Sánchez y Escrivá celebran la aprobación de la reforma de pensiones

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, han celebrado la aprobación definitiva este miércoles de la primera parte de la reforma de las pensiones, que recupera el IPC como referencia para revalorizar las prestaciones y que supone el fin del factor de sostenibilidad, que no ha llegado a entrar en vigor.

«Esta reforma que hoy se aprueba garantizará la suficiencia y el poder adquisitivo de las pensiones. Un mensaje de tranquilidad a pensionistas presentes y futuros», ha asegurado el presidente del Ejecutivo en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter.

Sánchez ha querido agradecer a todos los que han contribuido a impulsar este sistema que será, según sus palabras, «más justo, sostenible y adaptado a la realidad actual».

El impulsor de la reforma, el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, también se ha congratulado a través de su Twitter de la aprobación por parte del Senado de la reforma, que será efectiva a partir del 1 de enero de 2022.

«En 2022 ya tendremos un nuevo marco estable, que da certidumbre a los ciudadanos al garantizar el poder adquisitivo de las pensiones y reforzar el sistema para afrontar el reto demográfico de las próximas décadas», ha señalado en la red social.

Con esta Ley, se modifica el texto refundido de la Ley General de la Seguridad Social y se recogen las principales recomendaciones del Pacto de Toledo en otoño de 2020, que también se integran en el componente 30 del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Su contenido fue pactado con las organizaciones sindicales y empresariales más representativas en el acuerdo social tripartito firmado el 1 de julio de 2021.

La nueva norma fija que el 1 de enero de cada año se incrementarán las pensiones de acuerdo con la inflación media anual registrada en el ejercicio anterior. En 2022, la subida será del 2,5% para las pensiones contributivas. En el caso de que se produzca un año de IPC negativo, la cuantía de las pensiones quedará inalterada.