Es difícil no sucumbir ante la belleza y sabor de unos ricos waffles. Este postre originario de Bélgica, y conocido también con el nombre de gofres (palabra proveniente del francés), resulta en toda una tentación al paladar; ya que, sea como sea que decidas disfrutarlos, siempre son una buena alternativa para ser servidos como merienda de media tarde y también para desayunar.
Este no se trata de un plato de elaboración compleja; sin embargo, sí es necesario seguir algunos pasos para que su masa quede realmente perfecta. Quédate a conocer cómo puedes lograrla en muy sencillos pasos.
Dulces y salados: las versiones de los ricos waffles o gofres

Aunque la forma más popular de disfrutar de los waffles es comiéndolos dulces acompañados con frutas, helados o mermeladas, la verdad este delicioso “bizcocho” o “pan” marcado en forma de rejilla, es cada vez más popular consumirlo salado.
Con una masa ligera y una curiosa presentación, estos se han adueñado del corazón de millones de personas en el mundo; y de allí parte el hecho de ser tan apreciados con diferentes acompañantes.
Puedes servirlos tanto con crema de chocolate como con tocino, y disfrutar de su sabor; y, aunque puedas pensar que “gofre” es el nombre que se le designa cuando se sirve salado, pues no; ambos nombres significan lo mismo y se aplican sin distinción a ambas maneras de disfrutarlos, dulces o salados.
Cómo lograr una masa para waffles perfecta

Tal como sucede con las tortitas americanas y con los crepes, el secreto para una masa de gofres perfectos, radica en las proporciones exactas.
Sí, tal como lo lees; para que la masa quede perfecta, respetar las proporciones es una de las claves. Por supuesto, es necesario también que los ingredientes se encuentren a la temperatura adecuada y que la mezcla se haga respetando a los ingredientes secos y los húmedos, trabajándolos por separado antes de integrarlos.
Ingredientes que necesitas para que te queden de 10

Tener unos waffles perfectos será muy sencillo con estas proporciones y con el simple paso a paso que debes seguir. Eso sí, tal como sucede con otras recetas, nada es al azar, y la forma de mezclar los ingredientes, así como los reposos y otros detalles, tienen su razón de ser.
Para hacer unos 12 gofres aproximadamente, necesitas: 2 huevos, 375 ml de leche, 100 gramos de mantequilla derretida, 240 gramos de harina, 3 cucharaditas de polvo Royal o polvo de hornear y ½ cucharadita de sal.
El batido de los huevos

Lo primero que debes hacer es batir los huevos. Procura que estos sean frescos y que, además, se encuentren a temperatura ambiente. Si los guardas en la nevera, retíralos con al menos veinte minutos de anticipación y comienza a preparar la masa cuando ya se encuentre a temperatura ambiente.
Casca los huevos y viértelos en un bol amplio. Con la ayuda de un tenedor, o mejor aún, con un batidor manual de varillas, bátelos hasta tener una mezcla bien espumosa.
Termina con los ingredientes húmedos

Una vez que tengas los huevos batidos y con una consistencia bien espumosa, es el momento de añadir el resto de los ingredientes húmedos.
Vierte la leche, la cual debe encontrarse a temperatura ambiente, y añade también la mantequilla. Esta última debe estar derretida, pero eso sí, no la añadas caliente, pues el choque de temperatura puede ocasionar que algunas partes de los huevos se coagulen.
La importancia de tamizar los ingredientes secos al hacer tus waffles

Cuando tengas los ingredientes húmedos bien integrados, es el momento de añadir los secos. Sin embargo, es necesario comentarte que estos los debes tamizar antes de añadirlos.
Pasa por un colador, la harina, sal y también el polvo Royal. Al hacer esto, eliminas cualquier partícula que se pueda encontrar presente; y además, evitas la formación de grumos al tiempo que aireas muy bien la masa.
Así se unifican los ingredientes para formar la masa

Una vez que tengas los ingredientes húmedos bien integrados, y tengas los ingredientes secos tamizados en un bol, es el momento preciso para mezclar ambos y así formar la masa para los waffles.
Para integrarlos bien, toma una porción de los ingredientes secos y añádela a la mezcla líquida. Con la ayuda de una espátula o cuchara, incorpora bien y luego termina de añadir el resto. Termina de mezclar completamente, hasta tener una masa de consistencia bastante suave.
Cómo cocinar los waffles o gofres

Las planchas de los waffles o gofres, generalmente no necesitan ser pinceladas con aceite ni con ninguna materia grasa, ya que, gracias a la cantidad de mantequilla que lleva la masa, esta se despega con facilidad una vez que se cocinan.
Pon a calentar el molde y en caso de ser automático, enciéndelo y espera que tenga la temperatura indicada. Vierte la masa en el centro y deja que esta corra naturalmente hacia los costados.
Para que los gofres queden perfectos, evita poner una porción muy grande de masa. Cuando esté listo, desmolda y repite hasta terminar con toda la masa.
Ideas para disfrutarlos más

Esta masa que te he presentado, es la más básica; por lo tanto, combina muy bien con combinaciones saladas y dulces. No obstante, si deseas una terminación más dulce en la misma, añade un poco de azúcar para dar ese toque dulzón que buscas. Añade el azúcar en el bol de los ingredientes húmedos e intégrala muy bien antes de añadir los secos.
En caso de que desees unos waffles o gofres más crujientes, elimina el polvo Royal y verás como quedan más crocantes.
Con qué acompañarlos

Esta es una de las recetas que da para todo, pues como te comentaba hace algunas líneas, la puedes acompañar con alimentos salados y dulces y siempre estarán perfectos. Ideas para acompañarlos son infinitas.
Puedes servir con una bola de helado, un poco de almíbar, frutas frescas, frutos secos, crema de chocolate, nata montada. Y de combinaciones saladas, quedan muy bien con quesos, jamones, bacón tostado e incluso con huevos fritos.