Respirar no es solo un acto automático: es un privilegio que a veces se subestima. Cada inhalación lleva oxígeno vital a nuestro cuerpo y cada exhalación elimina toxinas, pero ¿qué pasa cuando esta maquinaria tan perfecta empieza a fallar? En España, más de 78.000 personas pierden la vida cada año por enfermedades respiratorias, una cifra alarmante que, según la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), va en aumento. Por suerte no todo está perdido, existe un alimento que puede limpiar tus pulmones

El deterioro de los pulmones, especialmente por el consumo excesivo de tabaco, ha llevado a que patologías como la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) se posicionen como una de las causas más letales del país. En este escenario, la medicina busca aliados más allá de los tratamientos convencionales. Y entre esos aliados, sorprendentemente, se encuentra un alimento que muchos españoles han olvidado: el jengibre.

Un enemigo silencioso y persistente: las enfermedades pulmonares en España

Los pulmones, esos dos órganos ubicados en el pecho y resguardados por la caja torácica, cumplen una función esencial: el intercambio de gases. A través de ellos absorbemos oxígeno y expulsamos dióxido de carbono. Sin embargo, mantenerlos limpios y en buen estado es cada vez más difícil en una sociedad donde el tabaquismo, la contaminación y el sedentarismo han dejado de ser excepciones para convertirse en la norma.

Según la SEMG, la EPOC encabeza la lista de enfermedades respiratorias con mayor índice de mortalidad en España. Esta afección, caracterizada por la obstrucción persistente del flujo de aire, afecta de manera directa a la calidad de vida de quienes la padecen. Lo más preocupante es que muchas veces se diagnostica tarde, cuando el daño ya es considerable.

Ante este panorama, neumólogos de todo el país insisten en dos estrategias fundamentales: la prevención y el fortalecimiento del sistema respiratorio. Y es aquí donde el papel del alimento adquiere una nueva dimensión.

El jengibre: el alimento olvidado que puede ayudar a tus pulmones

Mucho se ha dicho sobre el ajo y el té verde como aliados de los pulmones, pero hay un alimento que ha sido alabado por la medicina asiática durante siglos y que en España ha quedado relegado al rincón de lo exótico: el jengibre. Este rizoma, de sabor picante y aroma penetrante, ha demostrado poseer propiedades que pueden ser claves para nuestra salud respiratoria.

El doctor David Flandes, jefe asociado del Servicio de Neumología y director de la Unidad de Broncoscopias y Neumología Intervencionista del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, ha destacado al jengibre como un alimento con gran potencial en el cuidado pulmonar. ¿La razón? Su capacidad antiinflamatoria y antioxidante.

El gingerol y el shogaol, compuestos activos presentes en el jengibre, ayudan a aliviar la inflamación de las vías respiratorias, reducir los síntomas del asma y minimizar las reacciones alérgicas. Además, su alto contenido en agua lo convierte en un excelente depurador natural. Como se sabe, los pulmones generan mucosidad para protegerse, pero esta puede incrementarse ante infecciones o exposición a agentes irritantes. En este contexto, un alimento como el jengibre no solo ayuda a expectorar, sino también a combatir virus y bacterias de forma natural.

Respirar mejor empieza en el plato: otros alimentos que ayudan a limpiar los pulmones

Adoptar una dieta consciente es más que una tendencia: es una herramienta de salud preventiva. Y aunque el jengibre lidera la lista de aliados respiratorios, no está solo. Existen otros alimentos que, según expertos, también pueden reforzar el sistema respiratorio.

