Los chopitos son una de las tapas más típicas que te puedes encontrar en un bar. Se trata de calamares muy pequeños rebozados, pero hay que pillarle el truco a la receta para que te salga bien. Te vamos a enseñar todos sus trucos para que te queden crujientes por fuera y tiernos por dentro.
Y es que este plato se puede catalogar como uno de los de toda la vida aunque tiene su intringulis. Es una opción muy barata y sencilla para poner como aperitivo o como cena. A continuación, te mostramos la receta de chopitos en cinco minutos que supera a la de cualquier bar.
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LOS INGREDIENTES DE LOS CHOPITOS
Para realizar esta receta se necesitan muy pocos ingredientes. El principal, como no podía ser menos, son los chopitos. También vamos a emplear harina de trigo y aceite para freír. Puedes usar aceite de girasol o de oliva, el que que prefieras para realizar este tipo de frituras. Por último, hay que echarle un poco de sal. Comenzamos a elaborar este plato…
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CÓMO LIMPIAR LOS CHOPITOS
En primer lugar, tienes que limpiar los chopitos. Para ello, ponlos bajo el grifo en un colador para que el agua se lleve los restos de arena que puedan contener. Después, tienes que cogerlos uno a uno y separar los tentáculos del cuerpo. Retírales la columna, que es muy desagradable en la boca. Con una tijera, corta las tripas que están situadas en el interior del animal.
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ÉCHALES UN POCO DE SAL
Una vez que los tengas limpios, puedes déjalos en el colador para salarlos. De esta manera, será mucho más fácil que se reparta entre todos. Échales una pizca de sal, tampoco te pases porque estos cefalópodos ya son un poco salados de por sí. Mézclalos con las manos para llegue a los que están abajo. Ahora llega el momento de rebozar los chopitos…
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EL REBOZADO DE LOS CHOPITOS
El siguiente paso es rebozar los chopitos. Pero antes, debes poner la sartén en el fuego con una generosa cantidad de aceite para que se vaya calentando. Este proceso es inmediato, por lo que no tienes que pasarlos por harina hasta que haya cogido temperatura. Una vez que el aceite esté caliente, puedes rebozar los trozos de este animal por todos los lados.
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LA FRITURA DE LOS CEFALÓPODOS
Una vez que el aceite de la sartén esté caliente y tengas los chopitos rebozados, puedes meterlos en el recipiente. Es mejor que los hagas en diferentes tandas a que los frías todos a la vez porque la temperatura del aceite va a bajar y te quedarán más grasientos. No te descuides, ya que van a tardar muy poco tiempo en alcanzar su punto.
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TIENES QUE DORARSE
Para que no te quede con mucha harina, sacude el exceso antes de meterlo en la sartén. Es complicado acertar con el punto de fritura, por lo que no puedes descuidar los chopitos. Con la ayuda de una espumadera, vete controlándolos de vez en cuando. Sácalos en cuánto notes que cogen un tono dorado. Ya solo queda un paso para finalizar este plato…
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PONLOS EN PAPEL DE COCINA
Cuando notes que los chopitos están en su punto, sácalos con la ayuda de una espumadera. Intenta escurrir su aceite, pero de todos modos ponlos en un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de grasa. De esta manera, vas a quitarle gran parte del aceite que se queda impregnado en el rebozado. Veamos cuál es su resultado final…
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EL RESULTADO FINAL DEL PLATO
Lo único que te queda es retirar el papel de cocina o mover los chopitos a otro plato para servirlos. En tan solo cinco minutos, habrás preparado este plato. Puedes acompañarlos con un limón partido para darle un toque ácido que le sienta muy bien. Como puedes comprobar, es una receta muy sencilla que no tiene ninguna complicación. ¡No dejes que se enfríen!
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