CSIF se opone al proyecto de reforma de las pensiones y alerta de recortes a los trabajadores

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha expresado este lunes su rechazo al proyecto de reforma de las pensiones y ha alertado de recortes tanto para trabajadores del sector público como del privado.

CSIF ha denunciado, en un comunicado, que la reforma que prepara el Gobierno «endurece la penalización a la jubilación voluntaria» e incrementa «los coeficientes reductores en función de los años cotizados».

El sindicato defiende también el derecho a jubilarse a los 60 años con 30 años cotizados, a pesar de que el Ejecutivo espera desincentivar la jubilación anticipada. CSIF también aboga por el cobro del 100% de la pensión para jubilaciones voluntarias a partir de 38 años de cotización.

Con los cambios que contempla el nuevo proyecto de ley, una persona con entre 35 años y menos de 38 años y seis meses de cotización que opte por la jubilación voluntaria verá que la reducción de su pensión pasa del 16% al 21%, según indica CSIF.

El proyecto del Gobierno mantiene los tramos de cotización, pero incrementa los coeficientes reductores, por lo que «penaliza más la jubilación voluntaria».

Estos oscilarán entre el 21% y el 13%, según los años cotizados, que pueden suponer pérdidas anuales de hasta 8.000 euros, según la denuncia de CSIF en su comunicado.

«Esta propuesta penaliza a las personas trabajadoras que han cotizado muchos años y al final de su carrera tienen un sueldo elevado. CSIF entiende que no hay derecho a que después de una trayectoria profesional larga y una base de cotización alta se puede penalizar a un trabajador por el hecho de querer adelantar en dos años su retiro», ha expresado el sindicato.

CSIF ha insistido en que estos recortes en las pensiones se suman a los acometidos en 2011 por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, que elevó la edad para acceder a la jubilación y subió de 180 a 300 el número de meses para el cálculo de la base reguladora.

PROPUESTAS DE CSIF

El sindicato también se encuentra en contactos con los grupos parlamentarios para trasladarse sus enmiendas sobre la reforma de las pensiones.

Entra ellas, CSIF apuesta por una jubilación voluntaria a los 60 años con un periodo mínimo de cotización de 30 años, el 100% de la pensión con un periodo de cotización igual o superior a 38 años para las jubilaciones voluntarias, el acceso a la jubilación voluntaria a cualquier edad con un periodo de cotización igual o superior a 40 años, o una compensación en la pensión para los que decidan prorrogar su vida laboral a pesar de poder acceder a la jubilación voluntaria con el 100% de su pensión.

CSIF también ha solicitado a los grupos parlamentarios la equiparación de las pensiones de clases pasivas, reguladas por los haberes reguladores publicados anualmente en los Presupuestos Generales del Estado (PGE), con las del régimen general.

Las pensiones de clases pasivas se calculan con el cómputo de toda la vida laboral, al contrario de las del régimen general, en las que computan los últimos 25 años.

Para CSIF, esto representa «una doble penalización», ya que no se cotiza sobre el conjunto de retribuciones percibidas sino por la regulación anual de los (PGE) y perjudica las carreras profesionales que culminan en una categoría superior, con una merca de entre el 15 y el 35% en comparación con la cuantía percibida por el Régimen General.

Ante esta situación CSFI propone un incentivo de un 5% anual acumulable para empleados públicos de clases pasivas que decidan prorrogar su vida laboral más allá de la jubilación voluntaria cuando se percibe el 100% de los haberes.