Pérez Botello pide eliminar trabas burocráticas para expandir la red de carga

El presidente de Volkswagen Group España Distribución, Francisco Pérez Botello, ha abogado por buscar una fórmula para eliminar trabas burocráticas que permita agilizar la expansión de los puntos de carga para coches eléctricos.

Así lo ha señalado en un encuentro virtual mantenido con el presidente de la Cámara de Comercio de Madrid, Ángel Asensio, donde se han tratado temas como la movilidad sostenible y digital, el motor electrificado, el coche autónomo, la descarbonización o el ‘car sharing’.

En su intervención, Pérez Botello ha recordado el compromiso del grupo Volkswagen con el Acuerdo de París, por lo que la compañía invertirá 73.000 millones de euros en los próximos cinco años en los campos de movilidad eléctrica y digitalización.

En lo referente al despliegue del vehículo eléctrico, el directivo ha criticado tres barreras: «la accesibilidad, la escasa autonomía de las baterías y la insuficiente red de carga».

No obstante, ha asegurado que las ayudas del Plan Moves III permiten superar el primer obstáculo y pasa lo mismo con la autonomía, que ya se trabaja en baterías que permitirán circular unos 700 kilómetros con una sola carga, que podrá hacerse en 10 minutos.

Con respecto a la instalación de puntos de recarga, ha apuntado que el problema radica en las trabas administrativas, por lo que «se necesita una profunda revisión de la administración para buscar una fórmula para agilizar la expansión desde los 8.500 puntos actuales a los 120.000 que serán necesarios en 2025».

Al mismo tiempo, Pérez Botello ha hecho hincapié en que «los nuevos motores de combustión son parte de la solución para el problema de la calidad del aire». Por ello, ha remarcado que «la manera más rápida para avanzar en la descarbonización» es seguir una estrategia de dos vectores: el impulso del coche eléctrico y la renovación del parque.

En materia de movilidad ‘verde’, Ángel Asensio ha puesto el foco en los beneficios que reporta para el cambio climático y la mejora de la salud pública. Por ello, ha apostado por una cultura de movilidad urbana que afronte los retos de «reducir las emisiones más contaminantes, ser más eficientes y lograr un verdadero ahorro energético».