Jóvenes, mujeres y personas con problemas mentales son las nuevas caras del sinhogarismo

La Orden Hospitalaria de San Juan de Dios ha alertado de qué jóvenes, mujeres y personas con problemas de salud mental son «las nuevas caras del sinhogarismo» que, tradicionalmente, se representaba en el imaginario colectivo con el rostro de un hombre de mediana edad, drogodependiente o alcohólico. Según ha señalado la organización, en la actualidad, el perfil que no siempre va asociado a esa imagen y sí a la de otros factores que emergen socialmente y contribuyen a la desprotección y a la vulnerabilidad, como son la precariedad en la empleabilidad juvenil, la discriminación y violencia de género y los problemas de salud mental.

Según el coordinador del ámbito Social de San Juan de Dios en España, Salvador Maneu, existen unos «indicadores alarmantes, puesto que se trata de realidades emergentes que no se pueden calificar de transitorias, pues se constata un incremento constante de jóvenes que necesitan de recursos residenciales, entre otros muchos, para poder afrontar el futuro».

Tras estas realidades existen una situación de precariedad laboral, un incremento insostenible del precio de alquiler y una falta de red social sobre las que instituciones y Administraciones Públicas «deben hacer una profunda reflexión y acordar un pacto nacional de amplio espectro que tapone esta hemorragia social y ofrezca soluciones estructurales más eficientes».

Frente a esta problemática, FACIAM, una red solidaria formada por 11 entidades que pretenden incrementar el impacto social en este ámbito y de la que forma parte San Juan de Dios, ha decidido apostar por el proyecto Futuro&Co. Este es un proyecto de acompañamiento para jóvenes entre los 18 y 29 años con el objetivo de transformar una situación de vulnerabilidad en una oportunidad de futuro.

A través de ‘Futuro&Co’, estos jóvenes tienen acceso a una vivienda desde la que trabajarán los objetivos que ellos mismos, con el acompañamiento de profesionales, se hayan propuesto para proyectar su futuro. Dentro de la red FACIAM, son cuatro los centros de la Orden Hospitalaria los que forman parte: el Albergue San Juan de Dios y el de Santa maría de la Paz en Madrid, Sant Joan de Déu Valencia y Sant Joan de Déu Serveis Socials Barcelona.

Además, el aumento del sinhogarismo juvenil es una realidad que se está dando en todo el territorio español. Desde el Centro de Acogida San Juan de Dios de Málaga, advierten un repunte en la llegada de jóvenes, menores de 33 años, a este dispositivo en el último año. Algo similar ocurre en los Servicios Sociales San Juan de Dios de Sevilla, donde la oferta de servicios abarca el comedor social, servicio de higiene o trabajo social, y también han detectado un incremento de jóvenes que solicita el acceso a estos servicios.

FACTORES DERIVADOS DEL GÉNERO

Las mujeres en situación de sin hogar son uno de los colectivos más vulnerables, pues en la gran parte de los casos sufren una triple exclusión: por estar en situación de sin hogar, por ser mujeres y por ser víctimas de violencia. En relación con el número de hombres que duermen en la calle, el de mujeres es mucho menor.

Sin embargo, este aumenta destacablemente, como confirman la ocupación de los recursos puestos a disposición de este colectivo. En el Centro de Acogida San Juan de Dios de Málaga explican que el número de usuarias de los servicios de ducha y lavandería es más del doble que el de hace un año. En Barcelona, la presencia de mujeres aumenta de manera destacable en los recursos residenciales de media y larga estancia, representando ya el 25% de las personas atendidas.

Aun así, existe una ausencia de datos sobre las mujeres que se encuentran en situación de sinhogarismo, pero que no viven en la calle, por lo que se trata de una realidad latente, pero que se encuentra oculta, según la organización. «Las mujeres sin hogar están invisibilizadas. El femenino es un sinhogarismo con particularidades, pues a esta situación hay sumarle que muchas de ellas han sufrido abusos, violencia de género, tienen miedo de perder la custodia de sus hijos», ha apuntado Salvador Maneu.

Por ejemplo, el 60% de las usuarias atendidas en el Centro Residencial de Inclusión La Llavor de Barcelona, dedicado específicamente a mujeres en situación de sinhogarismo, ha sufrido violencia machista. En este sentido, Maneu ha indicado que «es necesario un acompañamiento y recursos estables basados en la perspectiva de género, teniendo presentes los factores interseccionales que agravan la situación de vulnerabilidad de estas mujeres».

SINHOGARISMO Y SALUD MENTAL

Las personas que se encuentran en situación de sin hogar y que, además, presentan una patología mental requieren de una atención muy especializada e integral. Pero también se da, cada vez en mayor medida, el hecho de sufrir problemas de salud mental como consecuencia del sinhogarismo.

A principios de 2023, San Juan de Dios puso en marcha el Centro Errondo Gure Etxea en el Hospital San Juan de Dios de San Sebastián, un centro innovador destinado a la atención integral de personas sin hogar y con problemas de salud mental. Las instalaciones cuentan con un hogar residencial con 30 plazas, que incluye una unidad independiente para mujeres en situación de exclusión severa, además de un centro de día con 24 plazas.

Este dispositivo ofrece cobertura sociosanitaria y en salud mental a personas sin hogar y con graves deterioros de carácter personal, relacional y de salud, así como apoyos destinados a promover su inclusión y autonomía personal. Además, San Juan de Dios puso en marcha en Cataluña un hogar residencia para personas sin hogar con trastorno mental en 2015 con 30 plazas en Lleida y en el Parc Sanitari SJD hace más de 15 años que funciona el programa ESMES, dirigido a personas con trastorno mental grave que vive en la calle o en el centro residencial propio de San Juan de Dios o de la red de atención específica.