• Frutas cítricas: Limones, naranjas, mandarinas o pomelos. Estos alimentos son ricos en vitamina C, un antioxidante potente que activa el sistema inmunológico y ayuda al cuerpo a defenderse de infecciones respiratorias. Además, sus propiedades ayudan a neutralizar los efectos de agentes tóxicos que ingresan por vía aérea.
• Yema de huevo: Aunque suele generar controversia por su contenido en colesterol, la yema de huevo es una fuente notable de vitamina D, nutriente que refuerza la inmunidad y contribuye a la prevención de infecciones pulmonares.
• Frutos secos: Nueces, almendras y avellanas son alimentos cargados de magnesio, un mineral clave en la relajación de los músculos bronquiales. Su consumo regular puede mejorar la capacidad pulmonar y disminuir la inflamación.
• Pescados ricos en omega-3: Salmón, sardinas, anchoas o trucha. Estos pescados grasos son alimentos esenciales para quienes sufren enfermedades respiratorias crónicas como el asma o la EPOC. Los ácidos grasos omega-3 que contienen poseen efectos antiinflamatorios que benefician directamente a los pulmones.
• Vegetales de hojas verdes: Espinacas, acelgas o la col rizada no solo aportan vitamina C, sino también antioxidantes y ácido fólico, nutrientes que, al combinarse, fortalecen tanto el sistema respiratorio como el nervioso.

Más allá de los medicamentos: el poder del alimento como medicina preventiva

La sabiduría popular ya lo decía: “Somos lo que comemos”. Y aunque esta frase se ha repetido hasta el cansancio, su significado cobra mayor peso cuando hablamos de salud pulmonar. Hoy más que nunca, los especialistas coinciden en que ciertos alimentos no solo complementan los tratamientos médicos, sino que pueden tener un impacto directo en la prevención de enfermedades respiratorias.

El alimento, cuando es seleccionado con criterio, actúa como un escudo invisible frente a infecciones, inflamaciones y deterioros orgánicos. No se trata de fórmulas milagrosas ni de reemplazar medicamentos, sino de sumar hábitos saludables que, con el tiempo, fortalezcan nuestro sistema.

En este contexto, es importante destacar que el jengibre no es un fármaco, pero su uso regular, combinado con una dieta equilibrada, puede aportar beneficios reales. Ya sea en infusión, rallado en ensaladas o incorporado en platos calientes, este alimento puede convertirse en un gran aliado de tu salud respiratoria.

El desafío pendiente: cuidar los pulmones en una sociedad con humo

A pesar de los avances en medicina y los múltiples estudios que alertan sobre los riesgos del tabaco, el consumo excesivo sigue siendo una realidad preocupante. Según los últimos informes de la SEMG, el tabaquismo es la principal causa prevenible de enfermedades pulmonares graves, incluida la EPOC.

Ante esta situación, los profesionales de la salud insisten en la necesidad de avanzar hacia una sociedad libre de humo. Los espacios públicos sin tabaco, las campañas de concienciación y el acceso a tratamientos para dejar de fumar son solo algunas de las estrategias que se están implementando. Pero, sin una conciencia colectiva sobre la importancia de cuidar los pulmones, estos esfuerzos pueden quedarse cortos.

En nuestra rutina diaria, la fruta tiene un papel esencial. Fresca, variada y de calidad: así la recomienda la Organización Mundial de la Salud, que insiste en consumir al menos 400 gramos diarios. Pero ¿es posible garantizar esa calidad cuando compramos la fruta en supermercados? La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha realizado un estudio que podría cambiar la forma en que muchos hacemos la compra.

A través de un análisis comparativo entre 18 cadenas distintas, la OCU ha evaluado varios productos, incluida la fruta, y ha revelado cuál es el supermercado que ofrece la peor experiencia en este apartado. El resultado ha generado controversia, especialmente entre quienes confían ciegamente en las grandes cadenas.

La fruta, ese básico diario que no siempre es tan saludable como creemos

Incluir fruta en la dieta no es solo una sugerencia de los nutricionistas: es una necesidad vital. Las vitaminas, los antioxidantes, la fibra y el agua presentes en frutas como la manzana, el plátano, las uvas o los cítricos ayudan a mantenernos saludables, con energía y protegidos frente a enfermedades. Sin embargo, esta saludable costumbre puede perder parte de su beneficio si el producto que consumimos no tiene la calidad adecuada.

Aquí es donde entra el análisis de la OCU, una organización que vela por los derechos de los consumidores desde hace décadas y que, en esta ocasión, ha puesto el foco en la sección de frutería de nuestros supermercados. La intención era clara: detectar cuáles ofrecen productos frescos, bien presentados, de calidad nutricional adecuada y cuáles, sencillamente, no cumplen con el mínimo exigible.

