La ciudad de Gijón se encuentra en el centro de un debate acalorado sobre los cánticos al ‘Cara al Sol’, el himno del régimen franquista, que se entonaron recientemente frente al monumento a los Héroes de Simancas. La portavoz del partido Vox en el Ayuntamiento, Sara Álvarez Rouco, ha salido en defensa de estos cánticos, calificándolos de una manifestación de la libertad de expresión, mientras que otros partidos como IU, Podemos y el PSOE han condenado estos actos y exigen la retirada del monumento.
La controversia se desató después de que IU, Más País-IAS y Podemos presentaran una propuesta para retirar el citado monumento, ubicado en la fachada de la iglesia de los Jesuitas. Aunque la propuesta fue rechazada, el debate sobre los cánticos y el monumento continúa generando tensión en el Ayuntamiento.
LA DEFENSA DE LOS CÁNTICOS POR VOX
La edil de Vox, Sara Álvarez Rouco, ha pedido «respeto absoluto» a los cánticos del ‘Cara al Sol’ y ha señalado que querer prohibirlos supone «censura pura y dura» y un ataque a la libertad de expresión. Según su criterio, este himno es equiparable a la Internacional que cantan los socialistas y comunistas, y «no pasa nada» a pesar de ser, en su opinión, una exaltación de gobiernos comunistas como el chino o el soviético.
Álvarez Rouco ha rebatido que la canción ‘Cara al Sol’ se catalogue como fascista, subrayando que es un himno revisado muchas veces. Incluso, ha citado un informe de la Fiscalía de Málaga que indicó que el cantarlo en un funeral no va contra nadie, y el Gobierno de España que reconoció que no puede existir sanción administrativa. La portavoz de Vox ha conminado a los demás partidos a «dejar ya de odio a todo lo alejado de su ideología».
LA CONDENA DE LOS CÁNTICOS POR OTROS PARTIDOS
La portavoz de Podemos, Olaya Suárez, ha replicado a Álvarez Rouco que «el odio no es una idea o una opinión» y que los cánticos no son respetables. Además, ha recalcado que «los que no pueden vivir libremente son los que fueron asesinados, ni sus familias, que siguen buscando sus cuerpos por las cunetas».
Por su parte, el portavoz de IU – MP – IAS, Javier Suárez Llana, ha tildado estos cánticos de «escena del Nodo» y ha recriminado el homenaje a los mal llamados, según él, «Héroes de Simancas», que fueron en realidad militares rebeldes del cuartel de Simancas que protagonizaron la sublevación contra la legalidad republicana y ordenaron los primeros bombardeos en Gijón.
Suárez Llana ha defendido que el Ayuntamiento es competente para la retirada de elementos contrarios a la Ley de Memoria Democrática, y ha recalcado que la fachada donde está el monumento solo tiene protección 2 en el Catálogo Urbanístico Municipal, sin ninguna protección patrimonial por parte del Principado. Además, ha señalado que la iniciativa no va contra nadie, sino que se trata de saldar una deuda con quienes lucharon por la democracia y la libertad, y con las víctimas de la Guerra Civil y los represaliados posteriormente.
La concejala de Cultura, Montserrat López Moro (Foro), se ha mostrado en desacuerdo con Rouco y ha expresado el pleno respeto a la ley y la «condena absoluta» a estos cánticos. Ha apelado a la ley estatal, que habla de retirar monumentos, pero no cuando sea de estricto recuerdo privado u algo artístico. Además, ha señalado que la Consejería puede actuar de oficio si no se retira en el resto de casos, o bien colocar una placa explicativa del motivo.
La concejala socialista Carmen Eva Pérez Ordieres ha remarcado a Vox que no se puede ser complaciente con «esa nostalgia», que hace referencia, según ella, a asesinatos, violaciones y al secuestro de niños. «No se puede ser complaciente con este tipo de cántico a personas que se sublevaron contra el régimen democrático», ha recalcado, antes de condenar los mismos.
En el Pleno, Rafael Velasco, en nombre de la Federación Asturiana de Memoria y República, ha considerado que mantener en la ciudad este monumento es una «obvia falsedad histórica, jurídica y política y una afrenta a los sentimientos de quienes fueron víctimas de aquella atroz Dictadura que surgió de un golpe militar y de los crímenes de lesa humanidad que después se cometieron».
En resumen, el debate en torno a los cánticos al ‘Cara al Sol’ en Gijón ha puesto de manifiesto las profundas divisiones políticas y sociales que aún persisten en torno a la memoria histórica y el legado del franquismo en España. Mientras que Vox defiende la libertad de expresión y equipara estos cánticos a manifestaciones de izquierda, otros partidos los condenan como una exaltación del fascismo y una afrenta a las víctimas de la dictadura. Este conflicto, lejos de resolverse, parece destinado a prolongarse en el futuro.