La calabaza es uno de los productos estrella de la temporada, y los platos de cuchara han vuelto a la actualidad con la llegada del mal tiempo y se quedarán unos meses. Las cremas y purés son una de las variantes más utilizadas, no solo porque gustan y son agradables y fáciles de preparar y consumir, sino porque es una salida ideal también para niños, personas enfermas, para ese día que necesitas entrar en calor y energía etc. Hoy te mostramos una crema de calabaza muy especial, con una especia de lo más usada que le dará una máxima nota.
8CONSEJOS PRÁCTICOS Y RECOMENDACIONES
Diréis que al cocinar la calabaza en el horno no genera ningún caldo, algo de lo más útil para la crema. Pero el caldo ya lo obtenemos con los otros ingredientes, y compensa el toque de la calabaza asada en el resultado final.
De todas formas, puedes incorporar las propias cáscaras de calabaza bien limpias y otros restos de vegetales que tengas en la nevera o que vayas a necesitar para hacer un puré u otras elaboraciones. Puedes añadir un puerro, zanahorias, cebolla o un nabo, dejando que cueza todo mientras horneas la calabaza. Son otras variantes.
