La evolución de los presupuestos para Igualdad: de 23 millones en 2002 a 525 millones 2 décadas después

Los Presupuestos Generales del Estado (PGE) que recibirá el Ministerio de Igualdad para 2022 han superado por primera vez la barrera de los 525 millones de euros, al aumentar en un 14% con respecto a los del año anterior. Es la cuantía más abultada que ha recibido hasta ahora, muy distinta a los 23 millones con los que contaba hace dos décadas, en 2002.

«Siendo una cifra mejorable, es muy buena». Así ha calificado la secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género, Ángela Rodríguez, las cifras que corresponden al departamento que dirige Irene Montero para el próximo año y que, ha insistido, «son «las mejores que España ha tenido en muchos años en esta materia».

Y es que, tal y como ha recordado la secretaria de Estado, el Ministerio partía de unas cifras mucho más bajas que la que ahora se trabaja, incluso cuando se habla de los entonces «históricos», que se registraron en 2009, 2017 y 2021.

Rodríguez ha explicado que en los presupuestos de 2002 sólo se dedicaban a políticas de igualdad alrededor de 23 millones de euros. Tal y como se detalla en el proyecto de ley de PGE de ese año, la totalidad de estas inversiones son para la integración de la mujer en el mundo laboral, impulsar los contratos fijos para ellas o impulsar su presencia en sectores en los que están infrarepresentadas, como la agricultura.

Esta cuantía aumentó con la creación en 2008 de un ministerio independiente para esta materia, aunque el pico de esta época se registró cuando se decidió destinar 78 millones de euros a este tema en 2009.

LA ETAPA ZAPATERO

Esta es la etapa del Gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero, quien decidió separar las políticas en esta materia, que antes se recogían dentro del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, y crear un departamento propio, que dirigió la ministra Bibiana Aído.

El objetivo, según explicó el entonces jefe del Ejecutivo, era impulsar las medidas que se recogían en la Ley Integral contra la Violencia de Género (que entró en vigor en 2005) y la Ley de Igualdad (en marcha desde 2007).

Dos años después, el propio Zapatero eliminaría el Ministerio en una remodelación de su gabinete. Decidió entonces integrar estas políticas en Sanidad, bajo las órdenes de la ministra Leire Pajín, nombrando a Aído secretaria de Estado en esta materia.

A partir de 2009, apunta Rodríguez, las partidas para Igualdad comienzan a decrecer «muy notablemente» como consecuencia de la crisis económica. En este punto, la secretaria de Estado recuerda las continuas denuncias del movimiento feminista sobre las consecuencias que esta crisis económica supuso para las mujeres.

LLEGADA DEL PACTO DE ESTADO

Así, las partidas para políticas de igualdad no volvieron a subir hasta 2017, cuando se exigió una financiación concreta en el Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Este texto establecía la dotación de 100 millones de euros al Estado para acometer medidas en esta materia, así como 40 millones para las CCAA y otros 20 para las entidades locales.

Las partidas pasaron entonces de los 51 millones a los 181 tras el pacto de Estado, mientras que en 2019 el Gobierno, aún formado solo por el PSOE, estableció en los PGE una partida de 220 millones para desarrollar las medidas que reclamaba este acuerdo. Hasta enero de 2020, las políticas de Igualdad estaban a cargo de la Vicepresidencia primera, ocupada por Carmen Calvo.

Tras las elecciones de 2019 y el Gobierno de coalición PSOE-Podemos, se crea de nuevo un Ministerio de Igualdad, que en 2021 llega a recibir 459 millones de euros en partidas de los presupuestas, una cifra que, ahora, se vuelve a elevar hasta 525 millones para el próximo año.