Sanidad y las Fallas trabajan para fijar un «semáforo» que diga qué poder hacer y cuándo según vaya la pandemia

La Conselleria de Sanidad y el mundo fallero trabajan para fijar una especie de «semáforo» que en función de la situación sanitaria por la pandemia de la Covid-19 establezca «diferentes escenarios» que indiquen qué parte de las Fallas podría celebrarse en cada fecha. Esta herramienta permitiría saber a qué atenerse «en el momento en el que se tuviera que tomar una decisión» al respecto.

Así lo ha indicado a Europa Press el presidente de la Interagrupación de Fallas de València, Guillermo Serrano, tras la reunión celebrada este jueves entre representantes de las Fallas de la ciudad y de otras poblaciones, responsables de la Junta Central Fallera (JCF) de València y la secretaria autonómica de Salud Pública, Isaura Navarro, para hablar de las posibilidades de celebración de estos eventos en función de la evolución de la Covid-19.

Serrano ha indicado que el «planteamiento inicial es celebrar Fallas en 2021, sea como sea y sea cuando sea» aunque ha precisado que «el escenario está como está», respecto a contagios y brotes, y que todo dependerá de la evolución e incidencia de la pandemia, de la llegada y dosificación de la vacuna contra la Covid-19 y de la decisión que las autoridades sanitarias adopten teniendo en cuenta estas cuestiones.

«Ese es el pilar fundamental. Se quiere cerrar un ciclo lo antes posible, si pudiera ser en marzo bien y si no, nos tendremos que adaptar a lo que se nos mande» por parte de las autoridades sanitarias, ha señalado. Igualmente, ha insistido en que si en marzo no fuera posible se está abierto a que las Fallas puedan tener lugar «a lo largo de 2021».

«Lo que le hemos pedido a la secretaria autonómica de Sanidad es que dentro de los márgenes y los barómetros que manejan ahora –si estamos en zona roja, granate, verde o amarilla dependiendo de los contagios y de la presión hospitalaria–, que se nos marque» qué se puede hacer en cada uno de estos supuestos, ha explicado el responsable de la Interagrupación.

De este modo, ha pedido, como ejemplo, que se diga: «si estamos en zona roja y granate no se puede hacer nada; si estamos en amarilla, podríamos plantar, quemar –fallas– y hacer actos en la demarcación sin ser multitudinarios, y si estuviéramos en zona verde, esto y esto». Serrano ha considerado que supondría establecer como un «semáforo» para saber cuando «se tenga que tomar una decisión» que hacer.

Guillermo Serrano ha opinado que se tendrá que «esperar a pasar Navidades» para empezar a ver estas cuestiones y a finales de enero o inicios febrero comenzar a decidir. «Hay que esperar a ver cómo evoluciona» la pandemia «para saber en qué situación vamos a estar, más o menos, sobre finales de enero o principios de febrero para tomar una decisión definitiva».

«Ahora mismo hay cuatro niveles de alerta –1, 2, 3 y 4–. Se referencian en colores» y se establece en cada uno «qué se puede hacer», ha comentado, a la vez que ha reiterado la conveniencia de tener una referencia de este tipo para saber cómo actuar.

El responsable de la Interagrupación de Fallas ha agregado respecto a las posibles fechas que «si en marzo la situación no ha mejorado, no se podrán celebrar» las Fallas y «no habrá más remedio que retrasarlas».

«EXCELENTE TRATO»

«Lo importante es hacerlas. Esto cambia todos los días. Todo depende –también– de la vacunación, de que llegue la vacuna, de que llegue en condiciones, de que se pueda vacunar a la gente y de la inmunidad», ha añadido.

Serrano, que ha avanzado que hay nuevas reuniones previstas para seguir hablando, ha valorado el «excelente trato» que el mundo fallero está recibiendo por parte de las autoridades y la «empatía» entre ambas partes para entender el deseo de celebrar las fiestas y la responsabilidad sanitaria. No obstante, ha subrayado que «no serán las fallas quienes digan si habrá Fallas sino Sanidad» y ha resaltado la «responsabilidad» de este colectivo.

Por su parte, la JCF ha explicado, en un comunicado, que el objetivo del encuentro de este jueves era que Isaura Navarro «indicara las directrices generales para poder empezar a trabajar en próximas reuniones los distintos escenarios que se pueden plantear de cara a las Fallas de 2021», teniendo en cuenta que «la grave situación sanitaria actual obliga a pensar en unas Fallas diferentes».

La entidad ha destacado también que todas las partes «se han comprometido a trabajar distintas opciones para que desde Sanidad puedan valorar la idiosincrasia del mundo fallero, poniendo en valor los aspectos culturales y económicos que aporta» esta fiesta.

CONSEJO RECTOR

Por otro lado, el PP en el Ayuntamiento de València ha indicado este viernes, en un comunicado, que su edil Santiago Ballester ha forzado un Consejo Rector de la JCF para aprobar un aumento de las ayudas a las agrupaciones con el fin de pasar del 4% del presupuesto de la entidad a un 8% e «inyectar más de 100.000 euros» en las comisiones de la ciudad.

Ballester ha dicho que ese dinero se podrían usar para aliviar la bajas de falleros como consecuencia de la pandemia y ha afirmado que la JCF tiene presupuesto sobrante de las actividades suspendidas en 2020 que podría ir directamente a las fallas, que están «pasando uno de los momentos más tristes de la historia». El concejal ha confiado en contar con el respaldo de todo el Consejo Rector.