Aunque muchos confían en la comodidad de comprar fruta junto al resto de productos del hogar, el estudio de la OCU demuestra que esta práctica tiene matices importantes. Comprar toda la cesta de la compra en el mismo lugar no siempre es garantía de calidad, al menos en lo que respecta a la fruta.

BonÀrea: la gran sorpresa negativa del informe de la OCU

La investigación de la OCU incluyó carne, pan, pescado y fruta. Y fue en este último apartado donde los resultados causaron más sorpresa. La cadena BonÀrea, de origen catalán, resultó ser la peor valorada en lo referente a la fruta, situándose nada menos que 28 puntos por debajo de la media nacional.

La OCU ha sido clara: la fruta en BonÀrea no convence. Pero más allá de una simple puntuación baja, lo que llama la atención son las razones que explican esta calificación. No se trata únicamente de la calidad de los productos, sino también de factores como la presentación, el surtido disponible y la frescura que los clientes perciben. En algunos casos, incluso la forma en que se exhibe la fruta podría estar influyendo negativamente en la experiencia de compra.

La puntuación tan baja en esta categoría no significa necesariamente que BonÀrea esté fallando como supermercado en general. De hecho, la propia OCU señala que la cadena obtiene una de las mejores valoraciones en otros aspectos que analizaremos más adelante. Pero en el caso específico de la fruta, la realidad es clara: hay margen —y mucho— para mejorar.

Un contraste llamativo: la mejor carne y la peor fruta en un mismo supermercado

El informe de la OCU no solo señala lo negativo. También resalta los puntos fuertes de cada cadena, y BonÀrea, a pesar de su mal resultado en fruta, lidera el ranking en otro apartado: la carne. Con una puntuación de 84 sobre 100, esta cadena destaca por ofrecer carnes frescas, bien conservadas y de origen claro, ganándose la confianza de los consumidores.

Este contraste entre una excelente carne y una fruta muy mal valorada refleja una realidad que muchos pasamos por alto: ningún supermercado es perfecto en todo. Las fortalezas de cada cadena pueden variar enormemente, y lo que en una tienda es sinónimo de frescura y calidad, en otra puede convertirse en el talón de Aquiles.

Además de la carne, BonÀrea también ha sido bien valorada por sus comidas preparadas y los productos para mascotas, demostrando que su modelo de negocio funciona para ciertos segmentos. Pero la fruta, por el momento, no está entre sus puntos fuertes.

Los supermercados que sí aprueban con nota en fruta

Frente a la decepción que supone BonÀrea en el apartado frutal, la **OCU también revela quiénes lo están haciendo bien. Supermercados como BM, Gadis, Ahorramás, Aldi, Eroski y El Corte Inglés han obtenido puntuaciones superiores a los 50 puntos, posicionándose como las mejores opciones para comprar fruta fresca y de calidad en España.

Estas cadenas destacan por la variedad de su oferta, la correcta presentación de los productos, su frescura y, en muchos casos, por mantener un buen equilibrio entre calidad y precio. La experiencia de compra también se ve reforzada por un entorno cuidado, donde el cliente siente que puede elegir con confianza.

Los consumidores valoran mucho poder encontrar, en una misma visita, plátanos sin golpes, fresas con sabor, manzanas crujientes y naranjas jugosas. Y todo esto se refleja en las puntuaciones positivas que la OCU recoge en su informe. Son detalles que, aunque puedan parecer pequeños, marcan la diferencia cuando se busca cuidar la salud sin renunciar a una compra cómoda.

Conclusiones que invitan a una compra más informada

Este nuevo estudio de la OCU no solo sirve como ranking de supermercados. También actúa como una llamada de atención a todos los consumidores que, por falta de tiempo o costumbre, hacen su compra semanal sin detenerse a pensar en la calidad real de lo que llevan a casa.

La fruta, por su carácter perecedero, necesita más cuidado que otros alimentos. No basta con que esté disponible: debe estar fresca, bien conservada y correctamente manipulada. De lo contrario, pierde parte de su valor nutricional y su sabor, convirtiéndose en un producto que no cumple con su propósito esencial.

El informe de la OCU deja claro que, aunque BonÀrea sea una buena opción para carnes y productos preparados, no lo es para la fruta. En contraposición, cadenas como Aldi, BM o Gadis ofrecen una experiencia más satisfactoria en este apartado, lo que las convierte en la elección adecuada si el objetivo principal es cuidar la salud a través de la alimentación.

