El líder de Más País, Íñigo Errejón, ha manifestado que siente «alivio» tras el archivo de la denuncia de presunta agresión a un vecino en el barrio madrileño de Lavapiés pero también tiene «cierto enfado» por haber sido calumniado por algo que era un «auténtico despropósito». Así lo ha trasladado en declaraciones a los medios en el Congreso en referencia a la decisión de la Audiencia Provincial de Madrid, que confirmó la sentencia que le absuelve de un delito leve de maltrato tras la denuncia de un hombre, que le acusó de propinarle una patada la noche del 2 de mayo de 2021.
De esta forma, el diputado ha dicho que tiene sentimientos «contradictorios» y que este asunto no debería haber llegado a estos niveles, dado que un «señor de extrema derecha le insultó, le acosó le hostigó y le denunció de forma falsa». Por tanto, se ha cuestionado cómo se va a resarcir el daño causado y si se le va a pedir disculpas tras una «campaña» montada por sectores de la extrema derecha, que duró un año.
«Calumniar e insultar no pueden salir gratis», ha enfatizado Errejón para lamentar que parte del daño que se le ha generado no «queda resarcido», puesto que puede haber gente que aún tenga el «ruido» causado por esta denuncia, que tuvo mayor difusión que el reciente archivo.
