El cerebro es el órgano principal del sistema nervioso y se encarga de procesar información sensorial, controlar el movimiento, regular funciones vitales y generar procesos cognitivos y emocionales. Dada su complejidad, los expertos siguen tratando de profundizar en su conocimiento.
En este sentido, ahora los expertos aseguran que el cerebro puede ser más viejo que la edad biológica de algunas personas, y también desvelan el método que se puede poner en práctica para poder descubrir si en cada caso en particular está sucediendo.
¿ENVEJECE TU CEREBRO MÁS RÁPIDO QUE TU EDAD CRONOLÓGICA?

Después de encontrar el cerebro humano brilla, los investigadores han encontrado que el cerebro envejece más rápido que la edad cronológica a través de diferentes estudios que muestran que esto podría aumentar significativamente el riesgo de sufrir problemas de salud como la demencia o la muerte.
Al mismo tiempo, estos hallazgos son esperanzadores de cara a una intervención temprana. Dos estudios revolucionarios demuestran que medir la velocidad a la que envejece el cerebro podría suponer una transformación de la forma en la que somos capaces de predecir y prevenir las enfermedades, incluso antes de que aparezcan los síntomas.
CÓMO DETERMINAR LO RÁPIDO QUE ENVEJECE EL CEREBRO

La vejez llega para todo el mundo, pero la rapidez con la que lo hace y el estado de salud en el que se llega puede variar de forma notable entre unas y otras personas. Una investigación ha podido saber cómo de rápido está envejeciendo el cerebro. De esta forma, se asegura que tener un «cerebro viejo» aumenta el riesgo de muerte en un 182% durante unos 15 años, si se compara con personas cuyos cerebros envejecen con normalidad.
En el primero de los estudios, los científicos de la Universidad de Stanford descubrieron que las personas con órganos biológicamente más jóvenes, tenían un menor riesgo de desarrollar enfermedades. Esto era especialmente evidente en el caso del cerebro, que además de aumentar el riesgo de muerte, tener un cerebro más viejo multiplica por tres el riesgo de demencia.
ENVEJECIMIENTO BIOLÓGICO DEL CEREBRO CON PRECISIÓN

El equipo de investigación de Stanford efectuó estos descubrimientos a través de un análisis de sangre basado en biomarcadores proteicos, lo que les permitió estimar la edad biológica de órganos específicos del cuerpo, una medida que, a diferencia de lo que sucede con la edad cronológica, muestra el verdadero estado de los órganos.
Por otro lado, investigadores de la Universidad de Duke y la Universidad de Otago, en Nueva Zelanda, han podido demostrar que una sola resonancia magnética puede ser útil para predecir el envejecimiento biológico del cerebro con una enorme precisión.
UNA REVOLUCIÓN PARA AFRONTAR LAS ENFERMEDADES DEL CEREBRO

Más allá de recordar que las descargas eléctricas en el cerebro son la mejor forma de mejorar en matemáticas, hay que recordar que estos estudios, en conjunto, pueden revolucionar la manera en la que los científicos y los médicos pueden predecir y prevenir enfermedades crónicas much antes de que aparezcan.
De esta manera, en vez de tratar cada enfermedad de forma individual una vez que son desarrolladas por la persona, se pueden dar pasos hacia una medicina preventiva que permita intervenir mientras las personas aún son jóvenes y antes de desarrollar enfermedades relacionadas con la edad.
EL CEREBRO Y LAS DIFERENCIAS ENTRE EDAD BIOLÓGICA Y CRONOLÓGICA

Los científicos llevan años diferenciando entre la edad cronológica, es decir, los años que se llevan vivos, y la edad biológica. Esta última nos muestra la salud y el estado de un órgano, mostrando lo bien que está funcionando, cuánto se deteriora y cómo de probable es desarrollar una enfermedad, sostienen los autores del estudio.
Podemos encontrar órganos como la piel, que pueden mostrarse biológicamente más jóvenes que la edad cronológica, y al mismo tiempo el corazón, por ejemplo, puede envejecer más rápido. Es decir, la longevidad de cada órgano viene determinada por una combinación de genética, estrés, estilo de vida, exposiciones ambientales e historial de enfermedades. Estos factores sirven para explicar por qué algunas personas se mantienen biológicamente jóvenes y otras envejecen de forma prematura y enfrentan mayores riesgos a afecciones como diabetes, demencia o enfermedades cardíacas.
CÓMO AFECTA LA EDAD BIOLÓGICA AL CEREBRO Y OTROS ÓRGANOS

Para determinar la edad biológica, los científicos han desarrollado «relojes de envejecimiento» basados en biomarcadores. Una de las ventajas de un reloj de envejecimiento bien diseñado es que se puede saber por qué algunos órganos envejecen con mayor rapidez y cómo mantenerlos jóvenes ayuda a mejorar la longevidad y la calidad de vida.
Un estudio pudo determinar la vinculación entre la edad biológica y los resultados en salud, de manera que los órganos más envejecidos predecían enfermedad. Cada reloj orgánico muestra cuánto más joven o viejo es un órgano en comparación con la edad cronológica de una persona. Aquellos con órganos más viejos mostraban más probabilidades de desarrollar enfermedades en esos órganos.
DETECCIÓN PRECOZ DE ENFERMEDADES RELACIONADAS CON EL CEREBRO

El test de Stanford ha sido patentado y licenciado a una empresa de biotecnología buscando que pueda tener un uso clínico y se pueda llegar a implementar de forma generalizada en hospitales y clínicas a través de DunedinPACNI, un biomarcador basado en algoritmos desarrollados por el equipo para estimar lo rápido que está envejecido una persona usando escáneres cerebrales estándar.
A partir de una imagen cerebral, los investigadores pueden estimar la velocidad a la que se está envejeciendo para predecir el riesgo de enfermedad. Este algoritmo ha sido desarrollado a partir de más de 50.000 resonancias magnéticas cerebrales. Este reloj de envejecimiento detecta marcadores estructurales clave, con los cuales poder llevar a cabo una detección precoz de enfermedades.
MEDICINA PERSONALIZADA SOBRE EL CEREBRO Y LA SALUD GENERAL

El poder determinar esta relación entre la salud del cerebro y que este pueda ser más viejo que nuestra edad biológica puede ser clave de cara a un futuro de la medicina personalizada. Se trata de estudios considerados de una alta calidad que sirven para construir mejores modelos y lograr comprender mejor el envejecimiento y cómo medirlo.
De esta forma, los científicos esperan que, en el futuro, con una simple gota de sangre o una resonancia magnética, se podrá llegar a conocer intervenciones personalizadas y poder seguir su efectividad a lo largo del tiempo. Estamos, por lo tanto, ante una herramienta importante para el futuro.