A menudo creemos que cuanto más caro es un tratamiento facial, mejores serán sus efectos sobre la piel. Sin embargo, esta lógica no siempre se cumple, especialmente cuando hablamos de cosmética económica pero bien formulada. Así sucede con la nueva esencia facial de Mercadona, un producto que ha revolucionado mi rutina diaria.

Se trata de la Esencia Facial Hidratante y Oxigenante Prevent Age Skin de Deliplus, una propuesta discreta a simple vista, pero sorprendentemente eficaz. A continuación, te mostraremos en detalle por qué esta fórmula está dando tanto que hablar y por qué, por apenas 7 euros, ha conseguido resultados que otros productos de precio mucho mayor ni rozan.

Mercadona lanza una esencia facial que revoluciona el cuidado de la piel

Desde hace años, Mercadona ha sabido posicionarse como algo más que un supermercado. Su línea de cosmética, Deliplus, se ha ganado el respeto de muchas usuarias gracias a productos efectivos, prácticos y económicos. Pero esta vez ha ido un paso más allá con su nueva esencia facial hidratante y oxigenante Prevent Age Skin, un lanzamiento que está arrasando.

¿La razón? Su combinación de ingredientes inteligentes que realmente funcionan. En el corazón de esta fórmula está el ácido hialurónico, un clásico infalible en el mundo de la hidratación, junto a un extracto derivado de la flor de la capuchina, una planta con propiedades oxigenantes que estimula la microcirculación y le devuelve al rostro un brillo saludable. Esta mezcla da como resultado una piel más viva, más despierta, más equilibrada.

A esto se suma la tecnología Micro Capsule Tech, que permite que los principios activos se liberen de manera progresiva. En otras palabras: los beneficios no se esfuman en el primer contacto, sino que se mantienen durante horas. El efecto visual y sensorial es casi inmediato: una piel más descansada, suave, fresca y visiblemente más luminosa desde los primeros usos.

¿Qué es una esencia y por qué es el paso olvidado que lo cambia todo?

Todavía hay muchas dudas sobre qué papel cumple una esencia en la rutina facial. No es un tónico, ni un sérum, ni una crema hidratante. El producto de Mercadona es más bien ese eslabón perdido que une la limpieza con el tratamiento. Su función es preparar la piel para que todo lo que apliquemos después (como sérums o cremas) penetre mejor y funcione de forma más eficaz.

Esta esencia de Mercadona lo consigue con una textura ligera, casi acuosa pero con un punto gelificado que facilita la aplicación sin escurrirse entre los dedos. No deja sensación pegajosa, se absorbe con rapidez y deja una película sedosa que embellece la piel sin interferir en los pasos siguientes.

Un gesto tan simple como aplicarla con las manos, mediante suaves toques sobre el rostro, puede marcar la diferencia. Desde un principio, aquellas que la han probado notaron que los productos posteriores cunden más, y sus efectos se intensifican. Todo lo bueno empieza con una piel bien preparada.

Resultados visibles en pocos días: hidratación y luminosidad real

Uno de los aspectos que más sorprendentes de la esencia de Mercadona es la rapidez de sus resultados. En menos de una semana, la piel comienza a mostrar un cambio real: menos sequedad, mejor textura, más uniformidad en el tono y, sobre todo, un aspecto revitalizado. Esa luminosidad natural que solemos buscar con filtros en el móvil aparecía ahora de forma espontánea, sin maquillaje.

Las pequeñas líneas causadas por la deshidratación comienzan a atenuarse. Y esas zonas apagadas que suelen instalarse en la parte inferior de las mejillas o en el contorno de los ojos empiezan a difuminarse. En su lugar, surge una piel que parecía haber dormido ocho horas cada noche. Y no, no es magia: es ciencia cosmética bien aplicada.

Si la esencia se introduce en una rutina completa —limpieza, esencia, sérum, crema y protección solar— el cambio es aún más evidente. La piel, incluso si es mixta o grasa como la mía, se equilibra sin engrasarse. Y si es seca o cansada, recupera elasticidad y confort.

