El Banco de España dice que «el ‘impasse’ político no ayuda a la buena marcha de la economía»

El director general de Economía y Estadística del Banco de España, Óscar Arce, advirtió este lunes de que el ‘impasse’ político “no ayuda a la buena marcha de la economía” por su potencial efecto sobre el consumo y la inversión.

Arce realizó esta valoración después de que el organismo haya bajado su previsión de PIB para este año del 2,4% al 2% por el ajuste realizado por el INE de forma retroactiva al revisar la Contabilidad Nacional de los últimos años, y ante el impacto en la economía de las incertidumbres internacionales y factores domésticos como es, precisamente y, según dijo, la situación política en España.

Una razón es la imposibilidad de predecir las futuras políticas económicas y ve además “prácticamente imposible” que se aprueben, incluso, los Presupuestos Generales del Estado durante este año.

“La convocatoria de nuevas elecciones hace prácticamente imposible que se apruebe algún presupuesto para este año” o se adopten nuevas medidas y nos movemos en un escenario de nueva prórroga de las cuentas. “Estimamos que el presupuesto se apruebe en 2020” y será entonces cuando el nuevo gobierno que se conforme adopte medidas, descartando por tanto cambios en el ejercicio actual.

La incertidumbre se derivaría de esa falta de visibilidad sobre las futuras actuaciones, incluyendo “posibles reformas estructurales” en materia, por ejemplo, laboral. “En la media que la gente no sabe cuáles van a ser los principales retazos tiene incertidumbre y la incertidumbre no es amiga de la actividad económica”, porque “lleva a los consumidores a no consumir” y a las empresas a “posponer las decisiones de inversión”. “No es buena per sé”, resumió.

Arce matizó, sin embargo, que es una situación que viene arrastrándose desde hace años con gobiernos de distinto color y no ha impedido que hoy la economía crezca muy por encima de países vecinos y de la UE.

Lamentó que con ese prolongado escenario se han acomedido “muy pocas reformas de calado” y se están posponiendo algunas que necesita el país para, por ejemplo, combatir el alto desempleo y la precariedad o abordar la reforma en pensiones o reducir el elevado peso de la deuda pública. “No hemos sacado todo el partido que podíamos a una situación que era la óptima para acometer reformas”, lamentó. “Habría que aprovechar mientras el sol todavía brilla para reformar el tejado».

Arce quiso, sin embargo, precisar estas apreciaciones subrayando que los “principales riesgos” que atenazan a la economía “no tienen su origen en la situación política”, sino en factores externos como la guerra comercial entre EEUU y China, el Brexit y otros riesgos geopolíticos como lo han demostrado los recientes ataques a producciones petrolíferas en Arabia Saudí.

(SERVIMEDIA)