, el público no parece estar de acuerdo.

Solamente hay que darse una vuelta por el hashtag #FactorX para darse cuenta que la audiencia ha criticado numerosos aspectos del programa: el tamaño del plató, la mesa, el vestuario de Aramendi o los recursos que se han invertido.

En esta nueva temporada de Factor X, los jueces van conformando sus equipos dependiendo de su propio criterio. El jurado ha sido renovado por completo, con grandes fichajes como la argentina Lali Espósito; Willy Bárcenas, líder de Taburete; el cantante Abraham Mateo; y la malagueña Vanesa Martín.

FACTOR X: UNA COPIA DE LA VOZ, PERO SIN ÉXITO

Muchos han criticado el exceso de historias dramáticas, como antesala de algunos de sus concursantes en las Audiciones.

Y otros, además, no han mirado con buenos ojos a expertos como Abraham Mateo o Willy Bárcenas, como parte del jurado.

En realidad, lo que ocurre es que programas como La Voz no triunfan. O mejor dicho; no triunfan sus concursantes. Sus voces quedan como hilo musical mientras el montaje se regodea, cada vez más, en las interacciones y clips que protagonizan los personajes famosos.

Factor X No Triunfa

Como ocurre con La Voz, ya diferencia de otros programas como Operación Triunfo, las voces grandiosas, inigualables, de los ganadores no parecen suscitar el mismo interés en el gran negocio musical, con lo que al final queda sobreentendido que les sobra voz y les faltan otras cosas. Y con Factor X viene sucediendo lo mismo.

Lo que no trasciende es el trato que reciben por parte de las discográficas, en parte porque ningún aspirante a vivir de la música se puede permitir criticar a los grandes de la industria.

¿POR QUÉ NO SON CAPACES DE DARNOS UNA ESTRELLA?

En parte por que lo relevante, al igual que sucede en el resto de países, es el ego de sus jueces y el volteo de sus sillas, y los concursantes aportan poco o muy poco.

También influye que ha habido tantas ediciones los últimos años que cabría pensar que un par de ellas se han solapado, y donde los coaches han tenido un trabajo a jornada completa cual si esto fuera 2002. No hay tiempo para respirar, los nombres pasan y ninguno se queda marcado en la memoria general. Eso pasa en La Voz, donde simplemente, es un non-event.

En esas, Factor X sigue el mismo camino. O uno peor, incluso. Y es que si bien La Voz arrasa en audiencia. Factor X parece condenado a desaparecer en poco tiempo.

Sí, el ejemplo al que mirarse puede ser Laura Pausini, que ha aportado un aire fresco a las últimas ediciones y ha logrado que no echemos de menos a David Bisbal y Rosario Flores.

EL PROGRAMA TRIUNFA EN EL MUNDO, PERO NO EN ESPAÑA

Sin embargo, los concursantes seguro que añoran a Pilar Tabares, Narcís Rebollo, Ramón Pardo, Álex Soler, Alejandro Abad o Álvaro de Torres, ya que, aunque nadie recuerde sus nombres, fueron los miembros del jurado que descubrió a Rosa, David Bisbal, David Bustamante, Chenoa, Manu Tenorio o Nuria Fergó.

Pero las cifras hablan por sí solas. La cadena principal de Mediaset ya sorprendió al anunciar hace unos meses que iba a recuperar el célebre formato de Factor X debido a que la entrega de 2018 acabó siendo un gran fiasco en audiencias. Y eso a pesar de que, por aquellas, Telecinco estaba en un buen momento. Por no decir de los mejores.

Cabe destacarse que Factor X es el talent musical de mayor éxito en el mundo, pero en nuestro país nunca ha cuajado especialmente y eso hacía muy arriesgada su vuelta, más aún en un momento en el que la televisión está hastiada de talents musicales con poco nuevo que ofrecer a la audiencia.