Una fórmula eficaz, accesible y respetuosa con todo tipo de piel

En un mercado saturado de productos de alto coste y dudosa efectividad, esta propuesta de Mercadona brilla por méritos propios. No solo funciona, sino que lo hace sin exigir grandes inversiones ni rutinas complicadas. Por 7 euros, obtienes un producto de 125 ml, cantidad más que generosa que cunde muchísimo. Con apenas cuatro o cinco gotas, tienes suficiente para rostro y cuello.

Otro punto a su favor es su versatilidad. Puede usarse tanto por la mañana como por la noche, y su fórmula es tan respetuosa que incluso las pieles más sensibles la toleran bien. No contiene perfumes agresivos ni ingredientes problemáticos, algo que, honestamente, no se espera en un producto de este precio.

Y lo más curioso: ha pasado desapercibida en las estanterías de Mercadona. No es un lanzamiento envuelto en grandes campañas publicitarias ni con envases llamativos. Pero quienes la han probado, repiten. Y lo comentan. Yo misma he recibido decenas de preguntas de amigas, familiares y lectoras, intrigadas por ese cambio repentino en mi piel. La respuesta es esta esencia.

Cómo integrar la esencia de Mercadona en tu rutina

Para que la esencia Prevent Age Skin de Deliplus dé todo de sí, es importante aplicarla en el momento adecuado y de la manera correcta. Aquí el orden más recomendable:

• Limpieza: fundamental para eliminar impurezas y restos de maquillaje.
• Tónico: equilibra el pH y tonifica la piel.
• Esencia: aplícala con las manos, presionando suavemente, sin arrastrar.
• Sérum: elige uno específico para tus necesidades (antiedad, firmeza, manchas).
• Crema hidratante: para sellar la hidratación.
• Protección solar (en la mañana): el paso irrenunciable para proteger el rostro.

Esta rutina, sencilla y lógica, no requiere más de cinco minutos por la mañana y cinco por la noche. Y sin embargo, los efectos se notan en profundidad si se mantiene con constancia.

A menudo damos por hecho que nuestros riñones funcionan como un reloj suizo. Sin embargo, este par de órganos discretos y silenciosos trabajan sin descanso para filtrar desechos, regular la presión arterial y mantener en equilibrio los minerales esenciales del cuerpo. Lo sorprendente es que muchos de los problemas renales no aparecen de un día para otro, sino que se desarrollan lentamente, a menudo como consecuencia de consumir ciertos alimentos.

Así lo explica el médico nefrólogo Gabriel Lapman, autor del libro “Más zapatillas, menos pastillas”, quien advierte que la enfermedad renal crónica raramente camina sola: suele ser la secuela de otras patologías que, en gran medida, se originan en el plato. Y lo más preocupante es que ciertos alimentos comunes —esos que muchas veces consideramos prácticos e inofensivos— pueden convertirse en los enemigos silenciosos de nuestros riñones.

Comidas congeladas: la falsa comodidad que cobra factura a largo plazo

A simple vista, los alimentos congelados parecen ser los salvadores de nuestras rutinas aceleradas. Basta con abrir el paquete, meterlo unos minutos al microondas y listo: cena servida. Pero lo que muchas veces ignoramos es que esta comodidad puede tener un precio muy alto para la salud renal.

Según los especialistas, muchas de estas comidas contienen más de 1.000 miligramos de sodio por porción. Si tenemos en cuenta que la cantidad diaria recomendada para personas con riesgo renal es de apenas 1.500 mg, una sola ración puede cubrir dos tercios del límite. En otras palabras, el “plato fácil” podría estar desbordando silenciosamente el umbral de seguridad para nuestros riñones.

Además del sodio, estos alimentos suelen estar cargados de conservantes que, si bien prolongan su vida útil, alteran la función renal a largo plazo. La doctora Laura Arentz, especialista en trasplante renal, agrega otro dato que pocas personas conocen: algunos fabricantes reemplazan la sal con cloruro de potasio. Aunque a simple vista parezca una opción más saludable, este compuesto también puede ser perjudicial para quienes ya tienen una función renal comprometida.

Es por eso que los expertos insisten en la importancia de leer detenidamente las etiquetas. Optar por versiones bajas en sodio o —mejor aún— preparar comidas caseras con alimentos frescos y naturales puede marcar una gran diferencia. Cuando se trata de riñones, cada gramo de sal cuenta.

Refrescos: dulces, burbujeantes y peligrosas

Pocas bebidas generan tanta devoción como los refrescos. Las hay para todos los gustos: cola, naranja, lima-limón. Sin embargo, tras ese sabor agradable y ese chispeante burbujeo, se esconde un cóctel que puede dañar gravemente la salud renal.

Los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos han identificado al fósforo artificial como uno de los ingredientes más nocivos que contienen estas bebidas. Este aditivo no solo se acumula en el organismo con el tiempo, sino que, al hacerlo, interfiere con la capacidad del cuerpo para procesar correctamente minerales esenciales. El resultado: daño progresivo a los riñones.

Un estudio titulado “La ingesta dietética de fósforo y el riñón” confirmó que el fósforo en exceso, especialmente cuando proviene de fuentes artificiales, se asocia directamente a un mayor riesgo de desarrollar enfermedad renal crónica. Pero el fósforo no es el único problema. Las gaseosas también están cargadas de sodio y azúcares, dos elementos que pueden desestabilizar la presión arterial, aumentar el riesgo de diabetes y acelerar el deterioro renal.

En otras palabras, cada vez que abrimos una lata de refresco, no solo estamos ingiriendo una bebida. Estamos introduciendo un alimento con potencial tóxico para uno de nuestros órganos más vitales. ¿La alternativa? Aguas saborizadas caseras, infusiones naturales y, por supuesto, agua pura, el mejor aliado para mantener sanos nuestros riñones.

Carne en exceso: cuando el exceso de proteína se vuelve un castigo para el cuerpo

La carne roja ocupa un lugar protagónico en la dieta de millones de personas. Es sabrosa, rica en hierro y una fuente importante de proteínas. Sin embargo, como todo en la vida, el exceso puede resultar perjudicial, especialmente para quienes buscan preservar la salud renal.

“Consumir demasiada carne roja o proteína animal genera un alto nivel de ácido en la sangre”, explica el Dr. Gabriel Lapman. “Y son los riñones los encargados de eliminar ese ácido. Si la carga es constante, el desgaste es inevitable”.

Este proceso, conocido como acidosis metabólica, es una de las complicaciones más comunes en personas con enfermedad renal. La revista Nutrients publicó una investigación que señala cómo una dieta alta en proteínas acelera el avance de esta condición, mientras que una alimentación moderada puede ralentizarla considerablemente.

La clave, según los especialistas, no está en eliminar por completo la carne, sino en buscar un equilibrio. Incorporar más fuentes vegetales de proteína —como legumbres, tofu o frutos secos— y disminuir el tamaño de las porciones cárnicas puede reducir significativamente la carga sobre los riñones. Y aunque no lo parezca, elegir el alimento correcto en cada comida puede convertirse en un acto de amor propio. Porque cuidar los riñones no se trata de seguir una dieta estricta, sino de aprender a escuchar lo que el cuerpo necesita de verdad.

¿Sabías que los riñones filtran más de 180 litros de sangre por día?

El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de EE.UU. revela un dato que pone en perspectiva la importancia de cuidar nuestros riñones: estos órganos filtran aproximadamente media taza de sangre por minuto. Eso equivale a más de 180 litros por día.

Dentro de cada riñón se encuentran cerca de un millón de nefronas, pequeñas unidades funcionales que se encargan de purificar la sangre, eliminar toxinas y mantener el equilibrio hídrico del cuerpo. Son pequeñas, sí, pero su labor es titánica. Y como sucede con cualquier maquinaria compleja, su desgaste se incrementa cuando los obligamos a procesar constantemente alimentos con altos niveles de sodio, fósforo o proteínas.

Por eso, reducir el consumo de alimentos ultraprocesados, bebidas azucaradas y carne en exceso no debería verse como una privación, sino como una decisión consciente de proteger un sistema vital que no siempre da señales de alerta a tiempo. Muchos pacientes llegan a la consulta cuando el daño renal ya es avanzado y las opciones de tratamiento son limitadas.